Trump o Harris: ¿quién le conviene a Argentina?
Una pregunta recurrente en los años con elecciones presidenciales en Estados Unidos es sobre el impacto que su resultado puede tener en Argentina. La respuesta es poco si se tiene en cuenta la reducida, y afortunadamente poco conflictiva, agenda bilateral. La preocupación de Washington, por ejemplo, ante la creciente presencia económica de China es un tema que involucra a toda la región y no sólo a Argentina.
- Pero el resultado de las elecciones estadounidenses puede ser relevante si se consideran los cambios que pueden darse en el escenario económico global y que repercutan en Argentina al igual que en otros países.
En el terreno económico, un papel relevante lo tiene el nivel de la tasa de interés en Estados Unidos porque impacta en el costo del endeudamiento global y la disponibilidad de capitales para otros mercados. Además tiene influencia directa sobre el valor del dólar en el mundo que es un dato relevante para Argentina porque influye sobre el manejo de la política cambiaria local y el precio de las commodities.
Si bien determinar el nivel de las tasa de interés es competencia de la Reserva Federal, esa definición está condicionada por la evolución de la inflación que, salvo shocks externos, depende de las decisiones del Gobierno.
- Hay coincidencia en que el próximo turno presidencial comenzará el 20 de enero en un contexto con tendencia a la baja de la inflación.
Pero a partir de allí, las opiniones se dividen. Para algunos economistas, las políticas proteccionistas de Donald Trump imponiéndoles más aranceles a algunos productos importados pueden provocar un aumento de los precios. Del otro lado, se ubican los que consideran que una administración demócrata liderada por Kamala Harris podría elevar el desequilibrio fiscal alentando la inflación.
- Más allá de los factores económicos generales, existen otros que podrían influir en la relación bilateral.
La cercanía ideológica en muchos temas de Javier Milei con Trump alimenta la fantasía de que su triunfo sería la llave para una rápida asistencia del FMI a Argentina ordenada desde la Casa Blanca. Se trata de un pensamiento con una alta cuota de voluntarismo. Pero si cabe esperar coincidencias en las votaciones en los organismos internacionales.
Pero la relación política sería completamente distinta en el caso de un triunfo de Harris porque en todos los temas, por ejemplo en la agenda climática y de género, está en la vereda de enfrente a la de Milei.
Pero en cualquier caso, las simpatías personales entre los presidentes o visiones ideológicas compartidas no deberían estar por encima de las responsabilidades institucionales ni podrán anteponerse a los factores estructurales que determinarán las relaciones entre Estados Unidos y Argentina en los próximos años.