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Biden y la vacuna de Pfizer impulsaron al mundo y Argentina se alivia

Biden-Pfizer
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Luis Varela 10 noviembre de 2020

Por Luis Varela

La segunda semana de noviembre empezó hoy con explosivas subas en las bolsas de todas partes. Y el cierre del día encuentra a muchos inversores pletóricos de sonrisas, aunque el gran oleaje de las primeras horas se fue atenuando, y plantea que el resto de la semana puede tener una suerte repartida.

El gran pulso de la apertura tuvo que ver con dos razones muy especiales. Por un lado, la confirmación de que Joe Biden reemplazará a Trump y que, además, será un Presidente que tendría un Senado republicano, que le frene sus intenciones de subir impuestos. Y por otra parte, el laboratorio Pfizer anunció que su vacuna tiene una eficacia del 90%, que ya fue probada en 43.500 personas, de las cuales 4.500 son argentinos.

La salida de un líder controvertido como Trump y la llegada de un Biden que tendrá problemas para cumplir con sus objetivos de quitarle fondos a las empresas. Mas la certeza de que el fin del Covid-19 puede estar cerca, a 60 o 90 días vista, determinaron un arranque con gran euforia en los mercados globales, con la taba de los negocios dándose vuelta: todo lo que subió en extremo empezó a bajar y todo lo que había sido muy castigado empezó a recuperar.

Sólo por citar dos variables testigo, debe decirse que los metales preciosos (clásico refugio ante momentos de incertidumbre) se cayeron como un piano. Y el petróleo, que es demandado sí y solo sí hay buena actividad mundial, pudo resucitar del pozo en el que había caído. En números concretos, el oro se desplomó 4,4% y la onza de plata cayó 5,7%. Y el barril de crudo, que por momentos se había achicado hasta 35 dólares, pegó un brinco del 8,3%, colocando a las cotizaciones otra vez arriba de los 40 dólares.

Detrás de esos movimientos, las bolsas arrancaron con subas que en algunos casos llegaron a rozar el 8%. Y luego de unas horas, los inversores empezaron a recordar la volatilidad de los últimos tiempos, los precios exagerados que tienen muchos papeles, la prudencia empezó a reinar, y las subas siguieron siendo buenas pero empezaron a moderarse.

Fue tan exagerado el movimiento, que muchos inversores se pusieron en contacto con sus operadores, quienes tuvieron que poner en blanco sobre negro cuál es la situación: "Lo que estamos viendo es una vuelta desde el infierno de papeles que habían sido destruidos, como las empresas de turismo o aviación, que suben 25%. Y del otro lado tenemos a compañías como Zoom, Mercado Libre o Netflix que están cayendo entre 10% y 18%".

Y en línea con ese movimiento, con una Bolsa de Nueva York que está bailando en la cumbre de una burbuja, el economista Luis Secco puso las cosas en blanco sobre negro: "Los precios que tienen muchos activos en este momento son altos y yo tendría cuidado; además, en general, en la primera semana de un Presidente electo siempre hay subas en Wall Street. Pero debe entenderse que la cotización actual de las acciones representa 25 años de ganancias cuando el promedio siempre es de 17. O sea, esto de ahora no es para que cualquiera esté adentro de Wall Street, y mucho menos veo inteligente meterse con estos precios".

Otro de los temas que se debatió, y mucho, fue el sistemático anuncio de los laboratorios, con avances y retrocesos, con rumores que van y vienen y terminan generando pulsos de precios que generan grandes fortunas y gente que pierde muchísimo dinero. No es casual que a lo largo de todo este año el índice de volatilidad, que marca las grandes subas y bajas que tienen los papeles, sea casi siempre uno de los elementos más destacados de la jornada.

Fue tanto el ir y venir de las cotizaciones, que el Dow de papeles industriales, que había superado el 5% de suba en algún momento, terminó con un avance de "sólo" 3%. El S&P500 llegó a rozar una suba de casi 4% y finalizó apenas 1,2% arriba. Y lo más destacado de la jornada fue el tecnológico Nasdaq, que se encumbró hasta acercarse al 2% de suba y al final de la jornada terminó con una baja del 1,5%.

