En Brasil, el Índice de Precios al Consumidor Amplio tuvo una baja de 0,38% en mayo mientras que la baja en abril había sido de 0,31%. Es la mayor deflación registrada en un mes desde agosto de 1998. Con el dato de mayo, el IPCA acumula una caída de 0,16% en 2020 y la suba de los últimos doce meses llega a 1,88%. La mayor caída se produjo en el rubro de transporte impactado por la baja del precio del combustible mientras que alimentos y bebidas y artículos para el hogar fueron dos rubros que registraron subas.
El comportamiento de los precios refleja una caída del consumo en un contexto de pronunciada recesión inducida por las medidas adoptadas para enfrentar el coronavirus. En la medida que la economía se vaya normalizado, Brasil dejaría atrás la deflación de estos meses, pero la inflación anual estará muy lejos de alcanzar la meta de 4% que estableció el Banco Central.