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5 series y películas para ver este fin de semana en HBO Max, Netflix, Star+ y Prime Video

Una selección con las nuevas películas, documentales y series recomendadas para este fin de semana.

5 series y películas para ver este fin de semana en HBO Max, Netflix, Star+ y Prime Video
Oscar Mainieri 04 agosto de 2023

Con tantas plataformas de streaming a nuestra disposición, puede parecer casi imposible decidirse por algo para ver durante el fin de semana

Por eso reunimos en una selección especial las mejores series y películas, que incluye también estrenos en salas de cine, para convertir ese menú interminable en un problema del pasado.

Estas son las series y películas para ver en el fin de semana en HBO Max, Prime Video, Star+ y Netflix.

1. Miniserie para ver en HBO Max: Círculo cerrado

Un secuestro. Un matrimonio que esconde secretos. Dos hermanos enemistados desde hace mucho tiempo. Una detective con problemas mentales. Dos jóvenes inmigrantes de Guyana. Una venganza para borrar la herida ocasionada por otra venganza. Hechizos ancestrales en el corazón de Nueva York. Malas inversiones. Investigadores que tratan de borrar su pasado...

Lo nuevo de Steven Soderbergh (Sexo, mentiras y videos, Traffic, Contagio), esta vez en plena forma, une todos esos puntos y a una docena de personajes que como ratas en un laberinto se rozan, se tocan, se alían y repelen. El guion de Ed Solomon está construido en base a la generación de suspenso y, pese a las variadas aristas, nunca pierde el rumbo en los 6 episodios de una hora.

Claire Danes brilla como la hija de un empresario de comidas (Dennis Quaid, embalsamado en formol) con un pasado turbio y un futuro entre comillas, casada con el aparentemente calmo Derek (Timothy Olyphant). Ambos tienen un hijo adolescente al que le desaparecen misteriosamente diversos objetos...

El personaje de la investigadora con bipolaridad, interpretado por la alemana Zazie Beetz, es un verdadero hallazgo. Su particularidad le permite trasgredir límites: pasa por encima de sus superiores, se mete en lugares en los que no debería y trastorna con sus entredichos a su pareja.

Soderbergh sabe cómo mantener el ritmo y manejar las diversas situaciones con soltura y elegancia. Círculo cerrado es un gran logro en su carrera.

2. Miniserie para ver en Star Plus: Los ángeles ignorantes

Fernan Oztepek es un director nacido en Turquía pero nacionalizado italiano; gran parte de su obra está realizada en el país de la torre de Pisa. En el año 2001 obtuvo un gran éxito con El hada ignorante, una película en donde una mujer descubría que su marido, muerto en un accidente, tenía un amante.

Esta miniserie (8 episodios de 45 minutos) adapta esa historia. El marido (Luca Argentero) conduce una moto, se distrae mirando a una rubia en un descapotable y se estrella contra un auto en un cruce justo frente al Coliseo romano. 

La esposa (la bellísima Cristiana Capotondi), una enfermera dedicada a adorar a su marido y que vive en un tarro, pronto descubre que no era la única ocupante de su corazón: tras idas y vueltas se relacionará con Michele (Eduardo Scarpetta), la otra punta del triangulo en cuestión, un pintor restaurador de cuadros más joven que ella.

Michelle habita en un viejo edificio, en el último piso, y es dueño de una terraza en la que se juntan otros vecinos, un grupo variopinto y de mucha diversidad sexual, con los que la viuda se irá relacionando y trabando amistad. Ese trato le permitirá ampliar sus horizontes y disfrutar de la vida de manera distinta a como lo hacía con su marido, a la vez que le permitirá conocer las historias, los momentos agridulces que viven los nuevos conocidos.

Oztepek no es un gran realizador pero sí es uno de los mejores en plasmar los sentimientos cálidos y afectivos que despliegan sus personajes. Sin llegar a lo empalagoso, sabe cómo lograr un ambiente festivo (¡estos romanos se la pasan de festejo!) o provocar tristeza, y se apoya en muy buenos actores. 

Por más que Oztepek no dirigió todos los episodios, se nota su mano rectora. Hay una homogeneidad a lo largo del relato en el recurrir a temas musicales que crean atmósferas (Mina en los títulos, una canción completa berreada por Bette Davis, Nina Simone, Cesaria Evora), la tonalidad de los colores de la fotografía tirando al pastel, los recorridos de la cámara por una Roma y una Estambul turísticas.

Los ángeles ignorantes proclama lo fluido en las relaciones afectivas, la necesidad de demoler estructuras que obstaculicen el disfrute vital. Está muy bien narrada y es una experiencia en donde lo agradable reina sobre los pequeños momentos oscuros. Muy recomendable.

3. Película para ver en Prime Video: Ciudad de la muerte

En los Alpes austríacos, en medio de bosques escapados de un cuento de hadas, aparece el cadáver de una joven, hija del personaje más prominente del pueblo. El ingenuo detective Hannes Muck (Gerhard Liebmann) determina que se ha tratado de un accidente. Pero con el informe del forense llega de la ciudad el jefe inspector Plôschberger (Simon Hatzl), que cree que se trata de un homicidio.

Muck, que sólo ha visto asesinatos en las películas que pasan por televisión, cree que nadie en su pueblo puede ser un homicida porque conoce a los habitantes desde pequeño y se siente unido a ellos por lazos de amistad. El jefe inspector -de gran experiencia y modales cortantes- guiará la investigación y logrará que caiga la venda que cubre los ojos del bisoño detective.

