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Justicia

No hay garantía de que Lijo y García Mansilla tengan los votos para ingresar a la Corte Suprema

Los candidatos a jueces de la Corte Suprema de Justicia que propone el presidente Javier Milei recogieron más rechazos que apoyos en la Comisión de Acuerdos de la Cámara de Senadores.

Ariel Lijo y Manuel García Mansilla
Ariel Lijo y Manuel García Mansilla
Agustina Rocío Fernández 29 agosto de 2024

Los candidatos a jueces de la Corte Suprema de Justicia que propone el gobierno recogieron más rechazos que apoyos. La nominación de Ariel Lijo sumó 34 impugnaciones mientras que el académico Manuel García-Mansilla registró 22 presentaciones de rechazo, en el proceso de consulta a la ciudadanía habilitado por el Senado previo a las audiencias públicas.

En esta etapa hubo un nivel más bajo de participación que durante el proceso habilitado por el Ministerio de Justicia, tras conocerse los dos nombres del Gobierno para la Corte. En el informe de la cartera que conduce Mariano Cúneo Libarona se informó que hubo 3.578 adhesiones y 328 impugnaciones para Lijo. En tanto, García Mansilla cosechó 3.129 avales y 110 observaciones en el mismo período. 

La intención del Ejecutivo es que el juez Lijo cubra la vacante que existe desde que se jubiló, en 2021, la jueza Elena Highton de Nolasco. En el caso de García-Mansilla, actual decano de la Facultad de Derecho de la Universidad Austral, el Presidente lo propone por anticipado porque pretende que ocupe el lugar que dejará a fin de año el juez de la Corte Juan Carlos Maqueda, que cumplirá 75 años en diciembre.

Luego de que ambos defendieran sus candidaturas, el oficialismo dejó trascender que tiene las firmas para emitir dictamen a favor de los pliegos. Pero lo cierto es que no están garantizados los votos para tratarlo en el recinto, como pretende el presidente Javier Milei. 

El primer objetivo de la Casa Rosada es que el Senado apruebe los dos pliegos juntos: de no suceder, amenaza con retirar ambas postulaciones y todo comenzaría de nuevo con el Ejecutivo proponiendo a dos nuevos integrantes para la Corte.

Las voluntades

Una semana después de la presentación de Lijo ante el Senado, llegó el turno de García Mansilla. Al término de la audiencia, los bloques quedaron habilitados para dictaminar sobre los pliegos en cualquier momento. Para eso, el oficialismo necesita reunir 9 firmas sobre las 17 totales.

La Libertad Avanza tiene solo un representante; siete son de Unión por la Patria; cuatro de la Unión Cívica Radical; dos del PRO; y los tres restantes, de bloques provinciales.

Según estiman en el oficialismo, el pliego de Lijo sumaría entre 11 y 12 firmas, superando los 9 avales que se requieren para tener el despacho de mayoría. En tanto, la nominación de García-Mansilla sumaría, hasta el momento, 9 firmas. 

Los dictámenes pasarán finalmente al recinto de la Cámara Alta, donde se necesitan dos tercios de los presentes. La enorme mayoría de los senadores mantiene el misterio respecto a su postura. 

En el recinto

Si las postulaciones logran llegar a la Cámara Alta, La Libertad Avanza tendrá un enorme desafío por delante. 

Lo cierto es que con 7 miembros en el Senado, y aun reuniendo a todos los bloques de la oposición dialoguista, el oficialismo no alcanza a la mayoría calificada de dos tercios que se requiere para nombrar a jueces de la Corte. Esto significa que, sin el apoyo de senadores de Unión por la Patria, es imposible que se aprueben las designaciones.

A ello se le suma un clima de tensión en el Congreso, en donde el PRO ya comenzó a marcar distancia del Gobierno y La Libertad Avanza no logra ordenar a los suyos. 

La candidatura de Lijo divide transversalmente a los bloques, incluso al oficialismo. Así es que el senador libertario, Francisco Paoltroni, fue expulsado del bloque por sus diferencias en torno a la postulación del juez de Comodoro Py. Además, Juan Carlos Pagotto avisó al interior de su espacio que no acompañará el pliego con su voto.

También la vicepresidente, Victoria Villarruel, se expresó públicamente en contra del nombramiento de Lijo y objetó que no se haya propuesto a una mujer para el cargo. 

Paridad de género

Una de los cuestionamientos reiterados respecto a los candidatos es el hecho de que no se respeta la cuestión de género. 

Sucede que si Milei logra incorporar a Lijo y García-Mansilla, la Corte quedará con una conformación que no tendrá reemplazos en el corto plazo, al menos por jubilaciones. 

Es que Horacio Rosatti tiene 67 años, Ricardo Lorenzetti 68 y Carlos Rosenkrantz 65. En tanto, Lijo tiene 55 años y García-Mansilla 53. Es decir, que faltarán siete años hasta que uno de los cortesanos se jubile y las chances de que ingrese una mujer serían muy pocas.

Las legisladoras Anabel Fernández Sagasti y Juliana Di Tullio sacaron a la luz la falta de equidad durante la defensa de García Mansilla. Y desde el espacio que comanda José Mayans dejaron trascender que una de las salidas para garantizar la presencia de mujeres en el máximo tribunal sería avanzar con una ampliación de la Corte.

Más allá de la negociación con el peronismo, desde La Libertad Avanza tienen la intención de tratar en el recinto los dos pliegos juntos, tal como exigió Milei bajo la consigna "los dos o ninguno". Pero hasta el momento no está garantizado que los candidatos tengan los votos necesarios. 

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