El astro argentino Lionel Messi revolucionó el fútbol de Estados Unidos con su llegada al Inter Miami. La euforia por tener contacto con el rosarino es peligrosa a tal punto que los hinchas podrían generar algunos desbordes y pasiones extremas. Es por eso que a pedido del ex futbolista británico David Beckham, uno de los directivos del club de la Florida, decidieron contratar a un guardaespaldas para protegerlo y evitar que ningún fanático se le tire encima.
Yassine Cheuko es el encargado de mantener la seguridad de Messi en todo momento, tanto afuera como adentro de la cancha. Se trata de un ex soldado del ejército de los Estados Unidos que combatió en Irak y Afganistán como Navy Seal, y ahora protege la integridad del campeón del mundo.
Cheuko, experto en artes marciales mixtas, taekwondo y boxeo, es la sombra de Messi en todo momento. Nadie le hace una marca más personal al rosarino que su propio guardaespaldas. El seguimiento es total e incluso camina al lado del campo de juego para garantizar la seguridad del argentino.
No importa en qué lugar esté el rosarino que, en caso de que se requiera su ingreso, lo hace sin dudar. Se dio en el encuentro de anoche ante Los Angeles FC cuando un hincha, distinguido con la camiseta del Barcelona, invadió el campo de juego para abrazar al mejor jugador del mundo, pero Yassine interceptó rápidamente al hincha, que fue retirado sin haber cumplido con su objetivo.
Según informaron algunos medios internacionales, Cheuko cobra US$ 3 millones por año para cuidar a Messi. El ex militar se ha hecho una figura mediática y desde que protege a la mega estrella del fútbol mundial es querido por todos, a tal punto que pasó a tener más de 180 mil seguidores en su cuenta de Instagram.
Messi arribó a Estados Unidos para disfrutar con su familia luego de su turbulenta estadía en el Paris Saint-Germain, de Francia, y el club decidió protegerlo con un guardaespaldas para que puedan estar más tranquilos.
Yassine es uno de los tantos que protege a la familia del "10" del conjunto rosa y negro, que actualmente dispone de más de 50 guardias de seguridad para garantizar también el bienestar de Antonela Roccuzzo y sus hijos Thiago, Mateo y Ciro.
