La decisión es fuerte pero casi que no sorprende: Volvo anunció oficialmente este martes que cambió su estrategia de fabricar sólo autos eléctricos a partir de 2030.
A través de un comunicado oficial titulado "Volvo Cars ajusta las ambiciones de electrificación, sigue comprometido con el futuro totalmente eléctrico", la marca sueca de capitales chinos dio cuenta de algo de su decisión.
"Estamos decididos en nuestra creencia de que nuestro futuro es eléctrico. Un auto eléctrico proporciona una experiencia de conducción superior y aumenta las posibilidades de utilizar tecnologías avanzadas que mejoran la experiencia general del cliente. Sin embargo, está claro que la transición a la electrificación no será lineal, y los clientes y mercados se mueven a diferentes velocidades de adopción", expresó Jim Rowan, CEO de Volvo Cars.
"Somos pragmáticos y flexibles, al tiempo que conservamos una posición líder en la industria sobre la electrificación y la sostenibilidad", añadió.
"Con cinco autos totalmente eléctricos ya en el mercado y otros cinco modelos en desarrollo, la electrificación completa sigue siendo un pilar clave de la estrategia de productos de Volvo Cars. El objetivo a largo plazo sigue siendo convertirse en una compañía de automóviles totalmente eléctricos, y también pretende alcanzar cero emisiones netas de gases de efecto invernadero para 2040", enfatizó la automotriz que es parte del Grupo Geely.
Volvo consignó además que mantendrá su posición como líder de la industria en electrificación, sólo que ahora "decidió ajustar sus ambiciones de electrificación debido a las cambiantes condiciones del mercado y las demandas de los clientes".
Aún con este cambio de enfoque, la automotriz aspira a entre el 90 y el 100% de su volumen de ventas globales para 2030 sean modelos electrificados, lo que significa una mezcla de modelos híbridos totalmente eléctricos y enchufables.
El porcentaje restante -sostiene- corresponderá a "un número limitado de modelos híbridos suaves, si es necesario", lo que "sustituye a la ambición anterior de la compañía de que su alineación sea totalmente eléctrica en 2030".
Para el año que viene, Volvo espera que el porcentaje de productos electrificados alcance entre el 50 y el 60%, mientras que antes de que finalice esta década ofrecerá una line up completo de modelos 100% eléctricos.
Sobre los motivos que llevaron a este cambio, la compañía remarcó que "ha habido un despliegue más lento de lo esperado de infraestructura de cobro, retirada de incentivos gubernamentales en algunos mercados e incertidumbres adicionales creadas por las recientes tarifas de vehículos eléctricos en diversos mercados".
En ese sentido subrayó que "sigue viendo la necesidad de políticas gubernamentales más fuertes y estables para apoyar la transición a la electrificación".
¿Cómo vienen las ventas de autos eléctricos de Volvo?
La cuota de autos 100% eléctricos de Volvo se situó en el 26% durante el segundo trimestre de 2024, la mayor participación entre todos sus competidores del segmento premium, mientras que su participación en electrificados (eléctricos + híbridos enchufables) representaron el 48%.
El objetivo era convertirse, poco a poco y a partir de 2030, en la marca eléctrica premium preferida del mercado, aunque acaba de quedar demostrado que esos planes pueden cambiar.
Nadie obligó a Volvo a fijar una fecha en el calendario como tampoco nadie lo hizo con la Unión Europea y ya son varios los CEOs de automotrices que elevan la voz para pedir que los plazos fijados son demasiado ambiciosos en virtud del comportamiento de los consumidores, que no encuentran autos eléctricos accesibles ni prácticos, acompañados de una red de recarga acorde a los volúmenes y plazos fijados.
