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El PJ acostó al Gobierno, pero el riesgo país igual bajó

El peronismo kirchnerista ganó una batalla en el Congreso. La reacción del mercado fue levemente negativa. Los dólares libres subieron. El BCRA perdió reservas por el pago de deuda en dólares. La Bolsa la pasó mal. Pero los bonos subieron y el riesgo país bajó.

Hubo mucha turbulencia en el Gobierno
Hubo mucha turbulencia en el Gobierno
Luis Varela 10 julio de 2025

Como buen alumno de su maestro Gildo Insfrán (que le acaba de hacer un corte de manga a la Corte Suprema para seguir gobernando Formosa hasta que las velas no ardan), el senador formoseño José Mayans demostró este jueves que el peronismo fuma debajo del agua, entrampó a los legisladores oficialistas e incluso le puso la tapa a los gobernadores y, en plena campaña electoral, le dio sanción definitiva al aumento de jubilaciones y otros gastos que afectarán seriamente al equilibrio fiscal que busca mantener el Gobierno de Javier Milei como ancla de todo su intento de estabilización.

Como siempre, cada parte buscaba defender su propio interés, sin interesar demasiado lo que pase con el horizonte de la economía argentina y de los habitantes que viven en este país, pero un gambito de Mayans les puso una arandela en la nariz y los hizo trotar, llevándolos de una rienda. El Gobierno quería que nada se convalidara en el senado, al punto que durante parte del día hubo notables tironeos entre la ministra de Seguridad Patricia Bullrich y la vicepresidente Victoria Villarruel (con las dos tirándose una estocada tras otra). Los gobernadores querían que sus representantes en el Senado votaran primero la suba de los adelantos transitorios, para que fuera más dinero a las provincias, y que se dejara sin votar el resto. Pero Mayans dio vuelta el orden, llamó a una sesión autoconvocada (algo que jamás había sucedido en Argentina) y puso el carro adelante de los caballos: primero se votó lo que quería el peronismo kirchnerista (buscando desestabilizar al gobierno nacional y ganar votos para la campaña) y dejó para el final lo que esperaban los gobernadores.

La reacción del Gobierno

Conocido todo este movimiento hubo mucha turbulencia en el Gobierno. Por momentos se empezó a decir que la sesión fue ilegal, por ser autoconvocada, sin ser llamada por Villarruel. Pero como varios abogados constitucionalistas dijeron que no se había roto ninguna regla, sino que se había jugado al fleje, mientras los senadores dialoguistas con el Gobierno se retiraban, el peronismo kirchnerista casi entre carcajadas logró sancionar el mínimo aumento para los jubilados, con 52 votos a favor, pero que bastará para poner en juego el superávit fiscal de 2026.

Detrás de todo esto, desde la órbita del Milei se empezó a decir que el veto es imparable, algo que de producirse seguramente le hará pagar un costo político al Presidente cuando faltan 59 días para la elección bonaerense y 108 días para la nacional. Y habrá que ir contando bien el poroteo, ya que habrá que ver si en Diputados o en el Senado se logra contar con legisladores todavía amigos que frenen con esta astuta, casi gauchesca, jugada del peronismo kirchnerista, que hizo girar una taba cargada en el aire, dejando al oficialismo con la espalda al norte.

La respuesta del mercado

¿Qué reacción tuvo todo esto en el mercado? Por supuesto, todo el ajedrez legislativo se fue desarrollando a lo largo de toda la jornada, y los votos concretos se conocieron recién después del cierre. Por lo que hubo alguna reacción sobre los dólares libres (más en el blue que en los financieros), al tiempo que los dólares oficiales no se movieron. Y como el Gobierno pagó puntualmente los cupones y la amortización de los Bonares y Globales por US$ 4.200 millones, el BCRA volvió a perder reservas. La Bolsa volvió a tomar mal todo lo que pasó, por lo que las acciones y los ADR argentinos en Nueva York bajaron. Pero los bonos lograron subir e, increíblemente, el riesgo país bajó. Con algunos analistas dijeron: "esto fue mejor que en los ´70, años en los que estuvieron a los tiros, y mejor que en 2001, momento en el que se desbancó a los radicales: fue una sublevación, pero institucional; veremos ahora cómo vota la gente en septiembre y en octubre".

