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COP26: ¿la última oportunidad para detener el cambio climático?

Las discusiones en Glasgow estarán centradas en el Acuerdo de París firmado en 2015, en el que los países acordaron reducir las emisiones de gases de efecto invernadero para limitar el calentamiento global a 2 grados. A seis años de aquel hito, las cosas no van por buen camino

COP26: ¿la última oportunidad para detener el cambio climático?
Damián Cichero 29 octubre de 2021

La próxima semana comenzará uno de los eventos más esperados del año. Entre el 31 de octubre y el 12 de noviembre se celebrará en Glasgow, Escocia, la 26° Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP26), lo que para muchos podría ser la última oportunidad para combatir el calentamiento global. 

El acrónimo COP corresponde a la Conferencia de las Partes, la cual representa a todos los signatarios de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (CMNUCC), adoptada en Nueva York el 9 de mayo de 1992. Actualmente, cuenta con la participación de 197 partes: 196 países y la Unión Europea. 

Básicamente, la principal misión de la COP es mantener los esfuerzos internacionales para resolver los problemas del cambio climático. Una de sus acciones más importante es la examinación de las comunicaciones nacionales y los inventarios de emisiones presentados por las partes, ya que, en base a esta información, la COP evalúa los efectos de las medidas adoptadas por cada actor y los progresos realizados. 

En esta ocasión, la COP de Glasgow será la vigesimosexta edición del evento, el cual se celebra desde 1995, y tendrá como lema “Uniendo al mundo para hacer frente al cambio climático”.

La COP26 constará de varias partes. Se iniciará con el encuentro de los mandatarios de todo el mundo, mientras que la segunda semana se concentrará en la negociación de los compromisos que se adquirirán individual y colectivamente. 

Por otra parte, la COP contará con dos zonas diferentes. Por un lado, está la azul, que estará destinada a aquellas personas acreditadas por la CMNUCC, en donde los delegados de los países se reunirán para negociar. Por el otro, está la verde, que es para el público en general. 

La importancia de esta edición 

Por obvias razones, el tema que se tratará en la COP26 es importante de por sí. Sin embargo, la cumbre de Glasgow representará el primer evento internacional masivo desde el inicio de la pandemia del coronavirus, ya que se esperan unos 25.000 visitantes. 

Además, justamente por la pandemia, esta será la primera vez en más de dos años que los líderes mundiales se verán personalmente para discutir sobre este asunto. La última cumbre sobre el clima fue la COP25 en Madrid, España, en 2019.

Las discusiones en Glasgow estarán centradas en el Acuerdo de París firmado en 2015, en el cual los países acordaron reducir las emisiones de gases de efecto invernadero para limitar el calentamiento global a 2 grados Celsius, e idealmente 1,5.

Sin embargo, seis años después de aquel histórico evento, las cosas no van por buen camino. Según el informe anual del Programa de la ONU para el Medio Ambiente, teniendo en cuenta los últimos compromisos asumidos, la temperatura para 2030 sería de 2,7°C. Por ello, se necesita un recorte del 30% para limitar el calentamiento a 2°C y del 55% para limitarlo a 1,5°C.

En este sentido, se espera que todos los países se comprometan a reducir los gases de efecto invernadero para 2030 y alcanzar las cero emisiones netas para 2050. Aquí, jugará un papel clave China, que actualmente es el país más contaminante del mundo (responsable del 30% de las emisiones globales), pero que aún no se ha sumado al Acuerdo de París. 

Por otra parte, los países en vías de desarrollo presionarán a los más ricos para que cumplan con el compromiso asumido en 2009 de donar anualmente US$ 100.000 millones para la causa. Pero, pese a la urgencia, un plan sobre cómo hacerlo, preparado por Canadá y Alemania, prevé que la meta anual no se cumpliría hasta 2023.

Actualmente, los miembros del G20 son responsables de más del 75% de las emisiones globales de efecto invernadero, aunque las consecuencias del cambio climático tienen su mayor impacto en los países en vías de desarrollo. 

Además, se esperan compromisos sobre la eliminación del carbón como fuente de energía, incentivar el uso de automóviles eléctricos y mayores fondos para la protección de los ecosistemas y la biodiversidad.

Ausencias que preocupan 

Pese a que el evento es de vital importancia, muchos líderes no viajarán a Glasgow. Las primeras ausencias a destacar son las del presidente de China y Rusia, Xi Jinping y Vladimir Putin, respectivamente. 

Ambos mandatarios argumentaron que no asistirán al evento por cuestiones relacionadas con la pandemia. Sin embargo, aunque se comprometieron a participar virtualmente, la ausencia de los presidentes de dos de los cuatro países más contaminantes del mundo no es una buena señal.

Otra de las grandes ausencias será la del mandatario de Brasil, Jair Bolsonaro, un escéptico del cambio climático que está en la mira por la deforestación de la Amazonia. Además, tampoco participarán el mexicano Andrés Manuel López Obrador, el sudafricano Cyril Ramaphosa y el primer ministro japonés, Fumio Kishida. Todos líderes del G20. 

En este sentido, el primer ministro británico y anfitrión del evento, Boris Johnson, admitió que “esta cumbre va a ser muy, muy dura. Y estoy muy preocupado, porque puede salir mal y no conseguir los acuerdos que necesitamos. Es una cuestión de suerte".

Argentina, alineada 

Tras asistir a la cumbre del G20 en Roma, el presidente Alberto Fernández se dirigirá a Glasgow para participar de la COP26. A nivel internacional, se considera que la Argentina tiene un desempeño positivo en la materia, por lo que intentará aferrarse de esa buena fama para obtener concesiones en otras áreas. 

Juan Cabandié, ministro de Ambiente y Desarrollo Sostenible, quien acompañará a Fernández, anticipó que la delegación nacional "hará varios pedidos" en la cumbre, entre los que se destacan el "canje de deuda por acción climática”. 

"En vez de pagarle al Fondo Monetario Internacional, lo que pretendemos es que un porcentaje sea utilizado para la transición ecológica que necesita cada país en el mundo. Argentina tiene que asumir el año que viene US$ 19.000 millones de vencimiento de deuda y lo que nosotros pretendemos es que esos dólares sean utilizados para parque eólicos, energía renovable, para cuidar el bosque nativo o para parque solares", agregó. 

Por otra parte, teniendo en cuenta que Argentina solo produce el 0,6% de las emisiones globales de gases de efecto invernadero, la delegación encabezada por Fernández se encargará de defender los actuales métodos de producción agropecuaria. 

Esto va en línea con el último documento firmado por el Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca; el Consejo Federal Agropecuario (CFA); el Consejo Agroindustrial Argentino (CAA) y la Asociación Argentina de Productores en Siembra Directa (Aapresid), el cual asegura que “nuestra ganadería extensiva es altamente segura en términos sanitarios, eficiente en materia de bienestar animal y en términos ambientales”.

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