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Entrevista

Sebastián Sicardi, Gerente General de Kia Argentina: "Los importadores elevamos la vara y obligamos a la industria a actualizarse"

A cuatro años de haber asumido en el cargo, dialogamos con el responsable de una de las marcas referente del sector. Su análisis de este período, sus pedidos al nuevo Gobierno y sus proyecciones de cara a lo que se viene.

Sicardi es un referente de la industria automotriz con una larga trayectoria en diferentes marcas, tanto a nivel local como regional.
Sicardi es un referente de la industria automotriz con una larga trayectoria en diferentes marcas, tanto a nivel local como regional.
Sergio Cutuli 20 febrero de 2024

Sebastián Sicardi es un referente de la industria automotriz con una larga trayectoria en diferentes marcas, tanto a nivel local como regional. Desde hace cuatro años comanda las operaciones de Kia Argentina, una marca que en nuestro mercado es representada por la firma internacional Astara.

A pesar de tratarse de que Kia es un gigante con un peso importantísimo como grupo y en distintos países donde está presente, en el mercado doméstico se las ingenia para traerle a una clientela fiel las últimas novedades, a pesar de los constantes cambios de reglas por parte de sucesivos gobiernos.

-Por estos días estás cumpliendo cuatro años al mando de la filial local de Kia, ¿qué es lo que más rescatás de este tiempo?
-Bueno, obviamente que es un período muy particular, signado por la pandemia y la cuarentena, y después por las restricciones a la importación entre ellas la brecha cambiaria, la disponibilidad de dólares, SIRAs, SIMIs, etc.

En ese contexto, la evaluación de los importadores en general y de Kia Argentina en particular, sufrimos mucho. El mercado ya venía golpeado los últimos dos años con una caída, por pérdidas significativas a nivel negocio y esto hizo que nosotros termináramos cayendo de nuestro volumen histórico entre 15% y 20%, y eso es un golpe muy fuerte.

Lo que rescato como positivo es que tuvimos la capacidad como organización, como empresa y como equipo de Kia y de concesionarios de adaptarnos a eso y llegar "al final del camino" sanos y preparados para lo que viene. 

Por otro lado, también hay algo muy positivo es que en estos cuatro años, en los que nosotros acá estábamos "en otra temática", a nivel internacional, Kia vivió un rebranding absoluto; tuvo lanzamientos de nuevos productos, siguió creciendo en calidad, tecnología y posicionamiento, por lo que la conclusión es que pasados estos cuatro años terminamos mucho más fuertes y preparados para un futuro más promisorio.

Creo que cuando la economía argentina y el mercado automotor argentino se normalicen nos encontrarán sanos, con toda nuestra red y con una marca muchísimo más fuerte como para salir a ganar mercado.

"Estos cuatro años terminamos mucho más fuertes y preparados para un futuro más promisorio", remarca Sicardi.
"Estos cuatro años terminamos mucho más fuertes y preparados para un futuro más promisorio", remarca Sicardi.

-¿Y con Astara, la empresa madre que tiene a Kia en Argentina, cómo fue la relación en estos años, cómo se les explica tantos vaivenes?
-Es una empresa que está desde hace 22 años en Argentina, antes era SK Bergé pero es el mismo grupo, y tiene mucha experiencia de lo que es nuestro país ya que de hecho se radicó en 2001 y a los pocos meses vivimos esa recordada crisis... Mis interlocutores regionales e internacionales de Astara ya tuvieron relación con el país por lo que entienden perfectamente la situación.

Nuestro CEO nos dijo recientemente en un evento global que uno de las características salientes de la compañía es su flexibilidad; a pesar de ser una multinacional no es burocrática ni está llena de protocolos, es una empresa súper ágil donde las cosas se resuelven muy fácil, adaptadas a cada país y donde hay una cabeza muy abierta.

En ese sentido tuvimos todo el apoyo y obviamente nuestra responsabilidad durante este tiempo fue justamente no llevar problemas, tener la situación bajo control, mantener los números en verde y valernos por nuestra cuenta para no generar problemas a nivel global, y eso lo logramos con creces.

