Panorama

Bessent, el flautista de Hamelin con sus virtudes y sus riesgos

Cuando se insinuaba una rueda complicada, apareció Scott Bessent y dio vuelta al mercado. Los dólares se tranquilizaron, con ventas por parte del Tesoro. Los bonos terminaron con subas. Y la Bolsa mejoró, con buen resultado en los ADR. En el exterior sobresalieron las criptomonedas.
Scott Bessent
Luis Varela 02-10-2025
Compartir

"Tenemos que rendirnos y reconocer que lo que sufre Argentina desde diciembre del año pasado es una crisis de credibilidad. Milei y su entorno cometieron muchos errores, perdieron esa aurea inmaculada de antipolítica con la que venían, y desde ahí venimos derrapando de manera sistemática. Y ahora aparece un funcionario como el secretario del Tesoro de EE.UU. que con solo mover el dedo índice nos maneja como si fuera un director de orquesta, aunque también debemos entender que se puede convertir en una especie de flautista de Hamelin".

La lectura salió de la boca del número uno del departamento de inversiones del banco privado más importante de la Argentina, que por cuestiones estratégicas prefirió dejar su pensamiento en un contundente off the récord, quizás porque está ya harto de que el ADR de su entidad haya derrapado la friolera del 61%, al pasar en la Bolsa de Nueva York de US$ 72 a US$ 28 en lo que va del año.

Lo cierto es que a través de sus habituales comunicaciones cuidadas, el secretario del Tesoro de Donald Trump, que trabajó durante años como broker, administrador principal de fondos de alto riesgo, bajo la órbita del gigantesco inversor húngaro George Soros (quien con sus 95 años sigue monitoreando la marcha  de los mercados) emitió este jueves dos mensajes breves y con su sola palabra el mercado argentino tuvo un hipo, pasando de la tranquilidad, al vértigo y luego nuevamente a una posición más optimista.

Los mensajes del secretario

Lo que dijo Bessent primero trajo alguna inquietud, ya que afirmó que lo que aportará EE.UU. después de la elección será el swap por US$ 20.000 millones, sin decir cuáles serían las condiciones para poder activarlo, en caso de necesitar los fondos para frenar cualquier ataque contra la moneda argentina. Pero como eso no alcanzó, Bessent deslizó que hay chances de que EE.UU. adquiera parte de la deuda que ya tiene emitida Argentina (que hoy llega a unos US$ 70.000 millones, cotizando a una paridad del 50%) y que además podría comprar la emisión de deuda nueva.

Ni bien se emitieron esos mensajes, se conoció también que los máximos representantes del equipo económico (Luis Caputo, Santiago Bausili, José Luis Daza y Pablo Quirno) partirán este viernes hacia Washington, para acelerar esa negociación, en algo que puede sonar como alivio o también como urgencia, en un momento tan inestable, cuando faltan apenas 24 días para la elección del 26 de octubre.

La cuestión es que las palabras de Bessent dieron vuelta la tendencia como si se tratara de una taba que gira en el aire. Los dólares subían, y con una venta de parte del Tesoro de US$ 200 millones (menos de la mitad de lo que vendió el miércoles), el blue retrocedió fuerte y el resto de los dólares cerró prácticamente sin cambios. Mientras que los bonos, que estaban en rojo, terminaron la mayoría en verde, con el índice de riesgo país mostrando suba todavía porque se mueve con cierto retraso. Y la Bolsa local también respiró, con el Merval hacia arriba y los ADR argentinos en Nueva York anotando una suba en bloque de hasta el 5%.

El gran tema es que mientras se conseguía, nuevamente, como pasó hace unos días, una tregua en esta crisis que viene viviendo el mercado local, en el Congreso la oposición embestía con la intención de rechazar en el Senado otros dos vetos del Presidente Milei a la ley de financiamiento universitario y a la emergencia en discapacidad, donde se puso en foco la bandera del Garrahan. Frente a eso, con gran lucidez, la senadora (UCR, Santa Fe) Carolina Losada puso las cosas en blanco sobre negro: "Por supuesto, como cualquier argentino, apoyo a la universidad pública y aún más a la salud y al Garrahan, pero esta votación que se hace en este momento, a tan poco de las elecciones no es nada más que un artilugio político para conseguir votos, y dejar descolocado al Gobierno de Milei, lo cual me parece algo completamente fuera de lugar".

