En línea con los pronósticos de los analistas, el PIB de estados Unidos creció 2,9% en el tercer trimestre luego de haberlo hecho a sólo el 1,4% en el segundo. Fue el mejor desempeño trimestral en dos años pero, de todas maneras muchos economistas advierten que no hay que sacar conclusiones apresuradas porque el nivel de actividad sigue mostrando algunas debilidades. Destacan, por ejemplo, que se si excluye el volátil rubro de los stocks del sector privado, el crecimiento del PIB fue de sólo 2,3% y que hubo una incidencia puntual en la tasa de crecimiento por las exportaciones de soja.
Por supuesto que el dato conocido el viernes, diez días antes de las elecciones mereció lecturas por parte de los candidatos. Para Hillary Clinton quedó en evidencia que la economía está en una buena senda aun cuando se pueda hacer más. Donald Trump, por su parte, sostuvo que es un dato aislado en el marco de una economía que crece muy poco ya que el promedio de 2,1% anual desde la salida de la recesión. En cualquier caso la economía crecerá 2% este año, lejos de los registros previos a la crisis pero muy por encima de lo que pueden exhibir otros países desarrollados.
De esa manera, durante la presidencia de Barack Obama, el promedio del crecimiento de la economía será similar al d George W. Bush. Pero Obama podrá decir que sacó al país de una recesión a la que lo llevó la falta de controles financieros de su antecesor.
