El suministro de gas comenzó a normalizarse ayer en todo el país a partir del arribo de barcos con gas natural licuado (GNL) y las negociaciones mantenidas entre los sindicatos y el Gobierno, según informó ayer el Ministerio de Energía y Minería a través de un comunicado.
Tras concluir el primer día de corte del suministro por parte de los petroleros de Tierra del Fuego como forma de reclamo salarial y en repudio a las subas de tarifas de gas en la provincia, la cartera que conduce Juan José Aranguren, difundió que ayer se importaron en promedio 1.800 MW de Brasil y Uruguay con el objetivo de mantener el suministro sin cortes a las estaciones de GNC, al tiempo que se resolvió “flexibilizar la instrucción de corte en la industria y llevarla al nivel de consumo mínimo técnico”.
“La planta de la empresa Total Austral, que inyecta gas al sistema nacional, sigue paralizada desde anoche y así va a continuar”, confirmó a Télam ayer el secretario gremial de los petroleros jerárquicos, Moisés Solorza.
Sin embargo, el Ministerio de Energía se mostró confiado en que en las primeras horas de mañana pueda amarrar un barco de GNL en el puerto de Bahía Blanca, lo que ayudará a abastecer el mercado y permitirá “flexibilizar la instrucción de corte en la industria y llevarla al nivel de consumo mínimo técnico”, según el comunicado. La misma medida afecta a las usinas eléctricas.
“En la medida que se normalice la inyección gas al sistema argentino, se irán liberando consumos en todo el país”, confió.
