Astuto, Dante Sica revirtió ayer la infeliz categorización que su antecesor (Francisco Cabrera) había hecho de los empresarios locales. Vale recordar, el exministro los tildó de llorones y abrió una grieta, sobre todo con los industriales. En declaraciones periodísticas, Sica se encargó de decir que su visión sobre los hombres (y mujeres)
de negocios es completamente distinta.
Ante un momento de vacas flacas, es mejor llevarse bien con los empresarios quienes son, en definitiva, los que crean empleo y generar riqueza. No es, por cierto, el gran estímulo ni va a desatar per se una lluvia de inversiones, pero
es mejor llevarse bien antes que mal.
“En un país como este, los empresarios son héroes. Ser empresario en una economía con volatilidad macro y crisis
recurrentes cada cuatro o cinco años es una proeza. Son héroes. Vas a encontrar empresarios buenos y malos, pero Argentina tiene un tejido empresarial con una gran capacidad emprendedora, innovadora y con la sabiduría para capear dificultades”, dijo Sica al diario La Nación.
“Hay que reconocer que ser empresario en la Argentina es una tarea titánica, en una economía que ha tenido la inestabilidad macro de los últimos 50 años con crisis recurrentes, los empresarios tienen la capacidad de haber podido sortear las crisis. Tenemos que aprovechar esa capacidad de persistencia, esfuerzo e innovación. El argentino tiene un espíritu emprendedor muy fuerte que va de jóvenes a empresas tradicionales”, dijo ante Clarín.
