El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, separó hoy del cargo al titular de la estatal Petrobras, Joaquim Silva e Luna, presionado por los repetidos aumentos en el precio de los combustibles y su candidato a reemplazarlo debe ser aprobado por el Consejo de Administración de la firma.
La prensa local venía barajando la salida de Silva e Luna del cargo y a última hora la confirmó el Ministerio de Minas y Energía, que propuso al economista Adriano Pires para el reemplazo. Pires propuso, en intervenciones recientes, que se podría subsidiar más el precio de la nafta y desacoplarlo de las cotizaciones globales.
Se discutirá el 13 de abril su eventual llegada a la presidencia de Petrobras.
Bolsonaro había nombrado a Silva e Luna, un general retirado del Ejército, en febrero del año pasado, disconforme también en ese entonces con los constantes aumentos de precios.
El predecesor de Silva e Luna era Roberto Castello Branco y fue despedido a través de un posteo en Facebook
El mandatario lleva tiempo criticando la política de precios de la estatal, que dispuso aumentos en función del precio internacional del crudo, lo que alimentó la inflación, perjudicial para la popularidad de Bolsonaro, que pretende la reelección en octubre.
Petrobras aplicó a principios de marzo un aumento de 18,8% al precio de la nafta y de 24,9% al del diesel, ante el "aumento mundial de los precios del petróleo y sus derivados como resultado de la guerra entre Rusia y Ucrania".
Las acciones de Petrobras cayeron hoy 2,63% al cierre de la Bolsa de San Pablo.
Petrobras, cuyo accionista mayoritario es el Estado, cerró 2021 con una ganancia récord de US$ 19.875 millones (106.668 millones de reales).
De acuerdo con la última encuesta de la consultora Datafolha realizada en marzo, el 75% de los brasileños cree que el gobierno tiene "mucha" o "alguna" responsabilidad en la inflación que afecta el bolsillo de las familias.