El jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, Horacio Rodríguez Larreta, reunió ayer a los diputados que integran el bloque PRO de la Legislatura porteña con dos objetivos bien claros, explícitos: evaluar la marcha del trabajo parlamentario y acordar los temas de agenda considerados clave para la gestión local, como la ley de seguridad para la creación de la Policía y el Presupuesto para 2017. Pero, además, sirvió para trazar los primeros esbozos de la estrategia electoral local. Según trascendió, el embajador Martín Lousteau, referente del opositor ECO, estuvo entre las referencias de la reunión. “Nuestro único rival en 2017 somos nosotros mismos”, señalan que dijo el jefe de Gobierno, para quitarle peso a la preocupación que le manifestaron los legisladores del PRO.
Agenda
El encuentro se realizó por la mañana en el edificio donde funciona el anexo de la Legislatura, sobre la calle Hipólito Yrigoyen, donde el jefe del Ejecutivo mantuvo una charla con parte de la bancada que conduce el diputado Francisco Quintana y junto a la vicepresidenta primera del parlamento porteño, Carmen Polledo. La ley de seguridad, que habilita a la unificación de las fuerzas Metropolitana y Federal para la integración de la Policía de la Ciudad, que será tratado a mediados de noviembre en el recinto, estuvo entre los temas. Además, por cierto, del Presupuesto para 2017, que seguramente se debatirá a inicios de diciembre; y algunos expedientes vinculados con cuestiones de infraestructura, como la urbanización de villas y el proyecto del Paseo del Bajo, que unirá de sur a norte la Ciudad. En agenda, además, se encuentra el shopping que se propone construir en Caballito y el traspaso de la Justicia.
Candidaturas
No obstante, la cuestión electoral tuvo su peso y su espacio. Sobre todo, según trascendió, por la inquietud de los interlocutores de Rodríguez Larreta. La posibilidad de que el embajador argentino en Estados Unidos, elegido por el presidente Mauricio Macri, forme parte de la grilla de candidatos para el año próximo preocupa en el PRO. Más aún teniendo en cuenta la buena performance que tuvo en los comicios del año pasado, donde el actual jefe de Gobierno superó apretadamente a Lousteau en el balotaje. Y, también, que entre los socios podría contar con aliados del PRO en Cambiemos a nivel nacional, como el radicalismo, el espacio que más lo impulsa y que se considera oposición en la Ciudad. “Si seguimos avanzando con la gestión como lo estamos haciendo no vamos a tener problemas”, es una de las frases que trascendieron. “Nuestro único rival en 2017 somos nosotros mismos”, fue otra.
