En Brasil, los analistas del mercado, cuyas proyecciones económicas releva semanalmente el Banco Central para elaborar el informe Focus, ajustaron a la baja el Indice de Precios al Consumidor Amplio de 3,71% a 3,65%, por lo que se volverá a cumplir con la meta de inflación cuya tasa central es de 4,25%. Para 2020, la suba esperada del IPCA pasó de 3,90% a 3,82%. Por otra parte, el mercado proyecta que el dólar se cotizará a 3,80 reales a fin de año, lo que implicaría una baja desde su nivel actual, pero se trata de un pronóstico muy condicionado a lo que ocurra en el mercado global de divisas. Con relación a la tasa Selic, se estima que terminará 2019 en 5%, un punto porcentual menos que su nivel actual.
En materia de actividad, los analistas corrigieron la suba esperada del PIB en 2019 de 0,83% a 0,80% y de 2,20% a 2,10% para 2020. La producción industrial, a su vez, no tendría variaciones este año, pero se expandiría 2,50% el próximo. A Brasil le sigue costando mucho volver a crecer luego de la recesión sufrida entre 2015 y 2016.
El frente externo presenta mejores números dado que se espera que el desequilibrio de la cuenta corriente llegue a US$ 20.00 millones, US$ 1.250 millones que en el Focus anterior, mientras que mejoraron las perspectivas para el superávit comercial que llegaría a US$ 52.850 millones. En el frente fiscal, los déficits con relación al PIB serían de 1,37% en el caso del resultado primario y de 6,20% en el nominal. De todas maneras, los analistas estiman, que reformas mediante, ambos desequilibrios se reduzcan en 2020.
De cumplirse estos pronósticos, Brasil no contribuirá a la recuperación de la economía argentina durante este año pero sí puede hacerlo, moderadamente, en 2020.
