Por Gonzalo Martínez Mosquera
En una semana marcada por subas generalizadas en las criptos, la que despuntó fue Ethereum, la segunda en tamaño después de Bitcoin.
Ether, su moneda nativa llegó a superar los US$ 3.200 por unidad, marcando un rally de casi 30% en 7 días y logrando su récord histórico.
Este crecimiento le permite lograr una capitalización de mercado cercana a los US$ 340.000 millones, superior al de compañías establecidas como Nestlé (US$ 337.000 millones), Procter & Gamble (327) o PayPal (308) como mostró la revista especializada Cointelegraph.
Ese mismo medio señala que, gracias al nuevo precio de Ether, Vitalik Buterin, quien desarrolló la red Ethereum, se sumó al selecto grupo de los “billonarios” (aquellos con más de US$ 1.000 millones).
Es conocida la dirección de la billetera virtual del programador ruso canadiense y, al ser este un mundo descentralizado, las tenencias de todas las wallets son información pública.
En el caso particular de Vitalik, su tenencia, al menos en la billetera conocida, es de 333,500 Ethers que equivalen a un poco más de US$ 1.000 millones. Nada mal para un joven de 27 años.
Pero no son todas rosas en el mundo Ethereum.
Como los lectores saben, esta red se encuentra saturada y probablemente así continúe por lo menos por lo que resta del año. Esta situación genera que las transacciones en la red se vuelvan caras y lentas.
Al momento de escribir esta nota, enviar Ether de billetera a billetera a través de la blockchain cuesta alrededor de US$ 8 por transacción, según el sitio especializado Ycharts.
Recordemos que esa es la transacción más simple (y barata) que se puede realizar en esta red y que hace solo 3 semanas llegó a costar unos US$ 35.
Esta situación implica que las redes que compiten con Ethereum, las famosas “altcoins”, empiezan a “robarle” usuarios y aplicaciones.
Por ejemplo, Ethereum dejó de ser, por primera vez en la historia, la blockchain con mayor cantidad de criptodólares Tethers emitidos. La red Tron acaba de superarla con 26.000 millones de tokens contra los 24.000 millones informados en Ethereum.
Quienes se manejan diariamente con esa stablecoin habrán notado que las criptocuevas se están pasando, de a poco, al formato TRC-20 (de la red Tron) reemplazando al conocido ERC-20 de Ethereum.
Por su parte, Tether acaba de superar los US$ 50.000 millones de market cap. Ese monto, como indica Bloomberg, es mayor que todos los depósitos bancarios de los miles de bancos en Estados Unidos, con excepción de los 44 mayores.
Es sin dudas una de las preguntas más importantes para el mundo blockchain de los próximos años.
¿Quién ganará la carrera? ¿Ethereum o sus competidores?
El European Investment Bank, que se define así mismo como el “organismo financiero de la Unión Europea”, le dio su respaldo a la red de Buterin. Lanzó recientemente la emisión de un bono a 2 años por 100 millones de euros sobre aquella red.
Lo hizo en colaboración con los bancos Goldman Sachs, Santander y Société Générale y puede representar la punta de un iceberg que muestra el enorme potencial de esta tecnología, que va mucho más allá del precio de las criptomonedas.
Buffett y Munger
Los que no se salvaron de la pregunta sobre el valor monetario de los cripto activos fueron los conocidos financistas Warren Buffet y su socio Charlie Munger.
En su habitual junta anual de inversores de Berkshire Hathaway, el oráculo de Nebraska prefirió eludir la pregunta diciendo que si respondía probablemente enojaría a cientos de miles de personas que estaban mirando y sólo alegraría a un par que estuvieran apostando en contra del Bitcoin.
Por su parte, Munger fue directo al grano diciendo que odia a esa criptomoneda y que la considera un “maldito desarrollo desagradable y contrario a los intereses de la humanidad”.
Sus críticas derivan del hecho de que Bitcoin “es usado por secuestradores y extorsionadores, y que se lleva billones y billones de dólares en un producto financiero que apareció de la nada”.
Será interesante ver si podrán soportar la presión de sus clientes en caso de que el activo continúe su racha alcista. Sorprende, por otro lado, que no hayan criticado el impacto ambiental que tiene la tecnología que usa para minar sus transacciones
Quien sí cambió su opinión negativa sobre Bitcoin fue Jamie Dimon, Chairman y CEO del banco JP Morgan, quien en septiembre de 2017 lo había definido como un “fraude”.
A comienzos del año siguiente dijo que se arrepentía de haber hecho esa declaración aclarando que las “blockchains son algo real”.
El cambio de perspectiva es tal, que la semana pasada aquel banco confirmó que permitirá exposición al activo digital para sus clientes a través de un fondo administrado.
El Morgan se sumaría así al US Bank, el quinto banco más grande de Estados Unidos, quien la semana pasada anunció que ofrecerá el servicio de custodia de cripto activos a sus clientes.
Por otra parte, este banco informó que fue seleccionado para administrar el ETF de Bitcoin de NYDIG en caso de que fuese aprobado por la Securities and Exchange Commission (SEC).
Para saber si el mercado estadounidense contará con esos fondos comunes de inversión tendremos que esperar. Ese ente regulador informó que la definición se conocerá recién en junio.
VanEck hizo la presentación para lanzar su fondo hace 45 días, que es el plazo que normalmente se toma la SEC para dar su respuesta. El rumor en el mercado dice que el delay se debe a que la autoridad regulatoria no quiere que ningún participante tenga la ventaja de ser el primero.
De aprobarse, muchas entidades podrán comprar Bitcoin indirectamente lo cual podría dar un impulso nuevo al precio. Algunos ya se atreven a apostar que esta vez llegará a los US$ 100.000 por unidad.
Por si esto fuera poco, también vienen vientos favorables desde Europa.
Alemania acaba de aprobar una legislación que permitirá a unos 4000 “SpezialFonds” invertir hasta el 20% de su cartera en criptoactivos a partir del 1° de julio.
Aquellos son fondos especializados dirigidos a inversores institucionales que manejan actualmente unos 1,2 billones de euros (“trillion”, en inglés, o sea 12 ceros).
Para tomar una dimensión, el 20% de aquel número son US$ 360.000 millones, parecido al market cap de Ethereum mencionado más arriba y equivale a 30% del market cap de Bitcoin.
¿Quién ganará la pulseada? ¿Bitcoin o Warren Buffett?
¿Quién ganará la pulseada? ¿Ethereum o las Altcoins?
Son probablemente las preguntas que mejor resumen el dilema presente y futuro de las criptomonedas.
