El Economista - 70 años
Versión digital

vie 19 Abr

BUE 17°C
Día débil para el mercado local

Guzmán coloca deuda corta y cara, y el dólar sigue escalando

La licitación revancha de Guzmán fue con deuda cada vez más corta, y ajustada por inflación, algo que el FMI no quiere

Wall Street no operó este lunes por el Memorial Day (Día de los Caídos).
Wall Street no operó este lunes por el Memorial Day (Día de los Caídos). Archivo.
Luis Varela 31 mayo de 2022

Ayer se conmemoró en Estados Unidos el Memorial Day, en homenaje a los soldados norteamericanos caídos en combate y obviamente no hubo negocios en Wall Street. Y, como siempre ocurre cuando hay feriado en Nueva York, en Argentina el volumen operado con títulos se reduce de manera vertical, pero lo más entretenido es que, como hay más tiempo, comienzan a florecer las conversaciones irónicas entre los ácidos operadores financieros.

Y con ese escenario más distendido, uno de los elementos que más gatilló los "dimes y diretes" entre inversores y analistas fue una frase del ministro de Economía, Martín Guzmán, que ahora que está cada vez más solo (lo dejó Cristina, lo dejó la Cámpora, también lo dejó Sergio T. Massa, y sólo lo sostiene el Presidente) salió a decir algo que suena como tarde, luego de 30 meses de mandato: tras interminables trabas, impuestos y todo tipo de complicaciones, ahora en soledad, el ministro dijo "Argentina necesita que se aumenten las exportaciones: si eso no se hace no habrá dólares y eso es lo que le pega directo a la inflación".

Ni bien se escuchó semejante verdad, en el mercado recordaron una clásica frase muy bursátil: "no hay nadie más comunista que un capitalista contra la pared". Evidentemente en el mercado ven que el titular de Hacienda tiene por delante noventa días muy complicados, en los que difícilmente cumpla con ninguna de las metas acordadas con el Fondo Monetario Internacional, por lo que deberá seguir embretado en los mismos métodos que viene llevando desde que asumió: rojo fiscal, emisión de pesos, colocación de deuda sin parar, falta de confianza, cierre de la economía y, en definitiva, una inflación que lentamente se va espiralizando.

Discurso sobre la inflación

Frente a esa posición, después de que primero todo el kirchnerismo, luego Massa y Alberto, y ahora Alberto solo estuvieron diciendo que toda esta crisis se origina en lo mismo: ¿y qué quieren, con la herencia de Macri, con la pandemia, con la guerra y con los precios internacionales, cómo no vamos a tener una inflación desbocada? Y en respuesta a ese tipo de interpretaciones, el economista Juan Manuel Garzon, del Ieral de la Fundación Mediterránea, salió ayer mismo a difundir un dato en las redes que se hizo viral. Dijo: "en los últimos doce meses el pan francés subió en Brasil 13%, Brasil compra casi todo su trigo en la Argentina y en el mismo lapso el pan francés subió en Argentina 79%", lo cual de alguna manera demuestra que el valor del insumo no es el foco del proceso inflacionario argentino.

Martín Guzmán lo repitió innumerable cantidad de veces "la inflación es multicausal", sin que nunca le adjudicara culpa directa a la emisión de pesos, al excesivo gasto del Estado, a la excesiva emisión de deuda y a la desconfianza que todo eso genera en toda la economía argentina. Y ayer mismo se repitió uno de los elementos que generan mueca en analistas e inversores especializados: ayer en la licitación revancha del viernes (en la que Guzmán colocó 63% de deuda indexada) el ministro volvió a colocar más deuda atada al CER, algo que el FMI le desaconseja por completo.

La colocación de Guzmán

En números concretos, Guzmán recibió ayer apenas 16 ofertas para colocar otros $19.658 millones en Ledes, Lepase y Lecer. El 45% de lo captado se colocó en una letra del Tesoro nacional en pesos a descuento con vencimiento 31 de agosto de 2022 (s31g2 - reapertura) o sea un papel cortísimo, el 35% en una letra del Tesoro nacional en pesos ajustada por CER a descuento vencimiento 19 de mayo de 2023 (x19y3 - reapertura) o sea antes de las supuestas PASO de 2023, y el 20% restante en una letra del Tesoro nacional en pesos a descuento con vencimiento 31 de octubre de 2022 (s31o2 - reapertura) es decir también con un plazo ciertamente reducido.

Con ese parámetro, roleando la deuda que él mismo emitió bajo el mandato de  Fernández, sin haber pagado casi nada de la deuda heredada de Macri, y también sin haber pagado casi nada por la deuda con el FMI, el actual gobierno de Alberto y Cristina Kirchner se ha convertido en el que más endeudó al país en un período de tiempo tan reducido. Eso hace que el financiamiento externo, en dólares, siga cerrado, y que el financiamiento local en pesos se vaya arrinconando. Por lo que el riesgo país sigue colocado en una altura incomprensible de 1.909 puntos básicos, casi 9 veces más alto que el de países vecinos como Brasil, México, Uruguay, Chile y Perú.

El rumbo de acciones y dólares

Con ese esquema, la muy reducida rueda de ayer mostró a los dólares libres sostenidos, al Banco Central logrando sumar reservas (a fuerza de una economía con la importación encepada), con cotizaciones de los bonos prácticamente sin cambios, y con la Bolsa de Buenos Aires operando negocios mínimos ($360 millones operados en acciones y $372 millones en Cedears) por lo que el índice S&P Merval tuvo una baja del 0,5%, muy en consonancia de bajas en el resto de la región. Ya que hubo un descenso del 0,8% en la Bolsa de San Pablo y una merma del 0,6% en la de México.

