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¿Por qué la gente ama a Ysy A?

Testimonios de un público que lo admira por su energía, su orgullo de ser argentino y la épica de cómo fundó El Quinto Escalón.

El trapero argentino se presentó el sábado 28 de mayo en el Estadio Obras ante 10.000 personas
El trapero argentino se presentó el sábado 28 de mayo en el Estadio Obras ante 10.000 personas
01 junio de 2022

Por Irene Polimeni Sosa.

“Me gustaría agradecerle a Ysy por compartir la cultura argentina. A donde sea que llegue él, llega nuestra cultura directamente, sin filtro. Eso me encanta”. Lali, 24 años, acaba de salir del recital que brindó uno de los máximos exponentes del trap nacional en el predio de Obras Sanitarias. 

Con 10.000 entradas agotadas y un repertorio de cuatro discos y decenas de singles, Alejo Nahuel Acosta presentó el pasado sábado 28 de mayo su show de clásicos frente a un público rebosante de energía. “Yo le agradecería por dejarnos ser parte de la locura que está haciendo” agrega Emilce, “porque es historia, como lo dice él. Es una historia que se está escribiendo, que está re piola y de la que todos estamos siendo partícipes”.

Hay tres ejes que se repiten en lo que la gente que acaba de saltar y cantar con el ícono Ysy A durante dos horas tiene para resaltar sobre él: el amor con el que habla de su música y la energía que transmite con eso, la épica de su historia, que incluye la historia de El Quinto Escalón, y el orgullo con el que realza su argentinidad y rinde tributo a la cultura nacional.

En Avenida Libertador, los bajos de Full Ice, cuarto tema de su segundo disco Hecho a mano, rebotan sobre los edificios. Llega el grito del público coreando el estribillo: “Trap, trap, trap, trap, quieren contarlo ahora”. Este show llegó como respuesta a los pedidos de tocar temas de discos anteriores tras la presentación de Trap de verdad a finales del 2021 en el Luna Park. 

Quizás para algunos ponerle el título de clásicos a temas que tienen, como mucho, 5 años de vida, sea una irreverencia. Pero lo cierto es que es esa misma irreverencia lo que llevó al fenómeno el trap ser lo que es hoy, empujando una historia que -en ese corto período de tiempo- reconfiguró la escena de la música nacional y construyó una nueva épica con sus propios hitos y mitos.

Foto Cris Sille
Foto: Cris Sille.

“Saca un disco por año, por eso tiene un repertorio amplio. Este fue el recital más completo, tocó todos los discos” dice Tomás, 21 años. Él y tres amigos se pisan entre sí para intentar explicarme por qué Ysy A es único. “En un género que nos gusta, saber su historia, todo lo que le costó llegar y cómo apostó al género, saber que es un pionero en lo que hizo, es lo que más nos convoca. El chabón desde los 15 años se subía a los trenes, a los subtes, organizaba competencias de rap”.

“Y encima cómo le gusta lo argentino, eso te hermana", agrega uno de ellos,  “y yo lo siento argentino como la escarapela”. Tomás coincide: “Te hace sentir orgulloso, con la tendencia actual al cipayismo, que haya alguien que representa a las masas y a la gente joven desde un lugar bien argentino. Más allá de que es un género de afuera, él siempre trata de moverlo con lo que es de acá. Como lo que hizo con el tango: hubo una sección del show armada como un espectáculo de tango, porque tiene algunos temas con instrumentales del estilo. Y bueno, eso también a mí me enorgullece. Porque hay raperos que mueven mucho más afuera y él mueve mucho más adentro, y es una decisión eso".

“Me gusta Ysy porque creo que es bien argentino", aporta Lautaro, 22 años. “Las letras me gustan, me gusta la pasión que le pone y hoy el show estuvo genial. Tiene algo muy especial, representa al país. Me emocioné, me encantó, es increíble la energía que tiene. Estuvo 2 horas y media gritando sin parar. Nunca fui a un show de trap así".

En la figura de Ysy A, el orgullo por las raíces se mezcla con una gran conciencia histórica, dando como resultado una voluntad de construir sobre la matriz de la industria musical contemporánea una propuesta que sea nacional y exportable a la vez. Quizás por eso, el auto consagrado Varón del trap toma como referencia el tango y sus figuras. Hay un antecedente muy concreto en Gardel, uno de los primeros artistas argentinos en llevar el color de lo propio a otros continentes, proyectando hacia el mundo un imaginario de lo nacional con base en un fenómeno absolutamente popular. 

Durante la década del '20, las giras europeas del dúo Gardel-Razzano abrieron una puerta que daría paso a la faceta de estrella de cine del ícono máximo del tango, que culminaría en la década del '30 con sus protagónicos en largometrajes estadounidenses.

Foto Cris Sille
Foto: Cris Sille.

