La industria de alimentos y bebidas, sin dudas, es una de las que mejor soportó la caída en los niveles de actividad durante el año pasado y lo que va de éste, sin embargo, al igual que otros sectores productivos supo de tiempos mejores. Empresarios de la industria de la alimentación analizaron ayer junto a autoridades del Ministerio de Agroindustria la posibilidad de instrumentar nuevas medidas para impulsar la producción y las exportaciones del sector, con un ojo puesto en la seguridad alimentaria. Los secretarios de Agricultura, Ganadería y Pesca, Ricardo Negri, y de Agregado de Valor, Néstor Roulet, recibieron a los miembros del Comité Ejecutivo de la Coordinadora de Industrias de Productos Alimenticios (Copal) y evaluaron las llamadas reformas de segunda generación, que permitan desarrollar y diversificar la producción e incrementar las exportaciones de alimentos. Además, se analizaron avances en las negociaciones Mercosur- UE y Argentina-México.
El encuentro sigue a una reunión que los directivos de Copal mantuvieron la semana pasada con el ministro de Producción, Francisco Cabrera, con el fin de instrumentar incentivos fiscales, líneas de financiación y la simplificación de la normativa tributaria.
Ricardo Negri alentó a los empresarios a generar empleos y proyectos de innovación e instó a discutir sobre “competitividad en serio” para que “todos los sectores puedan ganar”. Por su parte, el titular de Copal, Daniel Funes de Rioja, se refirió a las “reformas de segunda generación, que resultan imprescindibles para mejorar la competitividad de la industria”.