Y probablemente lo más complicado del caso es que estos resultados vinieron acompañados con indecisiones no solo en las dos principales coaliciones que ominan el arco político del país, sino que también afloran contradicciones en lo que opinan los propios argentinos. 
Ayer mismo se conoció una encuesta de la Consultora Zuban Córdoba, que encontró respuestas absolutamente inverosímiles al recopilar datos entre argentinos medios: el 70% quiere bajar el gasto público, el 75% pide bajar los impuestos, el 60% pide más inversión en obra pública, el 90% quiere más presupuesto educativo y el 87% quiere más fondos para ciencia y técnica. Y no solo esos datos son chispeantes, también encontró que el 65% dijo no hay que dolarizar sino fortalecer el peso y el 64% dijo que hay que eliminar los planes sociales.

Con todos esos elementos, mientras los bonos y las acciones actuaron con debilidad, el mercado cambiario local anotó otro día con el peso débil, no solo contra el dólar sino también contra el euro y la libra esterlina. En el exterior, con feriado en Nueva York, el dólar subió 0,5% en Chile, 0,4% en Japón y 0,3% en Brasil, pero bajó 0,1% contra la libra y el mexicano y cedió 0,5% contra el euro. Y a nivel local el dólar blue subió 50 centavos hasta $207, el dólar MEP bajó $1,20 hasta $209,15, pero el contado con liquidación volvió a subir, esta vez $1,07, hasta $211,77, por lo que en las últimas seis semanas sube casi 13% y la brecha entre el CCL y el mayorista (que ayer cruzó los $120) vuelve a estar en el 76,4%. En un día en el que además, medidos en pesos, el euro subió $1,08 hasta $129,35, la libra subió 69 centavos hasta $151,83 y el real bajó 3 centavos hasta $25,24.

Los pasos de la Fed

Pero alejándonos de un mercado tan chico como el argentino, probablemente el dato más candente y sorpresivo del día vino desde el exterior. El siempre muy certero analista financiero Alberto Bernal (de XP Invesiment, con sede en Nueva York) dijo que tiene en este momento una posición muy optimista para la Bolsa de Nueva York porque ve que la inflación global empieza a descomprimir. Con suma precisión Bernal expresó que "por fin el mercado de renta fija encontró un piso y ese es el movimiento que vimos en el bono de 10 años. El papel a 10 años del Tesoro, que tocó una tasa a vencimiento del 3,1% anual, bajó últimamente al 2,7% y esa es la mejor noticia que podemos tener en la bolsa, porque es lo que define una consolidación en un rango".

Con cálculo muy lógico, Bernal manifestó que "esa consolidación de una tasa larga de la Fed no tan alta es lo mejor que puede pasar para la evolución que viene para las acciones, porque hay una relación inversa entre las utilidades y las tasas de interés. Si se estabiliza el T10 en 2,75% anual, las valoraciones actuales de los papeles bursátiles ya son lógicas para el largo plazo; si eso se cumple el S&P actual es una ganga, un precio muy atractivo".

Bernal reconoció que hay otros analistas que afirman que la tasa larga de la Fed llegará a 5% anual hacia fin de año porque la inflación va a ser mucho más difícil de parar: "Ese es el gran tema, el gran debate que hay en este momento en el mercado, pero yo creo que la inflación va a bajar y no va a ser necesaria tanta tasa. En enero de 2023, cuando conozcamos el índice inflacionario anual, veremos quién tuvo razón, yo la veo en 3,5% anual, en siete meses hablamos y vemos quién acertó. De hecho, ya hay sectores dentro de la economía norteamericana en los que ya arrancaron las caídas de los precios, aunque siguen las subas fuertes esencialmente en energéticos y en alimentos".

Y Bernal cerró su análisis con la siguiente reflexión: "La gran inflación de marzo y abril se dio porque hubo una explosión de consumo en bienes durables con el reparto de dólares de Trump y Biden, pero eso ya no continúa. Yo creo que el petróleo va a dejar de subir. Ya se llegó a un límite increíble: hay Estados donde el galón de combustible se vende a US$ 7, algo que nunca se vio, y ni bien se estabilice la guerra en Ucrania eso cederá, y luego de eso bajarán los alimentos".

En general, los pronósticos de Bernal son muy certeros, pero ayer el mercado de corto operó de manera contraria a su estimación de largo. Cuando todos los centros de análisis esperaban un petróleo debilitándose, criptomonedas más a la baja y granos y metales sin fuerza, ayer se concretaron movimientos absolutamente opuestos. Hubo una suba de casi 2% para el petróleo. Los metales básicos (insumos de las industrias) estuvieron todos a pleno con un alza promedio de casi 2%. Y las criptomonedas, por las que Warren Buffet no da ni US$ 25, anotaron un repunte notable: hubo un rebote de casi 7% para el Bitcoin, con repunte de hasta el 12% en otras criptomonedas, sobre todo en el cardano.

¿Terminará aplacándose pronto la inflación global? ¿Serán necesarias más subas de tasas? Ayer el Banco Central argentino logró comprar US$ 45 M en el mercado único libre de cambios, pero las salidas de dólares por la importación, esencialmente de gas, aún mantienen un saldo muy negativo para Reconquista 266 en el balance de reservas de este mes: en mayo pierde nada menos que US$ 356 M. Y estamos en el mes con más ingresos por la cosecha gruesa. Nadie sabe qué pasará a partir de julio o agosto, cuando llegue el tiempo de vacas flacas. Sin lugar a dudas, el tiempo de descuento para Guzmán está corriendo, y tiene a toda la hinchada en contra.

Seguí leyendo

Enterate primero

Economía + las noticias de Argentina y del mundo en tu correo

Indica tus temas de interés