-¿Con qué expectativas iniciaron 2023 y con cuál lo cerraron, sabiendo que se venía un cambio de Gobierno y de políticas?
-Teníamos expectativas de mantener los volúmenes del año anterior porque sabiendo que el comercio estaba tan regulado no había expectativas de crecimiento. Sí esperábamos más previsibilidad porque desde noviembre 2022 que operamos con dólares propios para pagar nuestras importaciones, y la tuvimos.

No es que fue fácil. porque esa forma de operar obviamente es más cara, ya que hay que asumir costos, pero el beneficio es mayor previsibilidad y eso se logró.

También teníamos previsto el lanzamiento de la Nueva Sportage que por cuestiones de capacidad industrial y abastecimiento y de que el auto realmente fue un éxito a nivel mundial desgraciadamente para la Argentina se atrasó, entonces teníamos previsto lanzarlo en el primer semestre pero recién pudimos hacerlo en noviembre, pero era el gran hito de nuestro año porque históricamente es el vehículo de pasajeros más vendido en la historia de la marca en Argentina.

Fue un año difícil, retomando, porque fue siempre en clima electoral y cada una de esas etapas, las PASO, las generales y el balotaje, generaban incertidumbre y paralización para el mercado y los clientes; en ese contexto las decisiones había que tomarlas prácticamente todos los días y recalcular.

La Nueva Sportage se lanzó en noviembre pasado, un año dominado por la agenda electoral.
La Nueva Sportage se lanzó en noviembre pasado, un año dominado por la agenda electoral.

-¿El diálogo con el Gobierno como cámara de importadores se cortó en algún momento y cómo piensan que será en esta nueva etapa?
-No, siempre mantuvimos el contacto, haya o no salido públicamente nuestros reclamos y pedidos. Los integrantes de CIDOA tenemos un rol muy importante en el mercado argentino y eso es lo que nosotros queremos comunicar y transmitirle al gobierno y a los clientes, fundamentalmente.

Somos generadores de dinámica e innovación constante ya que, al tener la capacidad de elegir los productos, elevás la vara al traerlos localmente y obligás a que la industria local se actualice. Además de algún modo regulás los precios porque evitás el oligopolio, somos innovadores en temas de seguridad y en temas de electrificación estamos listos para picar en punta... 

Ese es el rol de CIDOA y es el que como Kia queremos tener y poder ofrecer a nuestros clientes el mismo producto que puede encontrar en todo el mundo, a los precios más adecuados en la medida que las regulaciones y las cargas impositivas lo permitan. Además no venimos a afectar ninguna estructura industrial porque también somos generadores de empleo.

-Pero esto último alguna vez eso se puso en duda...
-Esas son cosas que se dijeron y sin argumento, pero se puede refutar. Te hago una cuenta simple: si vos calculás la cantidad de empleados por auto vendido o por dólar consumido por importaciones, nosotros generamos más empleo por auto vendido que las terminales. Y cuando digo nosotros no me refiero a CIDOA solamente sino a todo el conjunto: importadores, concesionarios, talleres, etc.

El hecho de podernos entrar en un ritmo de crecimiento, sin tantas distorsiones y regulaciones, haría que eso se pueda multiplicar rápidamente y es lo que queremos transmitirle al nuevo gobierno desde CIDOA, para que nos apoyen sin querer afectar a nadie.

-¿En el tema híbridos y eléctricos tienen pensado también un planteo como cámara?
-Es un tema que está en stand by pero entiendo que como en todos los mercados en los que se desarrolló la electrificación se debe contar con un incentivo que en el caso de nuestro se debe revisar para que haya igualdad de condiciones en lo que hace a aranceles para todos, seas una terminal o un importador.

Al fin y al cabo los modelos híbridos y eléctricos que llegan son todos importados así que sería lógico que tengamos las mismas condiciones.

-Los clientes, que están cada vez más informados, suelen demandar mucho de las marcas. ¿Cómo se le explica al cliente argentino de Kia que las condiciones para operar no van siempre de la mano ni siquiera de lo que ustedes mismos quisieran ofrecerles?
-Efectivamente, y tenemos fundamentalmente una clientela muy fiel que busca reemplazar su Kia por la nueva generación; es el caso de los dueños de Sorento que ya están con ganas de renovar sus unidades y no lo pueden hacer, por lo cual les estamos ofreciendo Sportage pero algunos prefieren esperar.

