En el inicio de la maratónica sesión, el diputado del Frente de Izquierda Néstor Pitrola, se animó a tocar en el debate un tema tabú de los últimas semanas, que generó que los legisladores apaguen el teléfono ante los insistentes pedidos de la prensa. Pitrola, pidió incluir en el temario el rechazo a los aumentos de casi el 50% en los sueldos de los diputados y senadores. La moción fue votada y recibió 104 votos a favor, pero 112 en contra, mayoritariamente de Cambiemos, del Frente Renovador y del Bloque Justicialista. El Frente para la Victoria fue el que mayor respaldo le dio al pedido de la izquierda. Para poder ser tratado, la iniciativa requería del apoyo de dos tercios de los presentes.
La polémica, surgió a través de la resolución firmada por la presidenta del Senado, Gabriela Michetti y Emilio Monzó, principal autoridad en Diputados. Los hombres del Gobierno, establecieron los aumentos de las sumas de los legisladores por la duplicación de los gastos de representación y el incremento en concepto de “desarraigo”.
“Hay un divorcio entre los ingresos de los diputados de la realidad social que vive el pueblo trabajador”, señaló Pitrola, y agregó: “En un país donde se discute un bono burla de fin de año, en un Congreso que no debate un pago de emergencia para los jubilados, en un recinto que va a discutir un presupuesto de ajuste, esto es un contraste brutal”. “La mitad de los trabajadores cobra un promedio de 7.000 pesos mensuales. Las familias no llegan a 14.000 pesos mensuales. Este aumento agravia a todo el pueblo trabajador”, acompañó Myriam Bregman, del PTS.
Por caso, en el momento de la votación, no estaban presentes Elisa Carrió, Sergio Massa, y Margarita Stolbizer.
Más temprano, el que opinó sobre el tema fue el presidente Mauricio Macri. “Hay que reconocer que hubo una inflación y hay que hacer un ajuste para ser medianamente equitativos, pero tampoco en estos momentos pasarse de largo”, argumentó el mandatario, sobre la resolución que firmaron Michetti y Monzó.
