Por Eliana Esnaola
Más dudas que certezas y todos los días una sorpresa. En medio de la suba del tipo de cambio, el pedido financiero al FMI y el nuevo rol del ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne, como coordinador del equipo económico, despertaron fuertes rumores sobre el posible diferimiento del compromiso de rebaja del retenciones al complejo sojero. Aunque en la Casa Rosada consideran que sería un retroceso e implicaría volver a las recetas habituales que cargan sobre el sector privado el ajuste que no hace el Estado.
Ante esta incertidumbre, en el marco de la presentación del nuevo Sistema de Información Simplificado Agrícola (Sisa), el tema no paso y la prensa consultó al ministro de Agroindustria, Luis Etchevehere, si se debatió la propuesta en el encuentro que mantuvieron por la mañana con Dujovne. Al respecto, las respuestas de Etchevehere fueron: “No se habló del tema, quiere decir que está en marcha”, “No lo charlamos, fue un rumor”. En este sentido, detalló: “Tuvimos una reunión que generó mucha expectativa, vimos que hubo rumores esta mañana, ayer, y que a partir del fin de semana fueron creciendo”, y explicó: “La reunión que tuvimos con el ministro de Hacienda fue para coordinar, organizarnos y tener reuniones periódicas”. A su vez, comentó que entre los temas tratados, se habló de la necesidad de reducir el déficit, tener toda la austeridad que merece el momento, hacer que mejore la producción, los ingresos para el país y que existan mejores condiciones para invertir.
Un repaso
A modo de análisis, según cálculos de la Fundación Agropecuaria para el Desarrollo de Argentina (Fada), el resultado de la eliminación de derechos y trabas de exportación al trigo y al maíz, más la baja del 5 puntos de derechos de exportación a la soja, fue un aporte a la economía argentina de US$ 1.995 millones, sólo en 2017. Al respecto, explicaron los motivos: “Este dinero nuevo que se ha inyectado a la economía es debido a que, teniendo en cuenta estos tres cultivos, la producción de granos de 2017 fue de 16 millones de toneladas superior a la de 2015”. En este contexto, resulta necesario recordar que hasta 2015, los derechos de exportación tenían una alícuota del 35% para la soja, 23% para el trigo y 20% para el maíz. Con el inicio de la gestión de Cambiemos, los cereales tienen 0% y la soja 30% hasta fines del 2017. Luego, se planteó un cronograma de baja a partir de enero de 0,5% mensual, por lo que terminaría 2018 con una alícuota del 24%.
Con relación al impacto económico, Fada subrayó que el aporte de US$ 1.995 millones y 16 mill/tn de granos más, significa que la agricultura y otros sectores de la economía se dinamizan y generan empleo. En este sentido, dos casos con influencia directa son la maquinaria agrícola y el transporte.
Las voces
Ante los rumores, productores y entidades agropecuarias pusieron el grito en el cielo, tan es así que la Asociación de la Cadena de la Soja Argentina (Acsoja), mediante un comunicado, señaló: “Es imprescindible mantener el esquema de de rebaja de retenciones de soja comprometido”. La entidad, argumentó que es muy importante darle previsibilidad al productor, quien al momento de realizar la siembra basó sus decisiones en el esquema existente, y a su vez, subrayó: “Consideramos que es fundamental para el país generar incentivos a los sectores como el nuestro que son más competitivos y pueden revertir la difícil situación en que quedó Argentina a fines de 2015”. Sumado a esto, recordaron los dichos del presidente Macri hace pocos días: “Muchos impuestos que dañan la producción, como han sido las retenciones, un impuesto muy nocivo para la economía, ningún país del mundo cobra impuestos a los que exportan. Me sorprende que volver a escuchar como alternativa restablecer las retenciones, que ya vimos que no funcionaron”.
Por otro lado, El Economista consultó a Roberto Palomo, productor de granos y pro secretario de Apronor, que manifestó un total rechazo a la posible pausa de la quita de retenciones a la soja. Al respecto, comentó: “En el norte estamos con rentabilidad muy ajustada, si bien no nos pegó la sequía como en la región pampeana, también hemos tenido caída de rendimiento por problemas de sequía”. El productor de Apronor, fue claro y contundente: “No estamos en el mejor momento como para volver a echar mano al sector agropecuario para que pague la fiesta”.
Palomo, aseguró que “el sector respondió muy bien a la quita de retenciones”. Por lo cual, analizó que “si se vuelven a poner retenciones a los cereales como algunos han propuesto, sin duda va a desalentar la siembra, y por lo tanto, caer la producción”. Para el productor de Apronor, hay que buscar que el país produzca más, no menos, y según su mirada, ese tipo de medida desalienta la producción. Por último, aclaró: “No comparto lo que dicen algunos productores de cerdos y de aves de poner retenciones, no podemos basar la rentabilidad de un negocio con la pérdida de otro”.
Por su parte, Fermín Alberdi, productor porcino de San Gregorio, Santa Fe, también dialogó con El Economista y opinó que “si pausan la quita de retenciones, no va a cambiar nada. Que a la soja que es el 25% del costo la frenen el 5%, no mueve la aguja”. Según su mirada, el problema no viene por el lado de los costos. Para Alberdi, aquellos productores que pedían retenciones al maíz se confunden, y argumentó: “Pedir retenciones al maíz, sería decir, que el negocio solo es rentable pisando la rentabilidad de otro sector como el agropecuario y eso es falso, nosotros somos rentables por nosotros mismos. El problema es que nos están destrozando con el precio que le pagan al productor porcino”.
