Sobre el cierre de la semana se conocieron datos sobre la economía europea mejores a los que se esperaban y que suman a otros, como la desaceleración de la inflación en Estados Unidos, que consolida un panorama más optimista para el arranque de 2023.
En el caso de Alemania, el PIB no mostró variaciones en el último trimestre del año pasado evitando una contracción que habían anticipado muchos analistas.
- Las chances de que Alemania y la zona euro sufran una recesión técnica, definida como dos trimestres de caída de la actividad, se alejan y el escenario más probable es el de una leve expansión en 2023 que no llegaría al 1%.
La clave en el mejor desempeño de la economía de la zona euro es la caída de los precios de la energía como consecuencia de un invierno que fue muy benigno en materia climática.
También el Reino Unido presentó números de actividad mejores a los esperados con lo que se aleja el riesgo de una recesión en lo inmediato.
- Todos esos datos pesarán a la hora de tomar decisiones de política monetaria en las reuniones que tendrán en los primeros días de febrero, la Reserva Federal, el Banco Central Europeo y el Banco de Inglaterra.
En el caso de la economía china que depende mucho de la dinámica de su sector exportador, los últimos datos no fueron tan alentadores.
En diciembre, las exportaciones cayeron 9,9% con relación al año anterior como consecuencia de la desaceleración de la actividad global. Por su parte las importaciones declinaron 7,5% frente al mismo mes del año pasado.
De todas maneras, el superávit comercial del mes fue de US$ 78.000 millones por lo que cerró el año con un saldo positivo de US$ 877.600 millones lo que constituyó un récord.
Los datos de diciembre implican un desafío para las autoridades que apuntan a un crecimiento del PIB del 5% y el desempeño de las exportaciones es clave para logarlo.
Una expansión de esa magnitud haría que la segunda economía del mundo supere ampliamente al promedio dado que el Banco Mundial acaba de proyectar un crecimiento del PIB global de 1,7% en 2022.
A su vez, el índice de actividad económica que elabora el Banco Central de Brasil registró en diciembre una caída de 0,55% con relación a noviembre. Se trata de la cuarta caída consecutiva y es un dato compatible con las proyecciones de los analistas del mercado que ubican la suba del PIB en 2023 por debajo del 1%.
