Con cada vez más señales que están marcado el de fin de la recesión, con rebote con forma de "V" en varios sectores como inmuebles, motos y autos, con un IPC de agosto que según la consultora C&T marcó una baja hasta 3,8% mensual, con pax cambiaria y baja del impuesto país, las calificadoras de riesgo internacionales están girando la cabeza hacia Argentina.
Con este nuevo escenario, que mantiene todavía una fuerte pelea en la política, el banco de inversión internacional JP Morgan lanzó un informe en el que proyecta una pronta suba para los títulos argentinos. Como arranque, plantea una mejora que empezará por los bancos, que siempre son la puerta de los capitales, y les ve cotizaciones promedio 36% más altas que las actuales. Y en línea con eso la onda alcista también llegaría al resto de los valores.
Con ese marco, mientras Wall Street abrió el primer lunes de setiembre con feriado por el Día del Trabajo ("Labor Day"), una argentina que se movió sin el faro de la Bolsa de Nueva York arrancó el mes con más pax cambiaria, blue quieto y con dólares financieros en leve alza (en reacción a la baja de 10 puntos en el impuesto país, que empujó la demanda de dólares de los importadores).
Esta situación se dio con un día ideal para los papeles argentinos. Con menos negocios, el índice S&P Merval de la Bolsa de Buenos Aires marcó un nuevo récord histórico en pesos (todavía está 25% abajo del récord del Merval en dólares de comienzos de 2018). Y los bonos argentinos también estuvieron para arriba, con la confirmación del pago del primer cupón de los Bopreales, lo cual determinó que el riesgo país bajara de nuevo y esté a punto de romper nuevamente el piso de los 1.400 puntos básicos.
Esta situación, que parece ideal, tiene sin embargo algunos puntos oscuros que se deben atravesar. Las reservas del BCRA siguen sin mejorar, el precio de los granos (principal valor de exportación argentino) sigue débil. Y, lo más inquietante de todo es un Congreso prendido fuego, con la oposición absolutamente en contra, dispuesta a sacar un proyecto tras otro que trabe las reformas económicas que está realizado el Presidente Milei y su equipo económico.
Frente a esto, Javier Milei está en negociaciones con el PRO para afianzar una alianza, para lo que pasa ahora y también para la campaña electoral de medio término en 2025.
Mientras Argentina se debate en esa pelea histórica, a pesar de haber feriado en EE.UU. hubo negocios con títulos de la Fed en los demás mercados mundiales, y con eso las tasas largas de EE.UU. se siguen aplanando: se paga 4,4% anual a 1 año de plazo, 3,7% anual a 5 años, 3,9% anual a 10 años y 4,2% anual a 30 años. A pesar de eso, en el exterior el dólar global se mantiene: subió 0,5% en Chile, Japón y México, 0,4% en China, 0,2% contra el franco suizo, 0,1% en Brasil y bajó 0,1% contra la libra y 0,2% contra el euro.
En el mercado cambiario local septiembre arrancó sin estridencias. Con el dólar exportador a$1.054,45, el BCRA compró US$ 65 millones en el mercado, pero al final del día el BCRA perdió otros US$ 66 millones de las reservas (con los importadores más demandantes porque ahora tienen que pagar sólo 7,5% de impuesto país y no 17,5% como hasta el viernes).
Con ese marco, por necesidades de cubrir gastos, el dólar blue no cambió y siguió a $1.305. Pero los dólares financieros se elevaron levemente: el dólar senebi subió 75 centavos hasta $1.305,27, el MEP subió $4,21hasta $1.285,01 y el contado con liquidación subió $7,15 hasta $1.306,58. Por lo que la brecha entre oficial y blue sigue en el 32% y la del CCL y mayorista fue del 37%.
Con la expectativa de JP Morgan, se incentivó el interés por los bonos, con resistencia de los tenedores, que no quieren vender los papeles que tienen. Así, con menos negocios, los bonos argentinos subieron otro 0,5% y el riesgo país cedió 28 unidades hasta 1.405 puntos básicos
No hubo faro en Wall Street, que se mantuvo sin negocios en la Bolsa de Nueva York por feriado en EE.UU.. Pero, con Lula peleando con Elon Musk (quitando la red "X" del territorio brasileño) y expulsando al Presidente del Banco Central de Brasil, la Bolsa de San Pablo bajó 0,8%, pero la de México subió 1,1%
Pero en línea con la proyección de JP Morgan, las acciones argentinas fueron otra vez las mejores de todas. Con $41.258 millones operados en acciones y $16.287 millones en Cedears, la Bolsa de Buenos Aires subió 2,2%. Sin que se registraran negocios con los ADR argentinos en Nueva York.
El mes, además, se inició con algunas sorpresas para las materias primas. Hubo perturbaciones en la producción de petróleo de Libia, algo que podría dar lugar a un mayor aumento del suministro de la Opep+, pero por ahora setiembre arrancó con una suba del 0,9% para el petróleo. Los metales preciosos estuvieron sin fuerza. Los metales básicos actuaron en descenso. Chicago no tuvo actividad por el feriado norteamericano y en Rosario hubo bajas tanto para el trigo como para la soja. Y lo que marcó la continuidad fue la debilidad cripto: el Bitcoin bajó 1,1% (su peor valor en siete meses), con descensos similares para el resto los valores del panel.
