La economía estadounidense estaría repuntando con solidez en el segundo trimestre desde su desempeño deslucido de los tres primeros meses del año, según dos proyecciones que los mercados siguen de cerca.
El modelo GDPNow de la Fed de Atlanta mostró una mejora en la estimación de la expansión del trimestre en curso a un ritmo de 2,9%, contra el 2,5% que estimó a mediados de mes. El recálculo se basó, entre otros indicadores, en los últimos datos de pedidos de bienes duraderos, que crecieron 3,4% en abril. La revisión de la estimación estuvo en línea con la actualización que dio esta semana Goldman Sachs.
El banco de inversión estadounidense elevó su estimación del crecimiento del segundo trimestre a 3,0% desde 2,7%, en base a un aumento del déficit del comercio de bienes en abril que fue menor de lo que había proyectado.
El producto interno bruto de Estados Unidos avanzó solo un 0,5% en los meses iniciales del 2016, afectado por la apreciación que tuvo el dólar el año pasado y la abrupta reducción de la inversión del sector petrolero tras el desplome del precio del crudo.
Pero ese bache en la actividad habría sido solo temporario, ya que la fortaleza consistente del mercado laboral comenzó a producir alzas más significativas en los salarios, llevando a una recuperación del consumo de los estadounidenses.
La mejora constante del mercado de trabajo volvió a verse en los datos de las solicitudes del seguro para desocupados, que reflejaron una nueva reducción semanal para seguir en niveles asociados al pleno empleo.
