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Se acerca al récord pos canje

Por la incertidumbre, el riesgo país pegó otro salto

El Gobierno trabaja en varios frentes para ver si se recupera de la derrota en las primarias y el riesgo país voló de nuevo.

El riesgo país se acerca a su récord pos canje.
El riesgo país se acerca a su récord pos canje. Archivo.
Luis Varela 13 octubre de 2021

Alborotadas, como si se tratara de hormigas a las que en las PASO les patearon el hormiguero, las máximas personalidades del Gobierno están manoteando todo lo que encuentran para ver si pueden cambiar el ambiente de pesimismo y derrota que persiste, a pesar del "plan platita", que inundó sobre todo la provincia de Buenos Aires, con mucha atención también en Chubut, La Pampa y Santa Fe, ya que ahí se elegirán senadores. 

Con medidas que tendrán un gran impacto una vez que el último voto entre en la última urna, los manotazos de ahogado que se están tomando operan en diferentes frentes. El principal, que por ahora no parece haber tenido gran resultado, es seguir repartiendo dinero, bonos y regalos, con seguimiento sobre todo de los que no fueron a votar. Pero también hubo gran actividad el lunes, ayer, y también la habrá hoy, insistiendo con más de lo mismo frente al FMI en Washington, y en reuniones con empresarios a nivel local, que en horas recibirán presiones para que las olas de aumentos de precios se frenen de alguna manera. 

Sin embargo, así como la mayor parte de las encuestas afirman que la distancia de votos parece no alejarse demasiado de lo que ocurrió en las PASO (veremos), los empresarios escuchan y reciben presiones, y vuelven a escuchar la misma canción: "El acuerdo con el FMI no se hará por ahora, vendrá en los primeros meses de 2022, pero es importante que entre todos logremos que en estos días cruciales la economía se estabilice". 

Insólitamente, con la misma receta repetida desde hace años, el Gobierno cambió de lugar a Paula Español, colocando en su lugar en la Secretaría de Comercio Interior a un kirchnerista más duro, con la idea de presionar a las empresas para que los precios no suban, asustando cada vez más a la inversión, por lo que la producción de bienes seguirá en retroceso y el resultado será exactamente inverso a lo que se busca: la inflación no será mayor por pretensiones de ganancias sino por escasez de productos, desabastecimiento. 

La negoción con el FMI 

Y Guzmán está recibiendo en Washington otra vez el mismo disco rayado: la inflación y el gasto no tienen ancla, la súper emisión de pesos está complicando más las cosas, no se ve un horizonte viable. Y los que directamente heló la sangre de los que se enteraron de parte de las negociaciones fue el contundente rechazo a bajar las tasas por recargos y la proyección de que la inflación de 2022 se mantendrá en la zona del 50% anual, o incluso por encima de ese nivel. 

Buscando encontrar caminos de salida, se programó una reunión para este viernes en Nueva York, con Guzmán, a la que iría también el jefe de Gabinete Juan Manzur, para juntarse con inversores y darles garantías de que se encontrará algún camino. Pero todos ven un peronismo muy dividido, nadie sabe quién quedará en los puestos claves después de la elección. Y es tanto el desconcierto, que el peronismo dividido terminó por suspender el acto del 17 de octubre, con grupos que van en diferentes direcciones. 

Pero por si todo ese disloque económico y político no fuera suficiente, ayer hubo un dato sanitario que hizo mover las cabezas Argentina volvió a tener números más altos de Covid, con 56 muertos y 1.064 datos detectados en las últimas 24 horas. Aunque lo que generó temor vino de Rusia, ya que ese país tuvo ayer un récord de fallecidos para un solo día, casi 1.000 muertos en las últimas 24 horas, con aceleración de contagios y hospitalizaciones. Con una ola que hizo que la ministra Carla Vizzotti saliera a decir que el país va a prepararse para una tercera dosis. 

Mercados en baja  

Mientras los mercados del mundo mostraron una marea roja leve en casi todas las bolsas (ayer hubo bajas del 0,2% en Nueva York y San Pablo siguió preocupando con otro descenso del 0,4%), en Argentina se vivió una rueda financiera (después de muchos feriados) con más de lo mismo: dólares financieros firmes, acciones sostenidas, bonos muy hacia abajo, un riesgo país que se acerca al récord pos canje, todo con un BCRA que logró sumar reservas, pero que siguió chupando depósitos, a cambio de Leliq, de una manera que deja a todos con la boca abierta. 

La compleja situación económica que está dejando el Covid en casi todas partes (con súper abundancia de dinero y problemas en las líneas de producción de las empresas, todo con alta inflación) sigue provocando volatilidad en los inversores, tanto que ayer se siguieron bajando de las acciones, no fueron a las criptomonedas, pero continuaron los capitales en dirección al dólar, seducidos por tasas del Tesoro de EE.UU. que rinden algo más: 1,07% anual a 5 años, 1,57% a 10 años y 2,10% a 30 años. Así, ayer en el exterior el dólar subió 0,2% contra el yen y 0,1% contra el euro, no cambió contra la libra y con baja del 0,1% contra el real y el chileno, con baja del 0,5% contra el mexicano. 