“Es realmente un artista”. opina Francisca, que tiene 19 años y está estudiando gestión de medios y entretenimiento con la esperanza de un día producir un show como el que acaba de ver. “Hay muchas figuras importantes ahora pero él tiene algo especial. Es Ysy A, es marca registrada. Quiere hacer un tango, lo hace, y colabora con artistas super valorados de la escena argentina. Y de hecho, es el padre de la nueva escena argentina, digamos. Todo lo que está pasando ahora, es posible gracias a El Quinto Escalón. El chabón se puso ahí en los bondis a juntar plata, tuvo el sueño de hacer una compe y la compe creció. De repente artistas como Duki, Wos o Lit [Killah] salieron gracias a que él hizo una compe en una plaza. Y me parece alucinante cómo eso también expandió el tema de la salida de nuestra música a otros países. Me parece un genio y creo que esto que pasó hoy es totalmente histórico".

El hecho de haber fundado la competencia de freestyle más grande de habla hispana hace que el mote de Varón del trap no le quede para nada grande. La mayoría de las personas que salen de Obras lo siguen desde que era Alejo del Quinto Escalón, antes de decidir volcarse definitivamente hacia la producción de obra y publicar el primer álbum de trap de la historia argentina. En su momento, declaró que el éxito de la estructura que había armado se había desbordado, y que el fenómeno de chicos viendo por YouTube batallas de freestyle no era lo que perseguía, sino la construcción de cultura hip-hop popular.

Esa es una idea que todavía late con fuerza en la propuesta: a la hora de despedirse el músico la remarcó: “Para los que ya me conocen y saben lo que hago arriba del escenario, espero poder verlos muchísimos años más, porque esta es mi vida: yo hago música para estar acá arriba, no para ayudar a Spotify o Internet. Muchas gracias, estoy re feliz”.

La energía celebratoria del encuentro entre la música y su público es una de las potencias que sostienen el fenómeno, y la emana el protagonista de una forma que la gente agradece. El cantante se dedicó a hablar con la manada que festejaba junto a él su trayectoria cada vez que el espectáculo le ofrecía un bache.  Durante el show, una ruleta que giraba entre sus cuatro discos y cuyo combustible era el ruido producido por un público exhortado, dictaba el devenir del repertorio. Además, la compra de merchandising oficial venía con un número para un sorteo que tenía como premio conocerlo y sacarse una foto con él. El ida y vuelta fue la espina dorsal del espectáculo.

Foto Cris Sille
Foto: Cris Sille.

Juan Pablo y Santiago tienen 14 años, pero escucharon en vivo al padre de la actual escena nacional en el 2018, cuando tenían 11. “A Ysy lo escuchamos desde El Quinto Escalón. Lo vamos a volver a ver el finde que viene. Fuimos al Luna y al Moreno también. Hoy no tengo muchas palabras, siempre me emociona verlo", dice Juan Pablo.

Matías, que tiene 15, también está conmovido, y es porque a él le tocó ganar el sorteo y encontrarse cara a cara con su ídolo. “La mejor experiencia de mi vida”, dice. “Se nota que es una muy buena persona. Compré una remera, y me dieron esto -muestra el papelito del sorteo con su mano temblorosa- y salió. Me siento de manera inexplicable, estaba temblando cuando me saqué la foto. Inolvidable esta noche. A él lo sigo hace un montón, desde que estaba en El Quinto. Era muy chico, crecí con él. Nunca en mi vida había ido a un recital en un estadio, es la primera vez. Sonó todo excelente. Me gustaría decirle a Alejo que con sus canciones me alegra la vida, literalmente. Todos los días. No importa lo que esté sintiendo, si pongo una canción de él, esa sensación se dispara".

Algo parecido me dice Julieta, que también acaba de conocer a la estrella junto a su amiga Florencia, y lo primero que dice al salir es que no puede creer lo suave que es su piel. “Cuando sube historias [a Instagram] diciendo 'ánimo mi gente, arriba que es lunes' y cosas así, te anima de verdad. Qué se yo, a la gente la ayuda, a mí me ayuda. Y eso lo agradezco un montón. Por eso quizás acá hay una energía tan linda. Es como si estuviéramos todos juntos, como si nos conocieramos todos, todos hermanos".

De alguna manera, la trayectoria de Ysy A se conforma en un ida y vuelta que mucho tiene que ver con sentirse parte de algo que convoca por igual a los que están arriba y abajo del escenario. Del deseo de hacer freestyle y encontrar otra gente que compartiera ese interés, Alejo Acosta hizo una matriz de producción de cultura que hoy le devuelve la energía de 10.000 personas cantando y saltando al ritmo de sus temas.

“Miles de gracias a ustedes por hacer el mejor show de todos frente a mis ojos” publicó el Varón del trap en su Instagram “casi que no lo podría creer si no fuésemos nosotros, los amo. Nos vemos de nuevo en una semana, preparen sus almas para hacer el doble de fiesta”. La próxima y última presentación de Ysy A en Obras es el próximo sábado 11 de mayo: una cita con la energía de la historia nacional viva.

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