Los analistas del mercado en Brasil, cuyas proyecciones económicas releva semanalmente el Banco Central de Brasil para elaborar el informe Focus, siguieron corrigiendo al alza la inflación esperada y recortando la caída del PIB.
Según la mediana de los pronósticos, la suba del Indice de Precios al Consumidor Amplio de este año pasó de 3,20% a 3,25% y la del próximo de 3,17% a 3,22%. En ambos casos se ubicaría por debajo de la meta de inflación del BCB, que es de 4,25% y 4%, respectivamente.
La tasa Selic cerraría 2020 en 2%, pero se estima que subirá hasta 2,75% durante 2021.
En materia cambiaria, el mercado espera que el dólar se cotice 5,41 reales a fin de este año (ligeramente por encima de su valor actual) y a 5,20 cuando finalice 2021, lo que implicaría una leve revaluación de la moneda brasileña.
Por otra parte, la caída del PIB se ajustó de 4,80% a 4,66%, la mitad de la que pronosticaban el FMI y la Cepal a mediados de año, mientras que la expansión esperada para 2021 se mantuvo en 3,31%. En el caso de la producción industrial, la retracción estimada para este año pasó de 5,49% a 5,34%, mientras que la suba en el que viene se corrigió de 4% a 3,72%.
Por otra parte, los analistas proyectan un desequilibrio de la cuenta corriente de US$ 3.600 millones y un superávit en la balanza comercial de US$ 57.730 millones.
En cuanto a las cuentas públicas, el resultado primario mostraría un déficit de 12% del PIB y el nominal de 15,56%. Pero ambos se reducirían fuertemente en 2021 como consecuencia del recorte de algunos programas de asistencia y el aumento de la recaudación por la mayor actividad.
Para Argentina, como para el resto de los países de la región, será muy positivo que el año que viene Brasil crezca, y con el real revaluándose.
