La Cámara de Industriales de Productos Alimenticios (CIPA) presentó los datos de comercio exterior sectorial correspondientes al período enero-febrero de este año, manteniéndose el saldo positivo de la balanza comercial de los productos alimenticios (US$ 55 millones). Sin embargo, el documento explica que “el nivel de dicho saldo es inferior en 20% al registrado en igual período del año 2015”.
Según información en poder de la entidad empresarial, el retroceso del saldo de la balanza comercial “marca una continuidad con la tendencia declinante que se había conformado desde el inicio de la etapa de reducción de las exportaciones iniciada en el año 2012”. Entre las explicaciones para este desempeño vale notar la caída del 6% de las exportaciones de este segmento (en valores), comparado con el mismo período del año anterior.
Aquí confluyen menores volúmenes exportados, y además precios internacionales más bajos. Las ventas externas han caído en casi todos los mercados, salvo Uruguay, pero con un fuerte desplome de las compras de Brasil, que arrastra al bloque Mercosur. En cuanto a las importaciones la baja en el primer bimestre fue algo menor, totalizando 2% interanual.
“Las mejores condiciones creadas a partir de la devaluación del peso argentino respecto del dólar y la eliminación de los derechos de exportación aún no se han reflejado en un aumento de las exportaciones”, concluye el informe.
