El Economista - 70 años
Versión digital

jue 28 Mar

BUE 21°C

Más de 600 fábricas vuelven a abrir en los próximos días

kulfas-lombardo
kulfas-lombardo
11 mayo de 2020

Más de 600 fábricas que tenían suspendida su actividad desde hace más de 50 días, porque no pertenecían a los rubros considerados esenciales cuando se decretó el aislamiento social, preventivo y obligatorio, volverán a producir en los próximos días. Así lo anunciaron anoche desde el Ministerio de Desarrollo Productivo.

Entre las ramas industriales que retomarán su actividad se encuentran la automotriz y la de autopartes, la de fabricación de motos y neumáticos, la de electrodomésticos, la de textil, calzado e indumentaria, además de sectores como la metalúrgica, tabaco, gráfica, maderara, juguetes, farmacéutica, química y petroquímica, entre otros.

Los protocolos para que las empresas reabran incluyen el traslado del personal sin uso del transporte público (en vehículos provistos por la compañía, autos propios o movilidad individual), control de síntomas de Covid-19, estrictas medidas de distanciamiento social, provisión de material preventivo (barbijos y alcohol en gel, entre otros) y plan de acción ante la aparición de casos sospechosos. Los protocolos pueden variar según el rubro pero todos tienen ese denominador común.

Las fábricas que ya tienen aprobada su reapertura para los próximos días son más de 640 y se encuentran en todo el país, pero especialmente en las provincias de Buenos Aires, Córdoba, Santa Fe y Entre Ríos. Más de 550 de las autorizadas en esta primera etapa son pymes de menos de 150 trabajadores y casi la mitad no supera los 10 empleados.

“Algunos ejemplos de las compañías que volverán a producir dentro de la industria automotriz y autopartes son Toyota Argentina en la provincia de Buenos Aires; Volkwagen Argentina, en sus plantas de Buenos Aires y Córdoba; Scania Argentina que en su filial de Tucumán- donde emplea a aproximadamente 500 trabajadores- o la autopartista multinacional Mahle en Santa Fe, que tiene casi 700 empleados. Las empresas de este sector diseñaron un protocolo sanitario junto al gremio Smata”, dijeron desde el ministerio.

Entre las empresas de la industria textil que reabrirán sus puertas se encuentran Puma Sport Argentina y Ricoltex, integrante del Grupo Ritex en la provincia de La Rioja, quienes emplean a 350 y 900 trabajadores respectivamente. Otro caso: Alpargatas en Tucumán que da trabajo a más de 700 personas.

“Dentro de la rama metalúrgica retoma la actividad la fabricante de ollas, sartenes y productos elaborados en metal Essen Aluminio SA, que posee su fábrica en el Parque Industrial La Victoria de Santa Fe y da trabajo a 285 personas. También reabrirá en Entre Ríos Johnson Acero su planta industrial de la ciudad de Paraná con más de 400 empleados. En cuanto a la producción de electrónica y electrodomésticos, Alladio SA, empresa productora de lavarropas y secarropas ingresa a la lista de fábricas que obtiene el permiso para retomar actividad y dará tareas en esta etapa al 60% de sus 1000 trabajadores. Otra empresa que comenzará con su producción es la fabricante de calefones Orbis en la zona norte de Buenos Aires con 175 de sus 550 trabajadores”, agregaron en Desarrollo Productivo.

***

Solá: “Los desacuerdos son la antesala de los consensos”

El ministro de Relaciones Exteriores, Felipe Solá, aseguró que, para Argentina, el Mercosur es su “proyecto político regional más importante” y, si bien reconoció que existen “tensiones” a raíz como seguir, las ponderó como constructivas. El canciller marcó que “todas las negociaciones en curso siguen su marcha”, sólo que el país “plantea ritmos diferentes en algunos casos” dado que “cree que, como mínimo, hay que contar con profundos y actualizados estudios de impacto”. Además, en una columna publicada en Clarín, dijo: “En las negociaciones con los socios sobre eventuales acuerdos, además, el Gobierno tiene su prioridad: fijarse en qué destinos hay mayor potencial para consolidar sus exportaciones y para importar bienes esenciales que permitan el desarrollo de la industria”. Según Solá, el Mercosur “es una política de Estado que debe ser sostenida por encima de los cambios de gobierno” y que “no hay que asustarse cuando surgen tensiones” porque “si alguien imaginó que discutir con franqueza es romper el Mercosur o dejar las negociaciones en marcha, está equivocado”. Por el contrario, dijo: “Entre socios, los desacuerdos suelen ser la antesala de nuevos consensos”. Por último, dijo que hay que actuar sin dogmas. “Actuar sin dogmas significa que es malo abrirse de manera temeraria y es malo, también, cerrarse de modo anacrónico”, dijo.

Seguí leyendo

Enterate primero

Economía + las noticias de Argentina y del mundo en tu correo

Indica tus temas de interés