La recuperación de la actividad industrial en China se sigue demorando

La semana cerró con inflación relevante de las mayores economías del mundo. En Estados Unidos, el Indice de Precios de los Gastos en Consumos Personales, que es la medida de la inflación que más toma en cuenta la Reserva Federal para definir su política monetaria, subió 3,8% anual en mayo. Se trata del registro más bajo en dos años. Por su parte el índice subyacente se mantuvo en un nivel elevado y solo bajó del 4,7% de abril al 4,6%.

El consumo subió solo 0,1% en mayo lo que daría cuenta de un enfriamiento del nivel de actividad. A su vez, los ingresos personales anotaron una suba de 0,4%. Los datos conocidos este viernes no alterarán la política monetaria de la Fed que contempla una suba de la tasa de interés de 25 puntos básicos en julio y otra más antes de fin de año.

En la zona euro, la tasa de inflación bajó de 6,1% anual en mayo al 5,5% en junio según el dato preliminar. Por el contrario, la inflación básica anotó un ligero incremento de 5,3% a 5,4%. Mientras que España y Francia se ubicaron por debajo del promedio, Alemania e Italia lo hicieron por arriba. Más allá de la desaceleración de la inflación, sigue muy por encima de la meta del 2% y por eso el Banco Central Europeo seguirá adelante con su ajuste monetario.

A su vez, en China, la actividad manufacturera se contrajo por tercer mes consecutivo. Y dada su peso en la economía, los analistas esperan que el Gobierno adopte nuevas medidas de estímulo para cumplir con el objetivo de crecer en torno al 5%.