En las últimas semanas, la presión en contra de Israel se ha incrementado notablemente como consecuencia de algunos ataques israelíes contra hospitales ubicados en la Franja de Gaza.
Por su parte, en un momento en el que el número muertos ha superado ampliamente los 11.000, Israel argumenta que dichos ataques son consecuencia de que el grupo terrorista Hamás se refugia en dichos hospitales.
En este sentido, este miércoles las tropas israelíes encontraron armas y equipo de combate de Hamás en el hospital Al-Shifa: el ejército publicó simultáneamente un video que, según informaron, mostraba parte del material recuperado dentro del gran complejo hospitalario, incluidas armas automáticas, granadas, municiones y chalecos antibalas.
Sin embargo, para Recep Tayyip Erdogan, presidente de Turquía, esto no parece ser motivo suficiente para justificar el accionar de Israel, al cual catalogó de "Estado terrorista".
"Con el salvajismo de bombardear a los civiles que obligó a abandonar sus hogares mientras se reubican, está literalmente empleando terrorismo de Estado. Ahora digo, con el corazón tranquilo, que Israel es un Estado terrorista", dijo Erdogan.
"Nunca dejaremos de expresar la verdad de que los miembros de Hamás que protegen sus tierras, su honor y sus vidas frente a las políticas de ocupación son combatientes de la resistencia, sólo porque algunas personas se sienten incómodas con ello", agregó.
Pero lo más llamativo es que el apoyo para Israel incluso comienza a caer en Estados Unidos, su principal aliado: según un sondeo de Reuters/Ipsos, la mayoría de los estadounidenses piensa que Israel debería pedir un alto el fuego.
Alrededor del 32% de los encuestados dijo que "Estados Unidos debería apoyar a Israel", una cifra bastante inferior al 41% que respondió de la misma manera a mediados de octubre.
Además, en la nueva encuesta, las personas que consideran que "Estados Unidos debería ser un mediador neutral" aumentaron al 39% desde el 27% del mes anterior.
