Según el informe Focus que difunde semanalmente el Banco Central de Brasil, los analistas del mercado volvieron a ajustar a la baja su pronóstico de inflación para 2017 que pasó de 3,08% a 2,97%. También esperan una suba menor del Indice de Precios al Consumidor Amplio para los próximos doce meses y para el año que viene. Se trata de una corrección esperada dado los datos preliminares de septiembre que muestran una suba del IPCA de 0,11%, y además, en los últimos doce meses se registró una deflación en el rubro Alimentos y Bebidas.
En este contexto, algunos analistas estiman que la tasa Selic podría caer por debajo del 7% aunque los analistas que más aciertos han tendido con sus pronósticos, la mantienen en ese nivel para fin de este año y en 7,25% al cierre de 2018.
También mejoraron los pronósticos para el nivel de actividad. La suba esperada del PIB en 2017 pasó de 0,60% a 0,68% y para 2018 de 2,20% a 2,30%. Hace sólo un mes, los analistas proyectaban una suba de 0,39% para este año y de 2% para el próximo. Pero hubo una leve corrección a la baja en el crecimiento esperado para la producción industrial.
Los analistas prevén un escenario estable en el mercado cambiario con el dólar cotizando a 3,16 reales en diciembre de 2017 y a 3,30 reales cuando finalice 2018. Hoy se opera a 3,15 reales.
De todas maneras, los datos de la economía brasileña estarán condicionados por los avances que se logren en materia de reformas estructurales que deberán concretarse antes de que la campaña para las elecciones presidenciales de octubre del año que viene, cobre intensidad.
