Salta será el último test electoral del año. El domingo, la provincia que irradia una notable influencia sobre sus vecinas tiene poco más de un millón de electores, es el octavo padrón del país y al igual que ha sucedido en la mayoría de las provincias, parecería tener una lógica electoral propia, escindida del escenario nacional.
El intendente de la capital, Gustavo Sáenz, quien compite con frente propio (Sáenz Gobernador) tiene altas posibilidades de alzarse con una victoria y reemplazar al actual mandatario Juan Manuel Urtubey. Sáenz, quien tuvo una relación oscilante con la Casa Rosada, debió despegarse de la figura de Mauricio Macri durante el año electoral, producto de la crisis que también se siente en la provincia. El jefe comunal de la ciudad más importante, que representa cerca del 40% del padrón, blindó su estrategia de campaña al provincializarla y en las PASO realizadas el 6 de octubre obtuvo el 43%.de lo votos.
La fortaleza de Sáenz reside, justamente, en su gestión en la capital, pero además cuenta con un condimento extra: muchas voces de la política local aseguran que Urtubey y su estructura, juegan subrepticiamente con el intendente capitalino.
Sáenz, quien tuvo una relación oscilante con la Casa Rosada, se despegó de la figura de Macri en el año electoral.
Tal es el caso de Miguel Angel Isa, el actual vicegobernador quien además fue derrotado en las PASO del Frente de Todos. “Isa es el padrino político de Sáenz”, deslizaron ante El Economista fuentes del Frente de Todos salteño.
Por su parte el FdT obtuvo el 32% si se suma los votos obtenidos por Isa, y por el diputado Sergio Leavy, quien es el principal referente del kichnerismo y se ha mantenido siempre leal a la figura de Cristina Kirchner desde 2015. Leavy se impuso con comodidad en la primaria.
En las filas del FdT salteño prima el pesimismo y por lo bajo, son varias la voces que señalan que la elección está prácticamente perdida. “Nos quedamos sin rumbo ni estrategia”, señalan.
A diferencia de Sáenz, Leavy buscó desplegar una campaña nacional pegando su figura a la de Cristina y Alberto Fernández.
La fórmula presidencial del FdT cosechó guarismos cercanos al 50%, aunque Leavy no pudo capitalizar dicho envión.
Tanto en las primarias nacionales como en octubre, la fórmula presidencial del FdT cosechó guarismos cercanos al 50%, aunque Leavy estuvo lejos de poder capitalizar dicho envión, con el calendario electoral salteño desdoblado. En el equipo de trabajo de Leavy, creen que el kirchnerismo se quedará con mayoría en el Senado provincial, y que los intendentes del espacio serán reelectos.
De hecho, el FdT seguramente tendrá buenas elecciones en los departamentos de San Martín y Orán, en donde se albergan las dos ciudades que le siguen en cantidad de electores a la capital: Orán y Tartagal, aunque muy probablemente no le alcance para contrarrestar la fortaleza de Sáenz. “A Leavy le cuesta mucho penetrar en la capital por su perfil”, razonan.
El tercer candidato en discordia, será el polémico diputado y empresario, Alfredo Olmedo. El legislador juega con frente propio (Olmedo Gobernador) y a su vez eligió una estrategia local prescindiendo de ligar su candidatura a algún espacio a nivel nacional. Olmedo cosechó el 20% de votos y el comportamiento de quienes lo apoyaron es una incógnita, aunque a priori, podrían tener mejor afinidad con Sáenz, que con el candidato del kirchnerismo.
La izquierda también superó las PASO, y su candidato será Pablo López.
La contienda por la capital también suscitará atención. La actual diputada provincial, Bettina Romero, quien compite con el apoyo de Sáenz, tiene muchas chances de suceder a su padrino político. En las primarias, se impuso frente a otros tres candidatos.
Por el FdT, el candidato es David Leiva, un reconocido artista local, quien ganó la interna contra otros seis candidatos.
