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Porqué se bajó Macri

La decisión de Macri se entiende a partir de dos datos que supo leer bien: cuáles fueron

La renuncia de Macri a ser candidato, si bien era previsible, sirve para ordenar el tablero de la oposición
La renuncia de Macri a ser candidato, si bien era previsible, sirve para ordenar el tablero de la oposición IG Mauricio Macri
Augusto Milano 26 marzo de 2023

Muchas veces Mauricio Macri fue subestimado. Primero por la gente del fútbol y luego por la dirigencia política tradicional. Creían que su perfil personal era incompatible con esos mundos tan ásperos. 

Pero se fue abriendo espacio en ambos.

Y en el plano estrictamente político demostró ser un muy buen lector del clima social y de la demanda de los votantes. Esa capacidad de análisis lo llevó a elegir en su momento como compañeras de fórmulas a Gabriela Michetti y luego a María Eugenia Vidal.

Esa aptitud para la lectura de la realidad social, que no ya no estaba para grandes epopeyas privatistas, lo llevó a correrse al centro en la campaña electoral de 2015 sosteniendo algunas banderas que no formaban parte de sus convicciones, pero que eran necesarias para ganar. 

También decidió hacer un acuerdo orgánico con la UCR a pesar de sus históricas diferencias con ese partido y a la posición en contrario que tenían muchos de sus asesores (Jaime Durán Barba incluido). Pero entendió que la capilaridad territorial del radicalismo también era necesaria para ganar. 

Macri mostró en estos dos casos un enorme pragmatismo y capacidad para entender el contexto político.

A partir de ahí puede entenderse su decisió  de no ser candidato en las próximas elecciones. Se podrá decir mucho sobre distintas presiones, de diálogos con el círculo rojo o de sugerencias de sus allegados. Pero la decisión de Macri se entiende a partir de dos datos que supo leer. 

El primero es que le iba a resultar muy difícil ganar las elecciones dado el nivel de rechazo que tiene en un importante segmento de la población. Y el segundo es que, aún en el eventual caso de ganar, le hubiese resultado muy difícil gobernar porque nunca contaría con una etapa favorable al inicio de su gestión como suele tener los presidentes.  

De entrada, hubiese tenido en contra a la mitad de la sociedad que aún tiene fresco un recuerdo negativo de su gobierno.

Teniendo en cuenta la metáfora futbolera del título de su anteúltimo libro, la sociedad quiere que en el segundo tiempo entre un jugador fresco en condiciones de dar vuelta el trámite del partido.

La renuncia de Macri a ser candidato, si bien era previsible, sirve para ordenar el tablero de la oposición.

Todos los candidatos elogiarán la actitud Macri porque aspiran a recibir su bendición dado el ascendente que mantiene en el núcleo duro de votantes del PRO. Macri está más cerca ideológicamente de Patricia Bullrich, pero cree que podrá tener una relación más confiable con Horacio Rodríguez Larreta desde el papel que decida jugar como expresidente. 

De su mensaje surge con claridad que no le dará en las primarias un apoyo explícito a ninguno de los candidatos porque se reserva un lugar por encima de los conflictos internos. Además, debilitaría al próximo presidente si su eventual triunfo le es atribuido al apoyo que recibió de Macri.                    

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