El presidente de EE.UU. Donald Trump prometió su "lealtad eterna al trabajador estadounidense" durante una conferencia de prensa del Día del Trabajo el lunes.
Trump aprovechó la ocasión para atacar a su rival en las elecciones presidenciales de noviembre, diciendo que el candidato demócrata Joe Biden y su compañera de fórmula, la senadora Kamala Harris, "destruirían el país y la economía".
Biden, prometiendo ser el presidente laborista más fuerte de todos los tiempos, estuvo en Pensilvania para una reunión en la Federación Estadounidense del Trabajo y Congreso de Organizaciones Industriales (AFL-CIO) con el presidente del sindicato Richard Trumka. Se llevó el apoyo de los trabajadores organizados.
Harris comenzó una visita del Día del Trabajo al estado crítico de Wisconsin al reunirse con la familia de Jacob Blake, el hombre negro desarmado que quedó parcialmente paralizado cuando un oficial de policía blanco le disparó en la espalda.
