Análisis

Narendra Modi en Ucrania: una visita histórica con resonancias geopolíticas

El primer ministro indio realizó una visita formal en Ucrania que puede tener importantes repercusiones geopolíticas
Desde el inicio de la guerra, India ha optado por no condenar abiertamente a Rusia.
Juliana Inda 05-09-2024
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El primer ministro de India, Narendra Modi, recientemente realizó una visita a Ucrania, marcando un hito en las relaciones diplomáticas entre ambos estados. 

Esto representó la primera vez en más de 30 años, desde el establecimiento de las relaciones diplomáticas, que un líder indio visita suelo ucraniano y tiene implicaciones que trascienden los lazos bilaterales, resonando en la compleja geopolítica actual.

La visita podría redefinir el papel de la India en el escenario global, especialmente en el contexto de una guerra que ha impactado al mundo entero y ante la cual los países han adoptado diversas posturas.

El enfrentamiento comenzó el 24 de febrero de 2022, cuando Rusia lanzó una invasión a gran escala contra Ucrania, su país vecino. 

Este conflicto, precedido por la anexión rusa de Crimea en 2014, se ha convertido en el mayor enfrentamiento militar en Europa desde la Segunda Guerra Mundial. 

Desde el inicio de la invasión, Ucrania ha recibido un amplio apoyo militar y económico por parte de Occidente, mientras que Rusia ha enfrentado grandes sanciones económicas. Pese a las múltiples rondas de negociaciones, la crisis sigue sin resolverse.

Rusia y Ucrania: el epicentro de la tensión global

Desde el inicio de la guerra, India ha optado por no condenar abiertamente a Rusia: en lugar de alinearse con las sanciones lideradas por Occidente, Nueva Delhi ha abogado por una solución diplomática al conflicto. 

Esta postura le ha permitido mantener relaciones estables tanto con Rusia, su tradicional aliado en defensa y energía, como con Occidente, con quien ha estado fortaleciendo lazos en áreas estratégicas clave.

En un contexto de sanciones globales, India ha aumentado drásticamente sus compras de petróleo ruso, aprovechando los precios subsidiados, lo que ha ayudado al Estado a ahorrar miles de millones de dólares. 

Antes del 2022, la India solamente compraba el 1% de sus necesidades a Moscú, pero ahora Rusia se convirtió en el principal proveedor de petróleo de la India.

Por otro lado, India, que en el pasado dependía casi exclusivamente de las importaciones de armamento ruso, ha diversificado gradualmente sus fuentes de adquisición militar, aunque aún sigue comprando una parte significativa de sus armas a Moscú. 

A pesar de la guerra, las relaciones comerciales con Rusia siguen siendo relevantes a los intereses de la India, lo cual se ve reflejado en su política exterior.

Este delicado equilibrio ha puesto a prueba la capacidad de India para mantener su política de "autonomía estratégica", una doctrina que busca que la nación sea capaz de tomar decisiones estratégicas de manera independiente, protegiendo sus intereses en el escenario internacional. 

La visita de Modi a Zelensky se enmarca en este esfuerzo por mantener un balance entre las expectativas de Occidente y las relaciones históricas con Rusia.

 

La visita a Ucrania

La visita de Narendra Modi a Volodomír Zelenski tiene intenciones tanto explícitas como implícitas: en la superficie, se trata de fortalecer la colaboración en áreas clave como la defensa, la economía, y la tecnología. 

Este viaje representa una oportunidad para que India y Ucrania profundicen sus lazos en estos sectores estratégicos. 

Sin embargo, puede deducirse que la visita va más allá de los objetivos formales, ya que el primer ministro también busca posicionar a India como un actor relevante en la arena internacional, particularmente en el contexto del conflicto ruso-ucraniano. 

Además, el viaje también busca contrarrestar las críticas surgidas tras el encuentro de Modi con Putin en Moscú, el cual coincidió con un ataque ruso a un hospital infantil en Ucrania, lo que generó malestar en sus aliados occidentales. 

Al acercarse a Ucrania, el mandatario indio podría fortalecer la imagen de su país como una nación que puede mantener relaciones constructivas con las partes en disputa, sirviendo de "puente" entre Oriente y Occidente.

La visita ha sido bien recibida por muchos actores internacionales, incluido el presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, quien elogió el "mensaje de paz" de Modi y su apoyo humanitario a Ucrania. 

A pesar de ello, las tensiones persisten, ya que la India continúa comprando petróleo ruso, lo que financia indirectamente la guerra de Rusia contra Ucrania.

Esta postura distancia a la India de naciones como China, que también se declara neutral, pero, a diferencia de Modi, Xi Jinping nunca ha visitado a Zelenski, mientras que ha mantenido reuniones con Putin a lo largo de la contienda.

El rol de la India en el conflicto

India ha sido fundamental para convocar a países del "Sur Global" para que mantengan una postura neutral frente al conflicto, o expresen su apoyo a Ucrania.

La neutralidad asumida por Modi le permite actuar como un facilitador potencial en futuras conversaciones de paz. 

No obstante, la efectividad de India en este rol dependerá, no solo de su capacidad para mantenerse independiente sin causar distanciamiento con las partes en disputa, sino también de si realmente cuenta con los recursos y la motivación para hacerlo.

En este contexto, la visita del líder indio a Ucrania es más que un simple gesto diplomático: al visitar Kiev, Modi no solo busca reparar la imagen internacional de India, sino también posicionar a su nación como una voz importante en la resolución de conflictos globales.  

Este viaje, aunque riesgoso, subraya la ambición de India de ser reconocida como una potencia global responsable, que puede manejar las complejidades de la diplomacia actual. 

La "autonomía estratégica" de Nueva Delhi, que busca maximizar sus opciones sin comprometer su independencia, está siendo puesta a prueba.