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La brecha cambiaria en su menor nivel desde que se fue Guzmán

Tras las reuniones de Massa en EE.UU., el mercado local volvió a tener un día positivo: bajaron los dólares libres, subieron los bonos y bajó el riesgo país

La brecha entre el dólar oficial y el blue bajó al 82% y la del CCL y el mayorista bajó al 97%
La brecha entre el dólar oficial y el blue bajó al 82% y la del CCL y el mayorista bajó al 97%
Luis Varela 13 septiembre de 2022

En otro día positivo, marcado centralmente por las reuniones que tuvo Sergio Massa en EE.UU. con la secretaria del Tesoro Janet Yellen y con la titular del FMI Kristalina Georgieva, todo parece ir encaminado para que se apruebe la nueva auditoría del Fondo, y que pronto llegarán los esperados DEG por US$ 4.000 millones que permitirán seguir pagando sin problemas la deuda con ese organismo.

Con ese importante paso que sigue barriendo los problemas de corto plazo, el mercado local siguió con la tónica que se extendió durante toda la semana pasada: hubo más liquidación de soja, más entrada de reservas al Banco Central, nueva debilidad de los dólares libres, lenta aceleración de los dólares oficiales, una brecha cambiaria que volvió a ceder al menor nivel desde que Guzmán pegó su portazo, los bonos mejoraron, el riesgo país bajó otro peldaño y lo único que no mostró la misma fuerza fueron las acciones, que pegaron un freno, con menos volumen operado.

Todo este componente local estuvo de alguna manera gobernado por un dato que se conocerá hoy en Estados Unidos. Se dará a conocer cuál fue la inflación de agosto. Y justamente en torno a Yellen se deslizó que el mes pasado (tal como sucedió en Brasil) la inflación norteamericana puede haber tenido deflación del 0,1% o del 0,2%, lo cual llevaría la inflación anual al 8%. 

  • El dato es auspicioso, generó tranquilidad en los inversores porque puede indicar que la Fed no sea tan agresiva con su tasa de interés y detrás de esa posibilidad la Bolsa de Nueva York volvió a festejar.

Paradójicamente, las tasas largas de EE.UU. siguieron firmes (operaron al 3,7% anual a 1 año, 3,5% a 5 años, 3,3% a 10 años y 3,5% a 30 años) y esos rendimientos con una inflación anual que podrá estar por ahora en el 8%, sin tener certeza de que pueda ser efectivamente manejada con gran facilidad, volvió a generar debilidad para el dólar global, que retrocede de su cumbre de 20 años: ayer en el exterior el dólar subió 0,2% contra el yen, pero bajó 0,3% en México, 0,8% contra el euro y la libra, 1,2% en Chile y cedió 1,3% en Brasil.

Estas tasas norteamericanas y la debilidad del dólar hace que el mundo financiero no esté tan confiado en la reputación de Jerome Powell, titular de la Fed, que estaría preparado para subir la tasa corta en otros 75 puntos básicos  dentro de una semana, pero se cree que EE.UU. no iría a una recesión sino a un aterrizaje suave, por lo que muchos imaginan que la Fed terminará subiendo su tasa corta en sólo medio punto en octubre, por lo que quizás no se cumpla el temor de que las tasas largas norteamericanas lleguen a un inquietante 5% anual.

El dólar y las commodities 

Esta expectativa de menor inflación en EE.UU., con tasas de la Fed quizás no tan agresivas, y un dólar en consecuencia más débil, generó un contra movimiento muy temido, que puede derivar en una tendencia absolutamente contraria. Ayer, en un día con precios de las commodities en general tenso, hubo una suba del 2,3% para el petróleo, un firme repunte para los metales preciosos (sobre todo la onza de plata) y las criptomonedas (que son usados como refugio). Al tiempo que los metales básicos también se desperezaron y el dato quizás más positivo para Argentina fue un fuerte salto para la soja en Chicago y Rosario, con mejoras para el maíz, algo que no es tan bueno para el mercado local, por su impacto en los alimentos.

