Durante esta semana, los países que conforman el Mercosur tendrán su primer encuentro luego de lograrse la reciente firma por el acuerdo de librecomercio con la Unión Europea (UE). La cumbre comenzará formalmente hoy con reuniones de coordinación de agenda entre funcionarios de los países miembros y durante el encuentro de los presidentes de los países, que será el miércoles en la ciudad de Santa Fe, abordarán, entre otros temas, la posibilidad de aplicar mecanismos provisorios para poner en marcha cuanto antes el pacto comercial con la UE.
Así lo anticiparon el canciller, Jorge Faurie, y el ministro de Producción y Trabajo de la Nación, Dante Sica, que buscarán una aprobación provisoria aun si el Parlamento de alguno de los países miembros del Mercosur (Argentina, Brasil, Uruguay y Paraguay) demora su tratamiento. Según aseguró Faurie, el acuerdo irá a la aprobación de las cámaras legislativas de los cuatro países, pero para su aplicación provisoria están evaluando mecanismos alternativos.
Faurie indicó que los puntos económicos y comerciales del acuerdo podrán entrar en vigencia de manera provisional en 2021. El funcionario explicó que, a diferencia de los temas ambientales, políticos o institucionales que requieren de la aprobación del parlamento de la UE y luego la ratificación del parlamento de cada miembro del bloque, en los temas económicos y comerciales se instrumentó una facultad delegada al Parlamento europeo y pueden comenzar a estar operativos anticipadamente. Además, durante la cumbre los jefes de Estado hablarán sobre los avances en la negociación con el bloque del Efta (Asociación Europea de Libre Comercio), del cual el Gobierno espera poder cerrar pronto, según ha declarado en varias oportunidades. Asimismo, se espera que durante el encuentro los gobiernos de Argentina y de Brasil den mayores precisiones sobre el tratado de librecomercio que ambos países en conjunto pretenden establecer con Estados Unidos.
Documentos
El viernes, en simultáneo con la UE y con el resto del Mercosur, el Gobierno publicó los documentos completos del tratado firmado a fines del mes pasado, los cuales aún están en proceso de revisión legal y formal, y por lo tanto podrían tener modificaciones, según indicó la Cancillería. El documento final será el que resulte luego de las confirmaciones institucionales de cada uno de los miembros de ambos bloques.
Uno de los puntos centrales del tratado está relacionado con la baja de aranceles y sus respectivos tiempos. Según explica Cancillería, la UE se compromete a desgravar su comercio de forma más rápida (hasta diez años), mientras el Mercosur tendrá plazos más extensos, de hasta quince años. Al entrar en vigencia el acuerdo, desde el primer día, 76% de las importaciones europeas provenientes del Mercosur tendrán la eliminación de aranceles. En cambio, la desgravación inmediata del Mercosur involucra apenas a 13% de la cobertura. Además, 9% de lo que se importa desde la UE estará excluido del acuerdo con el objetivo de “proteger sensibilidades sectoriales”.
Europa
Durante los últimos días, en el continente europeo varios sectores han manifestado su postura en contra de este tratado. Uno de ellos fue el gremio ganadero en Irlanda y Bélgica, que salió a las calles a protestar porque ven amenazados ante la competencia de la carne importada a menor valor. En España, el sector frutícola también expresó su preocupación por la competencia, en tanto que en ese país la industria automotriz celebró el acuerdo.
