Empezó la pulseada: el BCRA pierde reservas y el riesgo país sube

En un día que arrancó rojo punzó para los mercados internacionales, en una tendencia bajista para casi todas las Bolsas del mundo que sólo se pudo frenar al difundirse un muy buen dato sobre la evolución del PIB norteamericano, el mercado argentino volvió a sumergirse en una pulseada del Gobierno con los inversores, en la que el BCRA pudo frenar la suba de los dólares libres, pero a costa de perder muchas reservas, con desconfianza, bonos en baja, riesgo en alza y acciones argentinas para abajo tanto aquí como en Nueva York.

La rueda transcurrió con la mirada de analistas y operadores en Río de Janeiro, donde el ministro Luis Caputo se reunió con la titular del FMI, Kristalina Georgieva, y con representantes de la secretaría de Estado de EE.UU., del Banco Mundial y del BID. 

Todo fue apoyo, todo fue guiños de van bien, pero la plata fresca sigue sin aparecer de parte de ningún organismo, ya que no quieren repetir el error que se cometió con Mauricio Macri, al que se le hizo un préstamo gigantesco que se escurrió entre los dedos del Gobierno, tratando de defender el tipo de cambio, en una corrida imparable de parte de argentinos que ya no creían en la capacidad del Gobierno para evitar un nuevo default de la deuda.

Los pagos que vienen

Y en este momento la situación es bastante parecida. Ya estamos a cinco meses de fin de año. A partir de enero empiezan a caer muy fuertes vencimientos de la deuda en dólares. El Banco Central no tiene las divisas necesarias como para afrontar los pagos que vienen. 

Y el Gobierno tiene como estrategia para llegar a evitar otra reestructuración de la deuda bajar la inflación, salir del cepo, colocar un depósito en dólares en Nueva York para garantizar el pago a bonistas el 9 de enero próximo y el envió del oro del BCRA a Basilea para ser ofrecido como garantía en caso de requerir un préstamo sindicado entre varias entidades (repo) si de acá a diciembre no se logra firmar un nuevo acuerdo con el FMI, que termine abriendo nuevamente la canilla de sus dólares y de los préstamos del resto de los organismos multilaterales.

Son tantos los esfuerzos que debe hacer el Gobierno que ya está declarada una pulseada del Poder Ejecutivo con el mercado, con la firme decisión de mantener el superávit fiscal y de no variar el crawling peg del 2% mensual, cuando los índices de inflación se están enfrentando en este momento a subas de precios por la ola de frío, lo cual puede generar más contratiempo. 

Por todo eso, el Banco Central debió vender dólares por segunda rueda consecutiva y con eso las reservas de la autoridad monetaria tocaron nuevo mínimo desde marzo.

Las Bolsas con datos mixtos

Mientras esta tensión sigue dominando al mercado argentino, los mercados del mundo venían atravesando un día con bajas de entre 1% y 3% en casi todas las Bolsas, con algunas empresas desplomándose, como por ejemplo Ford, que cayó nada menos que 18,4%, en el marco general de balances trimestrales que están llegando con resultados peores a los esperados. Y cuando parecía que la sangre llegaba al río, salieron los datos del segundo trimestre del PIB norteamericano: ese indicador dio un crecimiento del 2,8% anual (cuando el mercado esperaba solo 2%), por lo que se sigue comprobando que EE.UU. sigue con una economía recalentada (mientras grandes bloques como Europa o China están titubeando).

Por supuesto, al conocerse que la evolución económica de EE.UU. sigue muy firme, ahora se replanteó qué podrá pasar con la tasa base de la Reserva Federal norteamericana. Hasta antes de conocerse el dato del PIB se pensaba que de acá a fin de año vendrían tres bajas sucesivas de 25 puntos básicos cada una (en diciembre, noviembre y diciembre) llevando la tasa actual del 5,5% anual hasta 4,75% en diciembre. Pero ahora, con este 2,8% tan firma nadie sabe qué pasará.

A pesar de eso, siguieron retrocediendo las tasas largas de EE.UU.: se pagó 4,8% anual a 1 año de plazo, 4,1% anual a 5 años, 4,2% anual a 10 años y 4,5% anual a 30 años. Y con eso, en el exterior el dólar subió 0,5% en México, 0,4% contra la libra y 0,2% en Chile, pero bajó 0,1% contra el euro, en Brasil y en Japón, y cedió 0,2% en China, por lo que de momento el súper dólar se sigue manteniendo en las nubes.

