Por Pablo Varela
La interna del peronismo santafesino está al rojo vivo. Luego de los intentos de la Casa Rosada para que se alcance un acuerdo durante el lunes y siendo hoy el último día para que se bajen las listas, las primaria es inevitable.
El gobernador Omar Perotti armó su lista, la cual está encabezada por el actual senador provincial Marcelo Lewandowski, secundado por María de los Angeles Sacnun, para el Senado, mientras que la cabeza de la lista de Diputados, será su hombre de confianza, Roberto Mirabella. Perotti, irá como senador suplente.
Del otro lado, el ministro de Defensa Agustín Rossi y la actual vicegobernadora, Alejandra Rodenas, con el referente del Evita, Eduardo Toniolli para la Cámara Baja.
El peronismo santafesino tiene músculo entrenado para primarias. En el '17' y ´19 dirimió candidaturas en PASO aunque no era oficialismo en dichos años. Fuentes del peronismo local no dejaron de exhibir desencanto ante este diario por la lentitud de la Casa Rosada para intentar ordenar la oferta electoral en una provincia clave, si bien reconocen que hubo llamados para que Rossi baje su candidatura.
En el perottismo aseguran que hay enojo en la Casa Rosada para con el ministro e incluso ayer circuló la posibilidad que le pidan la renuncia. En cambio en el rossismo aseguran que el lunes se barajaron varias alternativas en la confección de los nombres. Entre ellas darle la lista de senadores a Perotti y dejar la confección de la de diputados en manos de Rossi, algo que en la Casa Gris, rechazaron de plano. Ayer Rossi reconoció que el Presidente le pidió hacer todos los esfuerzos para alcanzar una lista de unidad y no dio mayores detalles.
En sectores encolumnados con Rossi señalan que el gobernador mantiene un estilo de liderazgo “cerrado”, al tiempo que buscan desdramatizar la primaria y circunscriben la contienda electoral a diferencias en la metodología en la construcción política. Además, señalan que el gobernador adelantó la disputa del 2023 al querer colocar a Mirabella al frente de la lista de senadores y de “provincializar” la elección. En el entorno de Perotti en cambio, lo atribuyen a una decisión de lógica de querer tener un hombre de confianza en un lugar clave como la Cámara Alta, en donde además de leyes, se definen pliegos y cuestiones presupuestarias.
Al margen de los señalamientos, el gobernador ensayó días atrás y contrarreloj, un acuerdo con la vicepresidenta Cristina Kirchner, y con su ex contendiente en la PASO de 2019, María Eugenia Bielsa que le permitió confeccionar una lista ad hoc. La presencia de Lewandowski y Sacnun y Magalí Mastaler (segunda en diputados) son la prueba de ello. En el perottismo se muestran confiados de cara a la contienda. Cuentan con los resortes del Gobierno provincial, La Cámpora y varias intendencias.
En la vereda de enfrente señalan en cambio que Rossi es el hombre de mayor conocimiento del peronismo en la provincia (junto con el gobernador). La mayoría de las fuentes del peronismo de Santa Fe señalan que Rossi es un potente candidato para ganar en el marco de las internas, aunque tiene dificultades en las generales. En el entorno del ministro señalaron ante este diario que la foto del peronismo santafesino es dinámica, y recuerdan que la Casa Rosada motorizaba su candidatura hace escasos días atrás.
