En el mercado nadie duda de que mañana la Reserva Federal subirá la tasa de interés 75 puntos básicos por cuarta vez consecutiva llevándola a un rango de 3,75% - 4%, pero no hay coincidencia sobre lo que hará en su reunión de diciembre.
Cada vez se escuchan más voces que sostienen que se corre el riesgo que el ajuste monetario sea mayor al necesario y que eso precipite a la economía a una recesión.
En política monetaria, el tamaño importa
Según consigna The Wall Street Journal, el Deutsche Bank, Nomura, UBS y Credit Suisse estiman que en diciembre la Fed volverá a subir la tasa 75 puntos básicos porque entienden, que si se necesita que esté en un nivel más alto pare frenar la inflación, cuanto antes se lo alcance, mejor. Mientras que Bank of America, Goldman Sachs y Morgan Stanley esperan que en diciembre la tasa suba sólo medio punto.
Por esa diferencia de visiones, en el mercado se espera con particular interés el comunicado de la Fed posterior a la reunión y la conferencia de prensa de Jerome Powell para tener señales sobre los próximos pasos de la entidad.
De todas maneras, en reiteradas oportunidades, Powell sostuvo que las decisiones se tomarán teniendo en cuenta los indicadores que se vayan conociendo.
Y hasta la reunión prevista para el 14 de diciembre se publicarán los datos del mercado de trabajo correspondientes a octubre y noviembre que podrían mostrar cierto enfriamiento en la creación de empleo. También se conocerán los índices de inflación de esos meses y los analistas estiman que finalmente se ubicarán por debajo del 8%.
La Fed siempre dejó en claro que su principal objetivo es bajar la inflación y que para lograrlo está dispuesta a aceptar un menor nivel de actividad y el debilitamiento del mercado de trabajo. ¿Hasta dónde? Esa es la pregunta para la que el mercado no tiene una respuesta homogénea.