El decreto emitido por Javier Milei que restringe el acceso a la información pública desató un fuerte rechazo entre los periodistas. La decisión despertó alertas por el carácter de "urgencia" que se le dio a la medida que impide a la ciudadanía acceder a los datos que se consideren de índole privada y amplía las excepciones que permiten al Estado la negar información solicitada.
No se trata del primer hito de tensión entre Milei y el periodismo. Y, dado el ritmo de cruces, tampoco será el último. El primer mandatario acusa a los periodistas de mentir sobre su Gobierno y usar la información con fines extorsivos. También los llamó "ensobrados" o "perisobres" más de una vez.
En ese marco, está escalando la tensión con un medio en particular: La Nación.
El decreto supuso una nueva escalada en una relación cada vez más tensa.
Joaquín Morales Solá, una de las plumas históricas de la "tribuna de doctrina", tituló su columna "Un grave retroceso en la libertad", y advirtió sobre el "discurso peligrosamente violento" del Presidente hacia los periodistas.
Otro peso pesado como Carlos Pagni escribió "Javier Milei y el extraño caso de un liberalismo autoritario", en donde planteó que "empiezan a verse mejor los rasgos populistas y autoritarios de este Gobierno: un gran culto a la personalidad de Milei, cuyo sumo sacerdote es el mismo Presidente, y dificultades para aceptar ideas distintas".
Para el jefe de Estado, los medios de comunicación forman parte de "la casta" a la que prometió combatir. "Lo que me interesa mostrar de todo esto es que le quede bien en claro a la basura de la política tradicional y a los periodistas el desprecio que la gente tiene por ellos", subrayó Milei en su última entrevista televisiva, precisamente en LN+. Según el Presidente, la libertad de prensa sólo sobrevive en las redes sociales, su canal de comunicación favorito.
La Nación+ es uno de los canales de comunicación con más sesgo oficialista en la actualidad. Comunicadores como Eduardo Feinmann, Luis Majul y Esteban Trebucq tienen los contactos más directos con el Gobierno de La Libertad Avanza.
Lijo y adelantos
Morales Solá advirtió que el Presidente pidió a los editores de La Nación que den explicaciones sobre su oposición a ciertas decisiones del Gobierno, tales como la designación del juez federal Ariel Lijo como miembro de la Corte Suprema de Justicia. Por otro lado, Pagni destacó que Luis Caputo "se quejaba de que la periodista de La Nación, Florencia Donovan, sabía más que él lo que le iba a pedir el FMI cuando comience a negociar".
Lo cierto es que los exabruptos de Milei hacia los periodistas comienzan a extenderse al resto La Libertad Avanza y se enfocan en aquellos medios que acompañaron los primeros pasos del Gobierno.
Por caso, el ministro de Economía escribió "totalmente falso" frente a una nota de La Nación en la red social X. E intimó: "Después se quejan porque los corregimos".
Milei celebró el tuit de Caputo y le mandó un nuevo dardo a "Julito" (por Julio Saguier), el principal accionista de La Nación.
"GRANDE @LuisCaputoAR poniendo en caja con datos a los MENTIROSOS que mienten, ensucian, calumnian e injuria a las órdenes de Julito (sería lindo saber el origen del encono)...", dijo el presidente Milei.
"Entiendo que al señor Saguier le caiga mal Lijo, vaya a saber por qué, y lo opere todo el tiempo desde sus esbirros mediáticos. Imagino que el difunto Bartolomé Mitre se sentiría mal al ver en lo que se convirtió ese diario", dijo Milei, días atrás.
Villaruel: periodismo "pautero" y "mala leche"
También la vicepresidente Victoria Villarruel publicó en Instagram dos titulares y acusó al periodismo de "pautero y mala leche": uno de ellos era de La Nación, medio al que le recomendó "informar sin hacer amarillismo".
