La iniciativa de Javier Milei al proponer a dos jueces en la Corte Suprema generó un quiebre no sólo entre sus principales aliados, sino también hacia el interior de La Libertad Avanza. Luego de que su pliego tomara estado parlamentario y se formalizara la fecha de audiencia, su postulación recibió una numerosa cantidad de impugnaciones de distintos partidos políticos, asociaciones profesionales, organizaciones no gubernamentales y particulares.
Este miércoles, en una maratónica audiencia pública que duró más de ocho horas, el juez federal argumentó su postulación y dependerá ahora del consentimiento de los integrantes de la comisión de Acuerdos de la Cámara Alta para que su pliego primero obtenga dictamen. En el recinto, necesitará llegar a los dos tercios de votos de los presentes para que su designación quede activa.
Indefiniciones
La candidatura de Lijo es muy cuestionada y divide transversalmente a los bloques, incluso al oficialismo.
Los senadores de LLA, Francisco Paoltroni (Formosa) y Juan Carlos Pagotto (La Rioja) ya avisaron al interior de su espacio que no acompañarán los pliegos con sus votos.
A esto se suma la posición de la vicepresidente, Victoria Villarruel, quien públicamente se expresó contra el nombramiento de Lijo. "Ha partido mucho a la sociedad su candidatura, entre los que están a favor y en contra. Es un juez controversial que no contaría con los pergaminos necesarios", dijo, tras objetar que no se haya propuesto a una mujer para el cargo.
También le bajó el pulgar el expresidente Mauricio Macri, quién decidió que su espacio abandonaría el rol de socio permanente del oficialismo para caminar hacia un apoyo condicionado. A principios de este mes, el fundador del PRO dijo que "la nominación [de Lijo] es un error" y que designarlo generaría desconfianza en la Corte.
En la Comisión
El candidato debe, en primera instancia, lograr la aprobación de la Comisión de Acuerdos del Senado, para lo que necesita 9 votos sobre los 17 miembros.
Antes del arranque de la audiencia, se conoció que el cuerpo había cambiado a uno de sus miembros. El senador fueguino y vicepresidente del bloque de la UCR, Pablo Blanco, fue reemplazado por el correntino Eduardo Vischi, presidente del espacio en la Cámara Alta.
La diferencia entre ellos es que Blanco dijo varias veces que votaría en contra del pliego de Lijo. En tanto, Vischi nunca hizo pública su posición en este tema, aunque suele apoyar en votaciones claves al oficialismo.
Esa modificación podría ser determinante para la suerte de la postulación de Lijo. Sucede que si Vischi vota a favor, el pliego podría llegar a los 9 sufragios y obtener el dictamen de mayoría necesario para llevarlo al recinto.
En la Comisión de Acuerdos, que deberá emitir dictamen sobre los postulantes, será clave la postura que asuma la principal fuerza opositora, el peronismo, que cuenta con 7 de los 17 miembros. Por ahora no anunció cuál será su voto.
En el recinto
En el caso de lograr los números necesarios, deberá luego conseguir el voto de dos tercios de la Cámara Alta, es decir 48 voluntades sobre 72, si están todos los senadores presentes.
Lo cierto es que con 7 miembros en el Senado, y aún reuniendo a todos los bloques de la oposición dialoguista, el oficialismo no alcanza a la mayoría calificada de dos tercios que se requiere para nombrar a jueces de la Corte. Esto significa que, sin el apoyo de senadores de Unión por la Patria, es imposible que se aprueben las designaciones.
La próxima reunión será el miércoles cuando se realizará la segunda audiencia pública en la que defenderá su candidatura Manuel García-Mansilla, el otro nombre propuesto por Milei.
