Hace más de 10 años comencé a potenciar mi marca personal en LinkedIn y a estudiar tanto el comportamiento, como la presencia de miles de líderes, profesionales, emprendedores y empresas en las redes sociales.
En 2017, comencé a divulgar sobre employee advocacy, cuando pocos lo estaban haciendo en Latinoamérica y el término era prácticamente desconocido en la comunidad profesional.
Aunque algo hemos evolucionado, todavía queda mucho camino por delante.
Durante todos los años subsiguientes, tuve la oportunidad de impulsar y entrenar, en estos temas, a decenas de empresas multinacionales, distinguidas PyMEs, universidades, personalidades y ejecutivos C-Levels, en más de 15 países.
Conozco en profundidad los desafíos y oportunidades del employee advocacy, tanto en LinkedIn como en las demás redes sociales. Pero no quise quedarme solo con un sesgo subjetivo, por eso realicé una investigación sin precedentes, de la que participaron más de 190 líderes de más de 10 países de LATAM.
Esta obra nace con la convicción de abrir caminos y hacer una gran contribución al mundo corporativo y despertar la conciencia en aquellos líderes que buscan marcar la diferencia en las redes sociales.
Estoy convencido que es el momento para impulsar el employee advocacy. Principalmente en LinkedIn, que ha crecido de forma notable. Esta disciplina debe ocupar un lugar importante, en la estrategia de comunicación, de las empresas que quieran impulsar el branding corporativo, la marca empleadora y el negocio.
Asumí el riesgo de profundizar y darle entidad a una disciplina que tiene mucho desarrollo por delante. Es un libro que parece para pocos, pero en realidad es para muchos. El desafío es demostrarte, de forma clara y contundente, los motivos y mi hipótesis.
Hipótesis
En términos de comunicaciones de marketing y hábitos de comportamiento de compra, las redes sociales lo cambiaron todo. Entre empresas y clientes, emergieron los influencers, un eslabón para construir confianza e influir en las decisiones de compra, en públicos objetivo.
Ya conocidos por todos, se trata de personas que se han ganado la confianza y credibilidad de grandes comunidades de usuarios en las redes sociales. Van desde mega figuras internacionales y líderes de opinión (más de 1M de seguidores), hasta macro influencers (entre 100K y 1M de seguidores), micro incluencers (entre 10K y 100K seguidores) y nano influencers (menos de 10K seguidores).
En efecto, un estudio de Civic Science descubrió que el 14% de los jóvenes de 18 a 24 años y el 11% de los millennials habían comprado algo en los últimos seis meses porque un blogger o un influencer se los recomendó.
¿Por qué tomaron un lugar tan protagónico en términos de marketing? Muy simple. Un influencer que recomienda una empresa o producto o servicio muchas veces tiene más credibilidad y mayor tasa de conversión que la publicidad tradicional, una tendencia que crece cada vez más en las nuevas generaciones.
Las empresas lo saben, por eso la inversión en Influencer Marketing crece año tras año. Precisamente, un 28% entre 2022 y 2023. Según datos de Influencer Marketing Hub, se trata de un mercado de u$s 21.1 billones para 2023.
Pero el marketing de la influencia no se trata solo de pagarle a un influencer para que haga publicidad de tu empresa. Cualquier cliente (brand advocate) o empleado (employee advocate), que promocione y defienda espontáneamente tu marca en las redes sociales y ejerza influencia positiva sobre sus amigos, familiares, conocidos y colegas, también estará contribuyendo.
En marketing se llama UGC (User Generated Content) a las publicaciones, menciones y reseñas realizadas por usuarios en las redes sociales, sitios web y blogs. Sean clientes, ex clientes o potenciales clientes, que crean contenidos vinculados a tu marca: todas acciones que las empresas incentivan con desafíos, concursos, consignas o hashtags, para desarrollar una comunidad de seguidores y brand lovers.
Por su parte, el Brand Advocacy es un concepto del Influencer Marketing, que hace referencia al sentimiento positivo hacia una marca, que tienen determinados clientes que ejercen como defensores de esta de forma espontánea, felices de compartir sus contenidos y recomendarla. Los brand advocates o brand lovers son los clientes que sienten devoción por una marca.
Se denomina employee advocates a los empleados motivados por pertenecer a tu empresa, que promocionan y la defienden espontáneamente en Internet
Cada vez más empresas invierten en construir confianza y lograr recomendaciones externas, ya sea mediante alianzas y patrocinios con influencers como impulsando acciones de Brand Advocacy, para premiar y reconocer a sus brand advocates.
Sin embargo, son pocas las empresas que prestan atención a uno de los activos más valiosos en términos de crear confianza y credibilidad. Hablamos de las recomendaciones internas: la voz de sus líderes y empleados en las redes sociales.
Se denomina employee advocates a los empleados motivados por pertenecer a tu empresa, que promocionan y la defienden espontáneamente en Internet.
Todos los contenidos publicados y la defensa que tus empleados hagan en nombre de tu empresa se enmarcan dentro del campo del employee advocacy.
La confianza que ejercen los líderes y empleados no solo influye en las preferencias de compra de los clientes, sino que puede transformarse en una fuente de captación y fidelización de talento, de los mayores desafíos para cualquier empresa en la actualidad.
Ahora bien, existe una clara asimetría en la inversión que realizan las empresas, entre el marketing de la influencia y el employee advocacy. Está claro, muchos de sus empleados no acumulan más de 10K seguidores en sus redes sociales. En términos publicitarios, su poder de influencia es menor al de un influencer. Sin embargo, en términos de creación de confianza y credibilidad su influencia podría ser mayor. Mucho más, si se trata de atraer talento. Mucho más si es en LinkedIn, donde hay pocos mega y macro influencers.
Este contexto representa la piedra angular de esta obra, que se basa en una investigación, que buscó entender qué políticas e iniciativas están tomando las empresas para impulsar a sus propios líderes y empleados, como embajadores de marca.
Se trata de un viaje en profundidad, para que las áreas de Dirección General, Marketing, Comunicación, Recursos Humanos y Ventas puedan sentarse en una mesa a analizar los beneficios del employee advocacy para su negocio.
La hipótesis es contundente: hay una enorme oportunidad para que las empresas amplifiquen el branding corporativo, potencien la marca empleadora y generen nuevos negocios, mediante la voz, las comunidades y los contenidos de sus propios embajadores de marca internos en las redes sociales: líderes, colaboradores y empleados.
La oportunidad es transversal a todo tipo de organización y país. Aunque hay países con menor o mayor desarrollo en términos de employee advocacy.
Hoy, encontraremos empresas que ya han tomado la delantera y otras que todavía tienen que recurrir a Google o ChatGPT para entender de qué estamos hablando cuando hablamos de employee advocacy.
Espero que, ahora, muchos más profesionales recurran y recomienden a esta obra sin precedentes, para entender esta disciplina en toda su dimensión.
Hablemos.
