Hoy miles de simpatizantes del presidente Donald Trump rompieron el cerco de seguridad y tomaron las escalinatas y la entrada del Capitolio. Las autoridades del Congreso estadounidense se vieron obligadas a cerrar el edificio y suspendieron la sesión de ambas cámaras en las que se debía certificar la victoria presidencial de Joe Biden. Por su parte, la alcaldesa demócrata de la ciudad de Washington, Muriel Elizabeth Bowser, decretó que regirá el toque de queda a partir de las 18 de hoy para disipar los disturbios.
Una hora antes, el mandatario saliente había alentado a los manifestantes con un discurso encendido en el que prometió no reconocer su derrota. "Nunca nos rendiremos. Nunca aceptaremos" la derrota. Vamos a detener el robo", afirmó. Luego, le insistió por Twitter a su vicepresidente, Mike Pence, que acepte las objeciones de algunos republicanos y cambie el resultado electoral, un reclamo que el número dos del Poder Ejecutivo rechazó inmediatamente.
Sin embargo, a partir de este contexto, Trump tomó Twitter y pidió evitar "la violencia". "Le estoy pidiendo a todos en el Capitolio estadounidense que se mantengan pacíficos. ¡No a la violencia! Acuérdense, SOMOS el partido de la ley y el orden, respetemos a la ley y a los grandes hombres y mujeres en azul (policías). ¡Gracias!", manifestó.
https://twitter.com/realDonaldTrump/status/1346912780700577792
Antes de los disturbios, la tensión entre el partido Demócrata y el Republicano ya era alta. Hoy se llevaron a cabo elecciones legislativas en Georgia, que definían el balance de poder en el Senado y en el gobierno del presidente electo Joe Biden. El candidato demócrata estadounidense Raphael Warnock ganó una de las dos bancas que el estado tiene en el Senado. Ahora la atención gira ahora hacia la segunda vuelta por el otro escaño en juego entre el candidato republicano Perdue y el demócrata Jon Ossof.
