La Unión Europea se está preparando para prohibir que los viajeros estadounidenses ingresen al bloque cuando vuelva a abrir sus fronteras con el mundo exterior a partir del 1 de julio, etiquetando a Estados Unidos junto con Rusia y Brasil por su incapacidad para detener la propagación del coronavirus.
La medida es una reprimenda internacional del manejo de la pandemia por parte de la administración Trump. Millones de turistas estadounidenses viajan a la UE cada verano, pero es poco probable que suceda hasta que EE.UU. controle el virus.
A los viajeros de todo el mundo se les ha prohibido viajar a la UE desde mediados de marzo, pero los países comenzaron a levantar las restricciones de viaje a otros países miembros dentro del bloque en las últimas semanas.
La decisión final sobre qué países serán excluidos de la lista de viajeros admisibles de la UE se espera a principios de esta semana, antes de que el bloque vuelva a abrir el 1 de julio.
La lista completa de países designados como seguros para el turismo se finalizó el viernes, según el New York Times, e incluye a Australia, Canadá, Japón, Corea del Sur, Tailandia, Nueva Zelanda, Ruanda y el Vaticano.
Los Estados miembros están considerando dos listas potenciales de viajeros aceptables, dependiendo de cómo les vaya a sus países durante la pandemia.
Según los informes, ambas listas incluyen a China, así como a naciones en desarrollo como Uganda, Cuba y Vietnam.
Trump enfureció a los líderes europeos cuando de repente anunció una prohibición a la mayoría de los ciudadanos de la UE que viajan a Estados Unidos a mediados de marzo, cuando Italia, España y otros estaban luchando por controlar sus brotes.