En Argentina, mientras tanto, con la inflación presionando, persiste la decisión de grandes grupos empresarios de achicar lo más posible sus posiciones en pesos, hasta ver qué pasa con la elección y qué tipo de gobernabilidad queda en el país. Así volvió la presión sobre los 14 dólares de Alberto, a la que el Gobierno respondió (con el ultra cepo) quemando bonos, entregando hipoteca futura, con cada vez más chance de que sea reperfilada o reestructurada, haciendo lo que sea para que los dólares no se disparen antes de las urnas. 

De ese modo, mientras el BCRA tomó la enormidad de $349.723 M en Leliq al 38% anual y los bancos pagaron 37% en plazos fijos, Economía se prepara para realizar mañana una nueva licitación de deuda, tratando de conseguir pesos para que la maquinita del BCRA frene y para que esos pesos que hay en el mercado no presionen sobre el dólar. Así y todo, ayer el dólar turista bajó 9 centavos hasta $172,38, el oficial bajó 6 centavos hasta $104,47 pesos y el blue cerró sin cambios a $185. El dólar mayorista subió 15 centavos hasta $99,09 y, gracias al súper cepo, el BCRA logró sumar US$ 54 millones a las reservas hasta US$ 42.901 millones. Pero el dólar Senebi saltó $1,37 hasta $191, el MEP subió 33 centavos hasta $176,78 y el contado con liquidación subió 32 centavos hasta $176,87.

La brecha entre el dólar oficial y el blue fue del 77% y la del CCL y el mayorista fue del 78,5%. Medidos en pesos, la libra subió 6 centavos hasta $134,69, el euro subió 4 centavos hasta $114,27 y el real bajó cuatro centavos hasta $17,91. Y los nuevos dólares alternativos, negociados a través de ADR, Cedears o criptomonedas, ya flotan arriba de los $193. 

La colocación de bonos 

Y todo eso sucedió con el Gobierno ofreciendo bonos a dos manos, tanto que el precio promedio de los titulos públicos argentinos bajó ayer 2%, por lo que el riesgo país pegó un salto de 17 unidades, hasta 1.619 puntos básicos, otra vez muy cerca del récord que sufre el país desde el canje de deuda que realizó Guzmán en agosto del año pasado.  

La parte si se quiere contradictoria del día vino por el lado de las acciones. Con $1.023 millones de pesos operados en acciones y $3.044 millones en Cedears, la Bolsa de Buenos Aires subió 0,5%. Mientras que los ADR argentinos en Nueva York estuvieron mixtos, con buen día para IRSA P y con una rueda durísima para Edenor. 

Al cierre del día, el operador Nicolás Chiesa, de Portfolio Personal hizo una lectura que se repitió en todo el mercado: "Los bonos caen por el ruido en la negociación con el FMI y la elección, hay mucha incertidumbre. No se sabe qué pasará con el dólar después de las urnas, esta brecha es insostenible. Al mismo tiempo, hay algunos que se animan a las acciones porque tienen precios muy bajos, aquí hay una usina de oportunidades, pero que también te puede destruir. Ante esta situación el grueso de los inversores opta por estar dolarizado, parece lo más seguro. Un bono atado al dólar puede ser una salida, pero el problema es que tienen poca liquidez y después de la devaluación vender podrá ser un problema". 

Con esa respuesta, el Ministerio de Economía saldrá mañana a colocar más deuda, si puede. Habrá tres papeles para los denominados formadores de mercado y una letra y un bono para inversores. El menú será una letra del Tesoro nacional en pesos a descuento con vencimiento 31 de enero de 2022 (s31e2 - reapertura); una letra del Tesoro nacional en pesos a descuento con vencimiento 28 de febrero de 2022 (s28f2 - reapertura); una letra del Tesoro nacional en pesos ajustadas por CER a descuento con vencimiento 30 de junio de 2022 (x30j2 - reapertura); una letra de liquidez del Tesoro en pesos a descuento con vencimiento 8 de noviembre de 2021 (nueva) (solamente para fondos comunes de inversión) y un bono del Tesoro nacional en pesos a tasa Badlar privada más 5,25% con vencimiento 6 de febrero de 2023 (tb23p ? reapertura). 

Mientras Argentina está sumergida en esta turbulencia, las commodities siguen desconcertando al más pintado. Ayer el petróleo se mantuvo en su cumbre de siete años, los metales preciosos estuvieron casi inmóviles, los metales básicos muestran todo débil salvo el aluminio que vuela, y hubo una pausa en la ferviente suba de criptomonedas. Pero la peor noticia para la Argentina vino por el lado de los granos: hubo resultados mixtos para el trigo, el maíz y el girasol, pero la soja acusó una fuerte caída tanto en Chicago como en Rosario. Hace cinco meses el yuyito estaba a US$ 610 y ahora cotiza a US$ 440, lo cual parece indicar que además de aceptar el ajuste con el FMI, puede no haber un loto agropecuario en un 2022 que pinta inflacionario y con bajo crecimiento. 
 

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