En medio de esta guerra electoral de desgaste, un operador que se enteró que habían comparado a Bessent con el flautista de Hamelin, preguntó "¿Eso es bueno o malo? ¿Conocés bien la historia?". El flautista de Hamelin, escrito por Jacob y Wilhelm Grimm en 1816, narra la historia desarrollada en la ciudad alemana de Hamelin, que estaba infestada de ratas. Ante eso, apareció un flautista forastero vestido con ropas muy coloridas, que ofreció librar a la ciudad de la plaga a cambio de una gran recompensa. Los habitantes y el alcalde aceptaron, el flautista tocó su flauta, todas las ratas lo siguieron hasta el río Wesen, donde fueron cayendo hasta ahogarse. Cuando el flautista regresó a cobrar lo prometido, el alcalde y los habitantes, ya libres del problema, se negaron a pagarle. Y la venganza del flautista, ofendido por la promesa rota, fue tocar una nueva melodía, que arrastró a todos los niños de la ciudad, llevándolos hasta una montaña que se los tragó y desaparecieron para siempre.

Dicho esto, el operador sentenció "si hacés un acuerdo con Bessent no es joda; si firmás algo a cambio de esta ayuda se tendrá que devolver, Milei dice que no pidieron nada, pero es bastante difícil de creer. Aunque también es cierto que, como buen broker, si salimos de este enjambre y logramos volver a los mercados voluntarios de crédito, EE.UU. obtendrá con los bonos comprados una ganancia más que suculenta.

Mercados globales más tranquilos

Todo esto se desarrolló con los mercados internacionales moviéndose con bastante tranquilidad. Las tasas largas de EE.UU. se aplastaron: se pagó 3,6% anual a 1 año de plazo, 3,6% anual a 5 años, 4,1% anual a 10 años y 4,7% anual a 30 años. Y con eso, en el exterior el dólar subió 0,4% en Chile, 0,3% en México, 0,2% en Brasil y contra la libra, y 0,1% contra el euro, y no hubo cambios contra el franco suizo, el yuan y el yen.

El mercado cambiario local también se tranquilizó. Con el dólar oficial a $1.454,16, el BCRA no intervino en el mercado de cambios, pero el Tesoro volvió a vender dólares, aunque menos que el miércoles y además al final del día el BCRA no tuvo modificaciones en la cantidad de reservas. Con esto, el dólar oficial bajó $2,73 hasta $1.454,16 pesos, el blue cayó $20 hasta $1.455, el Senebi subió $1,63 hasta $1.464,73, el MEP subió $1,87 hasta $1.525 y el contado con liqui subió $2,55 hasta $1.574. Por lo que la brecha entre oficial y blue volvió al 0% y la del CCL con el mayorista fue del 10%.

En títulos públicos, que en la apertura mostraban bajas de más del 2%, los promedios terminaron con buen volumen, en los que los bonos argentinos subieron 0,7%, aunque el riesgo país subió 34 unidades hasta 1264 puntos básicos, en hubo analistas que auguraron que no sería de extrañar que pronto vuelva a ubicarse por debajo de los 1.000 puntos.

Rueda positiva para las acciones

En papeles privados, mientras tanto, hubo otro día en verde en la Bolsa de Nueva York, con suba del 0,1% para el S&P, alza del 0,2% para el Dow y mejora del 0,4% para el Nasdaq. Al tiempo que la Bolsa de San Pablo bajó 1% y la de México subió 0,5%.

Y por fin, el mercado bursátil local tuvo algo de paz. Con $117.350 millones operados en acciones y $185.836 millones en Cedears, la Bolsa de Buenos Aires subió 2,4%. Y lo que es mejor, los ADR argentinos mostraron una suba en bloque del 1% al 5% para Supervielle, Galicia, Loma Negra, Edenor, Mercado Libre, Macro, Pampa E, Cresud, Central Puerto, TGS, IRSA, Telecom e YPF, con baja del 5% para Bioceres.

Cae el petróleo y suben los granos

Finalmente, en commodities hubo variantes importantes. Se anotó una nueva caída del 2,4% para el petróleo (la Opep+ abrirá más sus canillas). Hubo toma de ganancias en metales preciosos y valores mixtos para los metales básicos, aunque con un nuevo récord para el cobre. En Chicago hubo subas para todos los granos. En Rosario mejoraron el maíz, la soja y el trigo, pero cayó fuerte el sorgo. Y el dato más distintivo de la jornada (mientras el oro y la plata hacían pausa) fue una nueva suba del 2,9% para el Bitcoin, con salto de hasta el 12% en el resto de las criptomonedas.