Como son clientes informados a la vez saben bien que no es una falta de compromiso de la marca sino que es una cuestión coyuntural y están a la expectativa de que esto se corrija.

-En ese sentido están dando un primer paso con Niro HEV.
-Sí, lo estamos exhibiendo en Costa Esmeralda a modo de anticipo de su lanzamiento. Se trata de un modelo híbrido, no enchufable, con muy buenas prestaciones, un diseño muy atractivo y una calidad que sorprende. Nuestra intención es lanzarlo en el segundo semestre del año.

El Kia Niro HEV se muestra en la Costa Atlántica, anticipando su arribo al país.
El Kia Niro HEV se muestra en la Costa Atlántica, anticipando su arribo al país.

-En un mercado dominado por los SUV anunciaron que desde México comenzarán a importar un auto compacto. ¿Hay mercado para este tipo de vehículo?
-Cremos que sí. Hablamos del Kia K3 que tiene dos siluetas, una sedán que ya se está fabricando y una cross, que se fabricará este año. La idea es traer ambos, a lo mejor con algunos meses de diferencia uno del otro, y que estimamos esté disponible para fin de año debido a las demoras que aún existen en el proceso de homologación.

El K3 es un proyecto interesante porque está orientado a todos los mercados de Latinoamérica en los cuales el sedán sigue siendo buscado porque se da que sigue habiendo clientes y la oferta es cada vez menor. Además tiene la particularidad de que es un segmento B+ con confort de marcha y desempeño de un auto superior, sumado a su calidad de materiales y al nivel de asistencias a la conducción que ofrece.

La variante cross es quizás aún más interesante para el público argentino y por su origen nos permitiría dar un salto en cuanto a volumen y visibilidad de marca.

El Kia K3 se produce en México y llegará a fin de año a la Argentina.
El Kia K3 se produce en México y llegará a fin de año a la Argentina.

-¿Más exitoso comercialmente que lo que buscaron serlo con el Kia Rio?
-Hay una cuestión de temporalidad porque cuando se lanzó acá el Rio hecho en México se dieron dos devaluaciones lo cual hizo que con costos absolutamente en dólares el auto quede descalzado, después el mercado en general se desplomó y no le permitió a Kia dar ese salto.

Teníamos un producto interesante en el momento incorrecto, ahora el K3 es un producto mucho más interesante, más innovador y -si Dios quiere- en el momento correcto. Estamos confiados en que podremos "cambiar de escala".

-¿Qué podés revelar acerca del desembarco de Kia en el segmento de las pick-ups?
-No puedo contar lo que ví, pero ¡es espectacular! (se ríe). Lo que puedo confirmar es que está previsto el desarrollo de una pick-up mid-size pura y dura, doble tracción, con chasis, y cuya presentación está prevista para el año que viene. Obviamente que, una vez que esté disponible, en Argentina lo queremos y creemos que tiene un nicho interesante para nosotros.

Claro que nos va a ser difícil competir masivamente frente a la oferta de camionetas locales pero con la calidad de producto que tenemos... Si una marca que lidera todos los rankings de confiabilidad a nivel mundial hace una pick-up, la expectativa es altísima, vamos a tener un producto que va a ganarse su lugar.

Una "mula" de la que será la primera pick-up de Kia en lanzarse al mercado.
Una "mula" de la que será la primera pick-up de Kia en lanzarse al mercado.

-La última, en condiciones normales e ideales, ¿cuánto tiene para ganar Kia en el mercado doméstico?
-No quiero hablar de volumen porque dependerá del mercado total que tengamos; hoy tenemos un mercado total de 400.000 o 420.000 unidades, hemos llegado a tener 980.000 que no creo que volvamos a tener el corto plazo, así que a mediano plazo un mercado de 600.000 o 650.000 unidades es algo lógico y que dependerá de cómo crezca la Argentina y demás.

En ese contexto, tenemos como base lo que ya hicimos en su momento que fue el 0,4% que fue nuestra participación histórica (N. de la R: Kia cerró 2023 con el 0,1% de share). Creemos que con la evolución que tuvo la marca en los últimos años, con el K3, con la pick-up y con más diversidad de modelos, sumado a los distintos grados de apertura que se concreten podemos aspirar a un nuevo piso de 1% de mercado y de ahí pensar en un crecimiento hasta 3% o 4%, en el mejor de los escenarios.

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