"Muchachos -decía un operador- si con dos noticias buenísima para el mercado, como fueron la aparición de un Biden débil y la vacuna Pfizer a tiro de salir, el Nasdaq termina para abajo, lo que tenemos por delante, sin estas buenas noticias, es la total rotación de inversores, desactivando buena parte de la suba del 60% que acumulan en el año las cinco grandes, y con compra de muchos papeles que están debajo del agua"

Detrás de esa enorme oscilación en los papeles hubo otros dos elementos que dan que pensar sobre los tiempos que vienen. El dólar, que había terminado octubre y arrancado noviembre con gruesas bajas globales, marcó una buena recuperación versus varias monedas. Y los commodities principales, metales básicos insumos de industrias, y granos base de la alimentación, estuvieron mucho más tranquilos, en general mixtos. Lo cual también habla de una perspectiva más cautelosa.

Para Argentina, en cambio, el día fue ciertamente positivo. Ocurre que los papeles locales y la economía toda, está completamente del otro lado: no baila en una cumbre, sino que se arrastra por el fondo de un pozo. Y cualquier dato positivo hace que los precios de los activos recuperen y que el mercado en general se tranquilice.

Hoy en el exterior, el dólar subió 2% contra el yen, 0,8% en chile, 0,5% contra el euro y 0,4% contra el real, pero bajó 0,1% contra la libra y 1,3% contra el mexicano. Pero en Argentina el mercado cambiario entregó otra jornada de calma, con el BCRA comprando dólares en el negocio financiero local, pero perdiendo reservas en el global de todas las operaciones.

El dólar turista subió 53 centavos hasta $140,17. El dólar oficial subió 32 centavos hasta $84,95. El dólar blue cayó $6 hasta $151. El mayorista subió 25 centavos hasta $79,35 . El BCRA volvió a perder reservas: cayeron en US$ 206 millones, hasta US$ 39.318 millones. El dólar MEP subió 40 centavos hasta $141,98 pesos. El CCL subió 37 centavos hasta $147,36 . Y con eso la brecha entre el oficial y el blue fue del 78% y la brecha entre el CCL y el mayorista fue del 86%. Y, debido a los cambios externos, medidos en pesos, la libra subió 37 centavos hasta $104,41 , el real subió 2 centavos hasta $14,73 y el euro bajó 13 centavos hasta $93,77.

Esta tranquilidad cambiaria volvió a potenciar el precio de los bonos, que lograron subir, no demasiado, algo más del 1%, por lo que el riesgo país bajó 37 unidades, hasta 1.354 puntos básicos. En un día en el que el ministro Guzmán realizó una licitación para darle salida a los pesos atrapados que tienen esencial los fondos Pimco y Templeton. En un llamado para colocar bonos en dólares por US$ 750 millones, se presentaron 370 ofertas (275 por el bono AL30 y 95 por el AL35) y hubo adjudicaciones por 43.037 millones de pesos, lo que da un valor de 57,4 pesos por dólar oficial. Con esto, se reducen las necesidades financieras de pagar pesos por un total de $ 22.610 millones en diciembre y $ 20.428 millones durante los primeros meses de 2021.

A juicio de los operadores la licitación por subasta no resultó una convalidación de cierta mejora para los papeles argentinos, ya que al cierre del día el bono AL30 finalizó con una tasa a vencimiento del 17% anual, duplicando lo que pagan países africanos, y el AL35 terminó con una TIR del 14,3%.

Esta negociación es la antesala para recibir a los técnicos del Fondo Monetario Internacional que vendrán por segunda vez en los últimos 40 días, esta vez para pedirle a Guzmán y a Alberto un plan, cierto, con números concretos de inflación proyectada y de rojo fiscal. Y, según se deslizó anoche, la Argentina le pedirá a la misión del FMI cerrar un programa de facilidades extendidas por la deuda de US$ 44.000 millones.

Según definió el propio Guzmán a medios extranjeros, "el programa de facilidades extendidas da un periodo de repago del capital en cuotas entre el año 4 y medio y el año 10, y -agregó- el staff del FMI y el Gobierno argentino consideran que en las circunstancias actuales ese tipo de programa es la mejor alternativa”.

Con baja del dólar, suba de bonos, baja de riesgo país y esta chance de negociación con el FMI, la Bolsa de Buenos Aires tuvo un gran día. Con el mayor volumen diario del mes (1.222 millones de pesos en acciones y 1.837 millones en Cedears) la Bolsa de Buenos Aires subió 2,4%. Hubo papeles muy destacados como YPF y Grimoldi en la Bosla local. Pero lo mejor estuvo en Nueva York, donde hubo un salto de hasta el 11% en los ADR, con YPF y Tenaris en la cumbre de la suba.

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