A nivel local siguió la liquidación de divisas de parte de los sojeros aunque con un número no tan importante como se vio jueves y viernes. Igualmente, las reservas del BCRA lograron subir en US$ 144 millones. Y esa corriente terminó debilitando a los dólares financieros, que se enfrentar con una leve aceleración en el crawling peg (micro devaluación diaria) de los dólares oficiales. 

Así, en línea con lo que pasaba con el mundo, a nivel local el dólar blue bajó $2 hasta $272, el Senebi bajó 84 centavos hasta $281,84, el MEP bajó 17 centavos hasta $269,39 y el contado con liquidación bajó 98 centavos hasta $279,90. pesos. Por lo que la brecha entre el dólar oficial y el blue bajó al 82% y la del CCL y el mayorista bajó al 97%, en ambos casos muy lejos del 135% que hubo en algunos momentos con Silvina Batakis.

Detrás de ese movimiento cambiario, esta vez fueron los titulos públicos los que funcionaron mejor. Los bonos argentinos anotaron una suba promedio superior al 1%, por lo que el riesgo país cedió en 17 unidades, hasta 2.306 puntos básicos, a punto de romper el piso de 2.300 puntos, algo que no se consigue desde el 23 de junio pasado, una semana antes de que Guzmán pegara el portazo, cansado de que Cristina, La Cámpora y todo el kirchnerismo le impidiera hacer lo que Massa está haciendo ahora, con más velocidad que el universitario de Columbia.

La posibilidad de que hoy EE.UU. anuncie que tuvo deflación en agosto fue como un elixir para los inversores altamente especulativos de la Bolsa de Nueva York, que se volvieron a montar en el caballo de la recuperación. Así, el Dow mejoró 0,7%, el S&P avanzó 1,1% y el Nasdaq trepó 1,3%. Al tiempo que gracias a los buenos precios de los commodities y el dólar débil, la bolsa de San Pablo subió 1% y la de México mejoró 1,7%.

En Buenos Aires, sin embargo, no hubo festival bursátil en absoluto. Tras las verticales subas de las últimas siete semanas, ayer con $2.335 millones operados en acciones y $4.406 millones en Cedears, la Bolsa de Buenos Aires terminó con una suba mínima. Mientras que los ADR argentinos que operan en Nueva York actuaron mixtas, con subas de hasta el 3,5%, con TGS, Mercado Libre y Telecom, en el tope, pero con bajas de hasta el 2,6% con mal día para Bioceres, Cresud, Francés y Galicia.

La visión del mercado 

¿Qué trasfondo está viendo el mercado? Ayer hubo un comunicado de los productores de soja para que sigan pagando $200 por dólar durante todo octubre, no sólo hasta fines de setiembre como está planeado. Hay 15 sectores que piden el mismo dólar para sus productos que exportan vinculados a la agroindustria. Y hay una firme protesta por la suba en las tasas de financiamiento que se les aplicará a los productores que no vendan casi toda la soja que tienen en los silos.

En principio se cree que Massa finalmente tendrá el "sí" del FMI para aprobar la auditoría, por lo que llegarían los DEG para pagar los vencimientos que hay con el Fondo, justamente equivalentes a los US$ 4.000 millones que nos entregarían, por lo que en definitiva serían una especie de asiento contable, que durará en el Banco Central apenas cinco o seis semanas.

Y la gran pregunta es qué pasará el día después. Porque ayer mismo se vio que la liquidación de soja fue importante, pero no tan grande como en los días anteriores, y la debilidad del dólar mep fue mucho menor que la semana pasada. Esto quiere decir que los pesos están llegando a las cuentas y que los productores van o al mep o a comprar insumos importados. Queda bastante confirmado, según datos oficiales del Banco Central, que no están yendo a plazos fijos, ya que el stcok total de esa colocación está congelado desde hace dos semanas, cuando naturalmente tendría que subir al compás de lo que va pagando la tasa.

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