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Todos miran a Milei: la licuadora no da para más

Volvieron a subir los dólares libres y se entonaron los futuros. La Bolsa está en un ida y vuelta titubeante y solo los bonos siguen firmes, con el menor riesgo país en 52 meses.

Javier Milei
Javier Milei EE
Luis Varela 01 marzo de 2024

A lo largo de todo el día los celulares no dejaron de tronar. Todos querían saber una sola cosa: "¿qué va a anunciar Milei en la apertura de las sesiones ordinarias?". Y desde ninguna fuerte hubo datos concretos, tanto que la respuesta fue sorprendente pero esperable: "Suponemos que el Presidente tiene una idea lineal de lo que va a decir, pero el fogonazo final de su discurso, los últimos cinco minutos de sus palabras, quizás los mastique en el viaje al Parlamento, o incluso cuando toque el simbólico atril de madera".

Milei sigue al minuto todos los datos que muestran la economía. Sabe que los depósitos en los bancos, más en dólares que en pesos, están subiendo de manera sostenida nuevamente. También ve complacido que el BCRA recuperó una buena cantidad de reservas, que falta menos para el cobro de la cosecha gruesa, que los bonos siguen subiendo y que ya logró el menor riesgo país de los últimos 52 meses.

Pero los asesores directos del Presidente, y sobre todo la gente del FMI y de la Secretaría de Estado de EE.UU. le vienen advirtiendo que no olvide a los más vulnerables. Y hay un dato que parte al medio toda la estrategia llevada hasta ahora por Caputo: en el trimestre diciembre-febrero la inflación acumulada (heredada de Massa) fue del 76%, al tiempo que los jubilados indigentes recibieron una mejora de apenas 30%; literalmente, fueron tomados por asalto.

Entonces, la suposición de los analistas es que la estrategia de motosierra podrá seguir actuando contra los gastos absurdos del Estado, pero la licuación de los más desprotegidos no puede seguir continuando, ya que ese es probablemente el principal capital político que le dio a Milei el 56% de los votos para que llegue a la Casa Rosada.

Con esa idea, los rumores que hubo toda la tarde fueron deshojando la margarita. Dolarización, no. Competencia de monedas, por ahora quizás tampoco. Probablemente haya algún toque en el crawling peg, que está entregando un dólar exportador cada vez más flaco, va debilitando las liquidaciones de los productores y con eso la suba diaria de reservas se va apagando.

El resultado de todas esas especulaciones determinó que ayer, en el Rofex, los contratos de dólar oficial futuro volvieran a empinarse: desde los $ 888,70 pesos actuales, se negociaron $ 929 a fin de marzo, $ 998 a fin de abril, $1.045 a fin de mayo. Y en línea con eso los dólares libres abrieron el mes otra vez para arriba. Al tiempo que los bonos siguieron mejorando, las acciones tomaron fuerza nuevamente y el riesgo país cayó otras 70 unidades, hasta 1.635 puntos básicos, algo que no pasaba desde octubre de 2021.

Esta situación, totalmente pendiente de lo que dijera Milei en el Congreso -con ex FMI Alejandro Werner advirtiéndole que es un riesgo muy alto llevar adelante un programa económico sin un consenso alto- tuvo también un giro en los mercados externos. Después del menor dato de inflación en EE.UU. y con algún directivo de la Fed planteando que la tasa base puede bajar en junio, se concretó un retroceso para las tasas largas de EE.UU.: se pagó 4,9% anual a 1 año de plazo, 4,2% a 5 años, 4,2% a 10 años y 4,3% a 30 años. Y con eso en el exterior el dólar subió 0,2% en Chile y 0,1% en Japón y China, pero bajó 0,1% en México, cedió 0,3% en Brasil contra el euro y la libra.

En el mercado cambiario local, mientras tanto, con el dólar exportador a $ 928,97, el BCRA compró US$ 68 millones en el mercado, y tras compensaciones por pagos y cobros de bonos al final del día el BCRA sumó US$ 643 millones a las reservas. Con ese cuadro de situación, esperando que el crawling acelere, el dólar blue saltó $20 hasta $1.050, el Senebi subió $15,88 hasta $1.089,13, el MEP saltó $26,48 hasta $1.059,35 y el contado con liquidación subió $16,78 hasta $1.090,03. Por lo que la brecha entre el oficial y el blue fue del 18% y la del CCL con el mayorista fue del 29%.

Con dólares más entonados, con Moody´s advirtiendo que Argentina será el único país del G20 que no crecerá en 2024, ya que tendrá una durísima caída del 5% en su PIB, con la agencia Fitch bajándole la nota a La Rioja, con muchas provincias debiendo enfrentar pronto vencimientos de dólares que en algunos casos no tienen, sorprendió el resultado que tuvieron los bonos: con menos negocios, los titulos públicos argentinos subieron otro 2,1%, devolviendo la esperanza de que buscar un riesgo país de menos de 1.000 puntos es posible, si las cosas salen bien.

En papeles privados, con un sector inmobiliario que está en problemas no solo en China sino también dentro de EE.UU., los inversores toros altamente especulativos solo miran la tasa de la Fed, confían en que deberá bajar, por lo que esa bomba atómica terminará. De ahí que se produjo otra suba en la bolsa de Nueva York; el Dow mejoró 0,2%, el S&P tuvo un alza del 0,8% y el Nasdaq mejoró 1,1%. Mientras que las Bolsas de San Pablo y de México tuvieron una mejora del 0,2%.

A nivel bursátil local, los inversores comprendieron que el mercado acompaña completamente a Milei y que la gente que lo votó no retrocede, al menos por ahora. De ahí que sin muchos negocios la Bolsa porteña volvió: con $15.847 millones operados en acciones y $21.197 millones en Cedears, la Bolsa de Buenos Aires subió 4%. Mientras que los ADR argentinos en Nueva York anotaron subas del 1% al 6% para Edenor, Loma Negra, YPF, Bioceres y Pampa E; con bajas del 1% al 3% para Macro y Supervielle.

Y en materias primas, con la mirada puesta en la tasa de Powell y en las fricciones geopolítica mundiales (con mucha tensión alrededor del entierro de Navalny en pleno centro de Moscú) hubo un salto del 2,3% para el petróleo, con un fuerte repunte para los metales preciosos, con la onza de plata subiendo más pero con un nuevo récord nominal histórico para el oro. En tanto que los metales básicos actuaron mixtos, con los granos mostrando un resultado positivo más en Rosario que en Chicago. Y con el mundo cripto completamente entonado: hubo otra suba del 1,8% para el Bitcoin con salto de hasta el 6% en el resto de los valores de ese panel, que se está convirtiendo en refugio de todos los inversores que no quieren estar ni en monedas, ni en bonos ni en acciones.

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