El mercado cambiario local

En el mercado cambiario argentino, en cambio, con el dólar exportador a $1041,33, el BCRA se vio obligado a vender US$ 43 millones en el mercado. Y, entre otras cosas por un fuerte retroceso en el precio del oro, al final del día la autoridad monetaria perdió otros US$ 198 millones en las reservas, y ya hay analistas afirmando que en este momento Reconquista 266 ya tiene reservas negativas por más de US$ 4.000 millones, un número que puede superar los US$ 6.000 millones en rojo durante los próximos 90 días, ya que los productores agropecuarios siguen renuentes a vender lo que tienen guardado en los silos.

Pero tal como adelantó la estrategia planteada hace dos viernes por Caputo y por el titular del BCRA Santiago Bausili, la compra de dólares a exportadores a valor oficial ($ 929,50) y la venta de esos dólares en el contado con liquidación determinaron que los dólares libres se agacharan apenas. 

El dólar blue bajó $5 hasta $1.445, el Senebi subió $7,85 hasta $1.380,61, el MEP bajó $9,96 hasta $1.331,08 y el contado con liquidación bajó $6,53 hasta $1.333,01. Por lo que la brecha entre oficial y blue sigue en 49% y la del CCL con el mayorista fue del 43%.

O sea, el esfuerzo del Banco Central está mostrando que está utilizando dólares que los ahorristas tienen depositados en los bancos. Eso genera intranquilidad y sostiene la presión vendedora de títulos públicos, a pesar de que varios analistas los recomiendan con las dos manos. De todos modos, con pocos negocios y muy diversificados, los bonos argentinos bajaron otro 0,8%, por lo que el riesgo país subió 12 unidades, hasta 1.589 puntos básicos, testeando el techo que no se quebraba desde marzo pasado, cuando empezó esta crisis.

En cuanto a papeles privados, con mucha intranquilidad en muchos inversores, justo cuando Kamala Harris lanzó su primer spot de campaña luego de que Wall Street tuviera el miércoles su peor día en dos años, la difusión del firme crecimiento del PIB hizo girar las agujas y los índices, que bajaban fuerte hasta media rueda, se recuperaron y no cerraron tan mal. De hecho, hubo cierre mixto en la Bolsa de Nueva York, con suba del 0,2% para el Dow, con baja del 0,5% para el S&P pero con descenso del 0,9% para el Nasdaq. Al tiempo que se vio una baja del 0,4% en la Bolsa de San Pablo y un descenso del 0,5% en la de México.

Mientras tanto, el mercado bursátil local se terminó llevando la peor arte. Con $15.286 millones operados en acciones y $25.859 millones en Cedears, la Bolsa de Buenos Aires bajó 2,4%. Y las ADR argentinos que se transan en Nueva York anotaron una baja en bloque del 1% al 3,5% para Despegar, Pampa E, Macro, Francés, Telecom, Supervielle, Central Puerto, Loma Negra, TGS y Galicia.

La difusión del PIB norteamericano, con posibilidad de que la Fed extienda sus tasas altas por más tiempo, revolucionó el mercado de materias primas. Hubo una suba del 1,1% para el petróleo. Los metales preciosos estuvieron en claro descenso. Los metales básicos actuaron mixtos.

En granos, Chicago mostró mejoras para el maíz y la soja y baja para el trigo, en tanto que Rosario vio un firme aumento para la soja, una leve alza para el trigo y una baja para el sorgo. Y lo peor del día estuvo en el mundo cripto: elBitcoin bajó 2,2%, con caídas de hasta el 7% en el resto de los valores de ese panel.

Hubo una comidilla a lo largo del día por una foto emitida por el FMI, con Caputo y Georgieva sonrientes, pero con una particularidad: en la imagen estaba desaparecida la mano de la titular del Fondo, por lo que se supuso que la foto era "trucha" y se la bautizó como "la desaparecida mano del mercado". 

Más allá de la humorada, que se hizo viral, hubo algo esperanzador: la Universidad Di Tella emitió el índice de confianza del consumidor  y dio 5% de suba, con la mejora más importante del año, lo cual significa un respaldo al proceso económico. Veremos que dice el VAR sobre la foto entre Caputo y Georgieva, esperemos que no terminemos igual que el sub-23 contra Marruecos.