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Desastre

El desastre invisible del campo: 6 millones de hectáreas bajo el agua, US$ 2.000 millones en pérdidas y cero obras

La cuenca del río Salado sufre su peor inundación en años: millones de hectáreas anegadas, cosechas perdidas y una economía local paralizada por la falta de obras.

Inundaciones en la zona núcleo: US$ 2.000 millones bajo el agua
Inundaciones en la zona núcleo: US$ 2.000 millones bajo el agua
18 noviembre de 2025

Las inundaciones en la cuenca del río Salado dejaron casi 6 millones de hectáreas afectadas en el corazón productivo bonaerense y provocaron el mayor desastre hídrico en años, según Carbap. De esa superficie, cerca de 3,8 millones de hectáreas corresponden a tierras productivas, con pérdidas económicas que podrían trepar a US$ 2.000 millones por la imposibilidad de sembrar y por el freno total de la actividad agrícola.

Las imágenes satelitales muestran que unas 2 millones de hectáreas siguen bajo agua, mientras que en muchas otras la falta de accesos y el deterioro del suelo vuelve imposible trabajar. Municipios como Bolívar, 9 de Julio, Pehuajó, 25 de Mayo, Lincoln y Carlos Casares concentran más de 1,1 millón de hectáreas inundadas, dejando a productores sin margen de acción en plena ventana de siembra de soja y maíz.

Carbap advirtió que 1,5 millón de hectáreas agrícolas podrían quedar totalmente improductivas este año. Si pudieran haberse sembrado, generarían unos US$ 2.000 millones en 2026, un flujo económico que se perderá. El impacto alcanza no solo a productores: contratistas, transportistas, comercios y pymes ya sienten la caída de actividad, mientras que los tres niveles del Estado sufrirán una baja en la recaudación.

La entidad rural apuntó contra la falta de avance de las obras del Plan Maestro del Río Salado, paralizadas o demoradas desde hace más de una década. Señala que la provincia prevé recaudar más de US$ 70 millones extra por el aumento del inmobiliario rural en 2026, pero solo destina US$ 4 millones al plan. A nivel nacional, recordó que el Estado recauda más de US$ 1.000 millones por retenciones en esta región sin asignar fondos al Salado en el próximo presupuesto.

Frente a este escenario, Carbap reclama un compromiso efectivo de municipios, provincia y Nación para completar las obras hídricas y fijó un objetivo preciso: que el Plan Maestro esté terminado en 2030. "La conclusión es simple: todos perdemos, mientras las obras siguen sin aparecer", resumió la organización.

 

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