Con varios sospechosos -el novio de la occisa, el dueño de una cantina que posee una cabaña utilizada con fines non sanctos, un joven delincuente- la pesquisa se torna apasionante para el espectador.

Dirigida con apego a las reglas del relato policial por Andreas Prochaska, con buenas interpretaciones del elenco, unos parajes que cortan el aliento, ciertas dosis de erotismo y abundante tensión a medida que se aproxima el desenlace, Ciudad de la muerte es un entretenimiento seguro. 

4. Película para ver en Netflix: La dama del silencio: El caso Mataviejitas

En la ciudad de México, entre 1998 y 2005, fueron asesinadas por estrangulamiento 48 ancianas. Las investigaciones policiales creyeron en un primer momento que el homicida era un hombre. Más tarde, se orientaron hacia la comunidad trans -dada la espalda ancha y la fuerza en las manos- porque varios testigos decían haber visto a alguna de las ancianas entrando a su casa en compañía de una mujer. 

Tras muchos errores cometidos -se detuvo a una mujer y a un hombre, ella todavía hoy cumpliendo pena, él ya fallecido en la cárcel- se comprobó que la responsabilidad de tantas muertes -al menos se le probaron 17- le cabía a Juana Barraza Samperio- una ex luchadora conocida como "la dama del silencio". Una vez capturada y juzgada se la condenó a 759 años de prisión.

La directora de este documental -María José Cuevas- destaca al evidenciar el caso con abundante material de la época en que sucedieron los homicidios y en imprimirle a su relato un estilo almodovariano. Eso se ve no sólo en el diseño de los títulos, también en la musicalización de ciertas escenas y la burla hacia algunas autoridades que no quedan bien paradas en ciertas intervenciones, tanto del pasado como del presente narrados.

Por ejemplo, un jefe de los investigadores apodado "el tigre" posa ante un gigantesco retrato de uno de esos felinos. Un procurador hace chistes sobre la edad de las asesinadas olvidando que él pasa los 70 años. Las mujeres trans, además de denunciar el maltrato de las redadas policiales, desfilan como si estuvieran ante una pasarela en un show de modas. 

El tono esquizofrénico que eligió la realizadora -por un lado la narración de los hechos cometidos por la primer asesina serial mexicana, con la trágica pérdida de vidas; por otro, la mofa hacia ciertas autoridades relacionadas con el caso- constituye una novedad en este tipo de documentales y le otorga a éste un lugar de preeminencia, aunque para algunos espectadores pueda rozar el mal gusto y constituir una falta de respeto. 

5. Película para ver en HBO Max: Spencer

Desorientada en sus propios pagos, Lady Diana (Kristen Stewart) se aproxima en un descapotable rojo sangre al castillo de Sandringham, donde pasará la Navidad con la familia real. Ya lleva casi 10 años de casada con el príncipe Carlos (Jack Farthing, de sorprendente parecido facial a Julianne Moore) y se ha enterado que le ha regalado a su amante Camila (Emma Darwall-Smith), un collar de perlas exactamente igual al que va a regalarle a ella.

Este es el punto de partida del film del chileno Pablo Larraìn (Tony Manero, Post Mortem), en el que repite una estrategia que le rindiera frutos en Jackie (2016): hacer ingresar al espectador en el sentir de un personaje histórico. En aquel caso era Jackie Kennedy, aquí una Diana Spencer muy alejada de los almidones y brillos de la revista Hola.

En la cena de Nochebuena, rodeada de figurones que controlan cada milímetro de sus movimientos, la tensión que experimenta la muchacha lleva a que el collar se desgrane, cayendo algunas perlas en la sopa de crema de arvejas. Contada desde su punto de vista, la escena es un logro que trasmite al espectador la incesante turbación que experimenta esta heroína gótica moderna. 

No sólo se siente apresada por las miradas de sus parientes, los sirvientes también colaboran en la empresa real. Incluso le han puesto un cancerbero (Timothy Spall, tan disecado como un bacalao) que, como un director de tráfico, la guía sobre lo que sería conveniente hacer para cumplir los protocolos atosigadores o para que se reencuentre con un fantasma, la decapitada Ana Bolena, sorora en desgracia de tantos ensueños y pesadillas.

Entre lujos de vestuario y escenografía, la pobre Diana va dando tumbos en busca del atracón nocturno que compensará momentáneamente las expulsiones orales de su estómago en incontables visitas a los inodoros reales. También volverá -desobedeciendo la ley y el orden- a la ruinosa casita de los viejos en noches de insomnio, en busca del consuelo que no encuentra por ningún lado, salvo en sus hijos y en su mucama y amiga Maggie (Sally Hawkins, notable como es usual en ella), y en algún chef que se conduele de sus miserias. 

Posando como una figura de Playmovil ante las cámaras de los fotógrafos, siempre ávidos de su apariencia para construir a la princesa del pueblo, invocando en relámpagos de memoria a un padre protector, del que sólo quedan jirones de ropa cubriendo a un espantapájaros, Diana entrampada en el castillo boquea como pez fuera del agua.

Spencer es un film irregular, como lo era Jackie, pero bastante imaginativo en muchos de sus tramos, preñado de presagios y atmósferas turbias que le quedan bien a esta figura tan satinada por los medios. Cuento de hadas negro, tiene en la Stewart una intérprete arriesgada que sabe dar una actuación expresionista: quebrada por dentro, adopta posturas más adecuadas para el robot de Metrópolis (Fritz Lang, 1927). No hay más que observar cómo ladea su cuello, rotos los tensores que amasijan la carne con los huesos, para darle chapa de gran actriz.

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