A raíz de la pandemia del Covid-19, muchos rubros tuvieron que valerse de nuevas herramientas para poder seguir desarrollando sus actividades con la mayor normalidad posible. Sin embargo, la implementación de la tecnología -que en muchos sectores fue innovadora- en la salud ya había comenzado hacía años.
La telemedicina -o health tech- plantea una revolución inevitable. Esta modalidad, que ya se está usando en muchos países para citas no urgentes y de seguimiento, busca cambiar el eje de la atención médica, centrándose en el paciente y dándole un rol más activo.
Por eso, resulta erróneo pensar que la telemedicina se limita a la atención médica remota. Es mucho más que eso: permite la recopilación de datos de la vida cotidiana del paciente, el envío rápido de resultados de exámenes al profesional de la salud e, inclusive, logra una mayor adherencia del paciente al plan de atención.
Más allá de la pandemia, como señala un reporte de Cohen, aproximadamente uno de cada tres adultos padece una enfermedad crónica en todo el mundo y la expectativa de vida crece cada año.
Las big tech desembarcan
“Los gigantes tecnológicos Amazon, Apple y Google están compitiendo también para conquistar la industria de la salud”, señala Marina Kempny, Gerenta de Marketing de Cohen, sobre la “macrotendencia”. Amazon, Apple y Google son solo algunos ejemplos de las compañías que compiten por conquistar esta industria.
Si comenzamos por Apple, el 9 de septiembre de 2014 la manzanita marcó su desembarco con el lanzamiento de la serie 1 del Apple Watch, su wearable que permite recopilar datos en tiempo real sobre la actividad física, la frecuencia cardíaca, la presión arterial, los ciclos del sueño y los niveles de glucosa. Hoy en día, este reloj inteligente ya lleva más de 7 versiones que, cada vez, permite más mediciones y ha ayudado a prevenir numerosas tragedias.
Google, por su parte, se asoció con Otsuka y Click Therapeutics, en febrero de 2021, y llevará a cabo un ensayo clínico sobre los efectos de las intervenciones digitales en pacientes con trastorno depresivo mayor, desde Verily, su rama de atención médica en Alphabet.
Jeff Bezos tampoco quiso quedarse fuera de la carrera y, en 2019, lanzó Amazon Care, una plataforma que ofrece entrega de recetas, visitas virtuales o de atención primaria en persona en hogares y oficinas.
Entonces, ya no quedan dudas de que la gestión de la salud por medio de los datos no solo es beneficiosa sino que es por demás real y útil, e integra diversas aristas de la tecnología que permiten una solución win-win para pacientes y profesionales.
Nuevas apuestas
Tal vez para muchos haya pasado desapercibido pero, hace casi una década, una de las clásicas compañías americanas adoptó un rol más activo en el terreno de la salud y, hoy, se posiciona como el próximo gigante en esta transición tecnológica.
Entre el 2013 y el 2014, Walmart instaló clínicas en áreas desatendidas, comenzó a ofrecer exámenes gratuitos de presión arterial, glucosa en sangre y visión, y expandió el acceso a vacunas.
Luego, en 2018 decidió asociarse con StrongArm para garantizar la seguridad de sus trabajadores mediante el dispositivo FUSE, que detecta el riesgo de lesiones. Solo con esta alianza logró reducirlas en 65% entre sus empleados.
Sin embargo, en 2020 fue por más y desembarcó en la telemedicina con CareZone, una aplicación que administra medicamentos y recuerda a los usuarios de sus tomas y la necesidad de reposición.
Por último, en 2021 apostó a más y adquirió MeMD, un proveedor de telesalud de especialidades varias que busca posicionar a Walmart Health como competencia directa de Amazon Care.
¿Y en el mundo?
Estados Unidos no es el único pionero en esta revolución y hay países como el Reino Unido que también han tenido grandes conquistas en este terreno.
Babylon Health es un unicornio fundado en el 2014 y utiliza la inteligencia artificial para brindar servicios de atención médica por medio de su herramienta “Ask Babylon”.
A su vez, el mismo servicio nacional de sanidad (NHS), creó NHSX que se basa en tres pilares: digitalización de los servicios, conexión para la integración y la transformación del sistema en general. Avanzando a pasos agigantados, hoy, el 99% de los médicos puede realizar consultas por video, cuando en 2020 solo el 10% podía.
Hora de invertir
Esta transformación resulta atractiva no solo para empresas sino también para inversores. Según Cohen, algunas opciones son las siguientes.
- Teladoc, valuada en más de US$ 20.000 millones, provee atención médica y diagnósticos remotos con inteligencia artificial. Opera en Estados Unidos desde 2002 y, hoy, está presente en más de 120 países.
- EFT Global X Telemedicine and Digital Health (EDOC) es un fondo de inversión cotizado que carga a sus tenedores solo 0,68% anual y ofrece exposición a 40 compañías directamente relacionadas a la telemedicina y salud digital. Desde su lanzamiento en julio de 2020, “acumuló un retorno de 17,5%, destacándose sobre Teladoc, que cedió 39% en igual período”, según Camilo Cisera, Portfolio Manger de Cohen.