Todo este enfrentamiento legislativo argentino tuvo como marco una situación mundial en la que el Presidente de EE.UU. Donald Trump sigue moviendo los brazos como un molino y lanzando amenazas a diestra y siniestra. Sin que se sepa que cosa es cierta, Trump ordenó que EE.UU. le envíe más armas a Ucrania, pero el Pentágono desobedeció sus órdenes, por lo que de un momento a otro puede haber alguna represalia interna. Y a nivel global, la Casa Blanca movió otra vez su campana, anunciándole a Lula da Silva que EE.UU. le subirá los aranceles al 50%, porque Trump dice que Brasil lanza una "caza de brujas" contra el ex presidente Jair Bolsonaro.

La voz de Trump pierde impacto

Pero como lo que dice Trump es seguido cada vez con menos atención, la tasa larga de EE.UU. sigue firme: se pagó 4,1% anual a 1 año de plazo, 3,9% anual a 5 años, 4,3% anual a 10 años y 4,9% anual a 30 años. Y con eso, en el exterior el dólar subió 0,3% contra el franco suizo, 0,2% contra el euro y 0,1%s contra la libra y el chileno, pero bajó 0,1% en México, China y Japón y cayó 0,7% en Brasil.

Entretanto, a nivel cambiario local, con el dólar oficial a $1.279,22, el BCRA no intervino en el mercado de cambios, pero al final del día la autoridad monetaria perdió reservas por otros US$ 376 millones por terminar de completarse todo el pago de los Bonares y Globales. La posibilidad de que el equilibrio fiscal se resienta, hizo subir un poco más los dólares libres: el dólar blue saltó $15 hasta $1.295, el Senebi subió 93 centavos hasta $1.283,46, el MEP subió $6,96 hasta $1.266,96 y el contado con liqui subió $9,34 hasta $1.271,34. Por lo que la brecha entre el oficial y el blue fue del 1% y la del CCL con el mayorista fue del 1%.

Rueda positiva para los bonos

Pero, como los operadores empezaron a recibir consultas sobre posibles títulos para realizar reinversiones (algo que no había pasado el 9 de enero de este año, el panel de títulos públicos operó con buen volumen, y muy diversificado. De ese modo, los bonos argentinos subieron 0,6%, y en un día en el que Milei perdió una batalla en el Congreso, el riesgo país bajó 25 unidades hasta 679 puntos básicos, testeando el nivel piso de los últimos 30 días.

A nivel papeles privados, hubo otro día en verde en la Bolsa de Nueva York, ya que el Dow avanzó 0,4%, el S&P subió 0,3% y el Nasdaq mejoró 0,1%. Al tiempo que la Bolsa de San Pablo bajó 0,5% y la Bolsa de México subió 0,1%. Y, otra vez, lo más afectado fue el mercado bursátil argentino: con $75.814 millones operados en acciones y $110.300 millones en Cedears, la Bolsa de Buenos Aires bajó 2,6%. En tanto que los ADR argentinos en Nueva York sufrieron una baja en bloque del 1% al 3,5% para BBVA, Macro, Mercado Libre, Galicia, Bioceres, Supervielle, Loma Negra, TGS y Edenor.

Inestabilidad en commodities

Finalmente, las commodities tuvieron una evolución que indica que la situación global no está en absoluto tranquila. Hubo una baja del 2,2% para el petróleo. Los metales preciosos estuvieron para arriba, sobre todo la onza de plata, que fue a máximos en 14 años. Los metales básicos estuvieron firmes. Los granos volvieron a perder precio tanto en Chicago como en Rosario. Y los reflectores del día estuvo en el panel de criptomonedas, ya que hubo una suba del 2,3% para el bitcoin con salto de hasta el 15% para el resto de los valores de ese panel.

¿Hay tranquilidad en alguna parte? La respuesta es "no". La empresa Nvidia subió un poco más, se convirtió en la empresa con más capitalización bursátil del planeta, con un valor de equivalente seis Argentinas. Todas las empresas vinculadas a los microprocesadores están volando, hasta niveles incomprensibles, llevando a los índices bursátiles a récords absolutos. Y, justo en este momento, el magnate Jeff Bezos, otro que fuma abajo del agua, acaba de vender 928.000 acciones propias de su preciada empresa Amazon.

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